Cuenta atrás para un terremoto 'cripto' en España: el BdE pone coto a la compraventa

En pleno crecimiento del mercado 'cripto', con el bitcoin marcando máximos, llegando a Wall Street y marcando la agenda de países como El Salvador, España se suma definitivamente a la regulación de este mercado. Unos meses después de anunciarlo, el Banco de España ha puesto a disposición de toda persona física o jurídica que quiera ser un proveedor de servicios de cambio de moneda virtual por moneda fiduciaria y ofrecer custodia de monederos electrónicos, un registro que deberá cumplimentar para poder operar en nuestro país. Un paso claro para la regulación de este sector. Eso sí, todo proveedor que quiera seguir con su negocio tiene solo hasta final de mes para empezar el proceso de registro.

Según lo publicado el pasado 21 de octubre por parte del banco central, el 1 de noviembre empezará la cuenta atrás para la publicación del primer listado de proveedores con licencia para operar y tendrán tres meses para publicarlo. Y eso no solo incluye al tipo de casa de cambio clásica, sino que también abre la puerta a bancos y otras entidades que quieran sumarse. Un espaldarazo al sector y una muestra de que el país da la cara a esta industria, pero, ¿qué significa esto para los usuarios? Pues los expertos señalan varias derivadas mientras señalan algo obvio: España no es el primer país en hacer algo así y señala que el terreno sin ley en este mundo está cerca de acabarse, con el terremoto que esto puede suponer.

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Como explica a Teknautas José Antonio Bravo, economista y experto en criptodivisas, la medida española no es nueva, sino que sigue y traspone una de las recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (Gafi), que lo pide como forma de controlar el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo, y que ya habían puesto en marcha en otros muchos países. "Es más, muchas de las informaciones que aparecían en los últimos meses hablando de que las criptomonedas habían sido aceptadas en países como Ucrania o Cuba en realidad se referían a la acción que lleva a cabo ahora el Banco de España". ¿Y qué se busca con esto? Bravo habla de varios puntos: inicio de la regulación, intento de dar respuesta a la demanda del sector y, algo clave, el asunto tributario.

Según explica el economista, el movimiento es la oficialización definitiva de los 'exchange'. Es decir, ya ningún banco ni entidad podrá negarte el meter dinero en una de estas casas de cambio o ponerte problemas con tus transferencias con ellas, pues tendrán licencia para operar, pero por otro lado estas se acercan a algo muy debatido en el sector 'cripto': la colaboración con las instituciones en temas de blanqueo, pero también en posibles problemas tributarios. "A cambio de la regulación te acercas aún más al caso de los bancos. Desde que te abres una cuenta en una entidad, incluso en sitios como Revolut, que está en Lituania, sabes que la normativa internacional le obliga a la entidad a colaborar con las autoridades y dar toda la información sobre ti si es necesario. Ahora, esto también obliga a los 'exchange'", comenta Bravo. A cambio de mayor seguridad y protección se ahoga la idea de un entorno alejado del poder estatal.

Ese, para Bravo, es el principal cambio que trae el registro de cara a los usuarios, que tendrán que ser conscientes de que su actividad está más vigilada, pero puede no ser el único. A la espera de la normativa MiCA, que terminará de regular el mercado en Europa, este registro puede meter en problemas a ciertas empresas si se niegan a registrarse o no cumplen los requisitos. Aunque el economista lo ve difícil en un caso como el nuestro, que solo adapta una petición internacional, no sería la primera vez que un 'exchange' echa el cierre a su operatividad en un país por sus problemas para cumplir la regulación.

"En EEUU ya ha pasado. Por ejemplo, en el caso de Binance, que es quizá el más conocido, yo apuesto porque se acabará creando una sede en Irlanda o un país parecido. Un lugar que ya tenga un registro similar y que le permita operar en toda Europa apoyándose en la normativa compartida, pero habrá que ver cómo avanza el plan", comenta el experto. De no hacerlo y seguir operando sin permiso podrían enfrentar multas millonarias, como ya les ha pasado a varios bancos españoles en relación con la ley 10/2010, de 28 de abril, de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo, que es en la que se basa este registro. "En Corea muchos optaron por cerrar directamente antes de intentar cumplir la normativa o enfrentarse a las multas", añade Bravo.

