Cómo usar el famoso método Marie Kondo para organizar de verdad tu móvil

Marie Kondo es uno de los personajes revelación de este 2019. Aunque esta japonesa ya era conocida por muchos gracias a su método para organizar la casa y llevar una vida más feliz y simple, ha sido la traslación de sus ideas a un programa de Netflix el que le ha dado fama mundial. De doblar la ropa a llenar el espacio con cajas clasificadoras, el método Konmari resulta muy útil.

Y no solo para nuestros armarios o nuestras estanterías: los consejos de Marie Kondo sirven para ordenar los dispositivos móviles y eliminar la morralla digital que nos lleve a una vida más plena. Con tu Android o tu iPhone al lado, te contamos cómo aplicar sus enseñanzas entre tantas aplicaciones y pantallas.

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José Manuel Blanco

Borrar las ‘apps’ que no te hagan feliz

El método Konmari habla de buscar el orden para encontrar la felicidad. Y para hallar ese orden, puedes empezar por algo muy sencillo: borrar todas esas aplicaciones que no te hagan feliz. Revisa tu pantalla: si, por ejemplo, te amargas viendo la vida tan feliz que tienen otras personas en Instagram, bórrala; si ya no haces caso a la aplicación del tiempo que te instalaste, bórrala también; y si dejaste de usar Skype cuando WhatsApp lanzó su servicio de videollamadas, despídete de ella. Y así con todas. Otras aplicaciones que puedes borrar son aquellas que dan servicios incluidos en algunas nativas del dispositivo, como grabadoras de audios o calendarios. A no ser que te aporten algo extra muy útil (porque hay muchas y muy buenas), pregúntate si te puedes conformar con las que vienen de fábrica.

Otras de las que te puedes desembarazar fácilmente son las de videojuegos que ya no uses o las de viajes que solo utilizas cuando te vas de vacaciones (Tripadvisor, Blablacar, Couchsurfing…). Cuando las necesites de nuevo, solo tienes que acudir a tu ‘store’.

Este es un buen momento también para desprenderse de ‘widgets’ como el buscador o la barra meteorológica. Quédate solo con los que uses más y tendrás una pantalla más despejada. Al terminar, habrás ganado una pantalla más ligera, en la que tendrás menos iconos o menos ‘scrolls’. También, sumarás memoria libre en el terminal. Todo son ventajas mientras haces tu vida más simple.

Organiza las 'apps' restantes

Ya has borrado muchas de esas aplicaciones. Ahora te queda un batiburrillo de iconos. Tienes otro problema: organizar todos estos para saber dónde se encuentra cada uno.

En primer lugar, decide tu criterio. Por ejemplo, puedes ordenar los iconos, arrastrando y soltando, por temáticas: en una pantalla redes sociales, en la siguiente comida a domicilio, mensajería… También, por frecuencia de uso: en la pantalla principal las que utilices a diario y, detrás, las de apertura esporádica pero suficiente como para no desinstalarlas. Si utilizas el primer criterio, ahora has de valorar en qué pantalla colocarás cada una: las de mensajería primero, luego las redes sociales… Lo importante no es solo ordenarlas, sino también saber dónde se encuentran para no perder tiempo buscándolas.

No hace falta que llenes la pantalla principal de ‘apps’: en ese espacio puedes solo dejar dos o tres, las de más uso, y dejar el resto en pantallas secundarias. Con ello, ganarás también una pantalla principal más minimalista y que no te agobie.

En esta labor, las carpetas que almacenan iconos pueden ser un aliado o un lastre. Al crear una, podemos guardar en ella las ‘apps’ de una misma temática. Así, también borraríamos pantallas en las que hacer ‘scroll’ y lo tendríamos todo organizado en menos espacio. Sin embargo, puede que así olvides que las ‘apps’ se encuentran en esas carpetas, sobre todo si metes muchas ‘apps’ y no te aparecen sus iconos en la vista previa.

Para crear una, pulsa el icono de una de las ‘apps’ y arrastra hacia otra de ellas que quieras que esté en la misma carpeta. Esta se creará automáticamente. Si quieres cambiarle el nombre, deja el dedo sobre este y escribe cuando te aparezca el teclado. Y si quieres sacar las ‘apps’ de ese archivador y llevarlas a una pantalla, arrastralas a uno de los laterales hasta que te aparezca el menú anterior.

En definitiva, las carpetas de ‘apps’ son buena idea, siempre y cuando sepas lo que hay allí dentro desde un vistazo en la pantalla. En general, los móviles no dejan ver más de nueve iconos en esa especie de vista previa, así que no rellenes las carpetas con más.

Si luego no recuerdas en qué carpeta guardaste cada ‘app’, te puedes ayudar de las herramientas del teléfono para encontrarla. Hablamos de la herramienta Buscar en los iPhone o de la barra de Google en los Android, que escrutan entre contactos y ‘apps’, además de hacer las búsquedas tradicionales en internet.

Organizar las notificaciones

El método Konmari no solo es borrar todas aquellas ‘apps’ que te hagan infeliz y organizar el resto de forma que las localices de un solo vistazo. También es gestionar las notificaciones para que solo te lleguen las necesarias. Fue lo que hizo el periodista Christopher Mims siguiendo las directrices de la gurú japonesa y aplicándolas a sus necesidades.

En un artículo, Mims sugirió desactivar las notificaciones de las ‘apps’ cuando no sean necesarias para algo: ¿parar, por ejemplo, la sincronización de Gmail cuando estás trabajando en el ordenador, con una pestaña abierta en el correo electrónico? ¿cerrar todas las notificaciones de WhatsApp para que no te molesten a lo largo de un ajetreado día? Son varias de las opciones en las que puedes pensar

Organizar el contenido multimedia

Ya hemos organizado lo más visible, que son las aplicaciones. Nos hemos quedado con las que nos hacen más felices y las hemos ordenado según nuestros criterios para localizarlas antes. Ahora, toca ocuparse de imágenes, descargas y otros archivos.

Para pasar el plumero por estos archivos, lo primero es seguir la doctrina de ‘tirar’ lo que no nos haga felices: fotos desenfocadas, memes que nos mandaron por WhatsApp y que ya no nos hacen gracia, el archivo .pdf en el que leímos una convocatoria de becas… Una vez hecho, nos quedan todavía algunos archivos que sí nos importan. Con ellos, tenemos dos opciones: dejarlos en el teléfono o subirlos a la nube y llevarlos a discos duros externos para liberar espacio y no perderlos. Y hablando de la nube: aunque esos archivos no estén en tu teléfono, tal vez quieras aprovechar para hacer una limpieza en Google Drive o Dropbox, donde también se puede alcanzar el orden.

Las carpetas Descargas, Archivos o similar (varía con el modelo de teléfono) son ese armario ropero en el que Kondo buscaría las prendas de vestir que llevas años sin ponerte. Inspecciónalas a fondo para borrar los cupones descuento que imprimiste hace dos años y dejaste allí olvidados o los billetes de tu último viaje de tren. No te hacen feliz, ¿verdad? A la vez que nos deshacemos de todo este contenido, también podemos borrar otras pequeñas cantidades de espacio interno, como la memoria caché de algunas aplicaciones.

Siguiendo todos estos consejos, tu teléfono se verá más ordenado y simple, y tú estarás más feliz. Y además, respirará con más espacio libre que te sería útil en el futuro. Kondo se enorgullecería de ti, con independencia de cómo tengas la casa.