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¿Qué está pasando aquí con tan poco tiempo para darse de alta? Por lo comentado por fuentes de las 'exchange' y entidades de custodio radicadas en nuestro país, no solo no se sienten atacadas, sino que lo ven como un trampolín que llevan años esperando. Otra cosa será ver qué pasa con las internacionales (Binance, Coinbase, Kraken...), aunque ya tenemos ejemplos de cómo adaptarte para pasar los requisitos. "Yo lo que veo más complicado haciendo un repaso rápido es el tema de la idoneidad de las personas tras la entidad. Es algo subjetivo y no queda muy claro en qué consiste exactamente eso. También piden un certificado de penales, que es algo más sencillo porque sí es tajante", señala Bravo. Para eso, según lo hecho en otros países, podrían optar por colocar en la entidad a personas llegadas de entidades bancarias o relacionadas con este tipo de sectores que den solidez a su solicitud. Binance lo ha hecho en EEUU y también en Europa.

Por su parte, el Banco de España recuerda varios puntos importantes en respuesta a las cuestiones planteadas por Teknautas. "Esta normativa introduce exclusivamente una obligación de registro, pero no establece normas de supervisión financiera, prudencial, gobierno corporativo, seguridad tecnológica ni de conducta de mercado o transparencia informativa. El Banco de España no supervisa, por ejemplo, los riesgos financieros u operativos y de seguridad de estos negocios ni tiene ninguna competencia en materia de conducta sobre estos proveedores", detallan. "Por lo tanto, la inscripción en este registro no implica aprobación o verificación alguna de la actividad realizada por los proveedores de servicios de cambio de moneda virtual por moneda fiduciaria y de custodia de monederos electrónicos por parte del Banco de España".

"Es una auténtica bendición"

A pesar de esto, uno de los actores que ve con más optimismo el lanzamiento de este registro es Salvador Casquero, fundador y presidente del 'exchange' español 2gether. Este empresario, que lanzó su idea en 2016, tras años trabajando en el sector bancario y cuando todavía todo lo relacionado con el bitcoin sonaba muy lejano, cree que es un espaldarazo clave. "Es una auténtica bendición", comenta. Asegura que las empresas españolas de esta industria están, en su mayoría, preparadas para lo que viene y que no tendrán problemas para pasar el corte. ¿Por qué? Porque siguen escrupulosamente la normativa. "Es un calco de lo que ya pasan otras entidades financieras con el añadido de que la tecnología blockchain incluso ayuda a la regulación que buscan las autoridades", señala Casquero.

Casquero habla de un gran paso adelante, que viene obligado por la demanda de los usuarios y el crecimiento del sector y que ayudará a que el usuario se sienta más seguro y protegido y que las compañías de esta industria ganen solidez y confianza, pero deja un detalle: beneficiará, sobre todo, a las empresas que piensen a largo plazo. "Dará seguridad a los usuarios y es lógico que empiecen este tipo de regulaciones. Cada vez se ofrecen más y más servicios y más complejos, como préstamos o 'staking'. Y lo cierto, aunque no suene demasiado bien, es que a los usuarios nos pueden engañar con algo que no conocemos o comprendemos. Por eso es necesaria la regulación y que se cree un marco con normas para todos y que proteja a los usuarios poniéndoselo más difícil a los que quieran engañar a la gente".

Él no cree que ni siquiera los grandes 'exchanges' internacionales se queden fuera de la regulación porque la mayoría ya han tenido que pasar por procesos parecidos en otros países y por el riesgo de las multas. "No creo que se vayan a quedar fuera y además tienen tiempo para amoldarse a la normativa. De momento la idea es que todo el que quiera pueda aceptar las normas del juego y opere siguiendo lo marcado por la regulación que son mínimos que, creo, son necesarios", señala el empresario.

Sobre los próximos pasos, o lo que está por venir tras esta regulación, tanto Casquero como Bravo hablan de la llegada de una regulación más completa por parte de la Unión Europea con MiCA, pero también mencionan otros puntos clave en el recorrido. Como las nuevas recomendaciones de Gafi que, todo apunta, saldrán este mismo jueves.