Los latinoamericanos ven España incluso mejor que su propio país... excepto uno

¿Qué es en lo que piensan los latinoamericanos cuando se habla de España? El elemento que más se repite en las respuestas es, con diferencia, la gastronomía. La paella, jamón y las tapas. Lo siguiente son sus dos principales ciudades: Barcelona y Madrid. Inmediatamente después vienen el idioma, los toros y el fútbol. Marca España.

Más allá de los tópicos, la imagen de España en Latinoamérica ha variado mucho a lo largo de la historia y ha pasado por todos los registros posibles, desde el más distante hasta el más amistoso. Hoy en día, la mayoría de la población del otro lado del océano nos mira con buenos ojos. De hecho, con mejores que a sí mismos, con una excepción. Según el Barómetro de la imagen de España (BIE), elaborado por el Real Instituto Elcano con el objetivo de conocer la valoración y opinión de los latinoamericanos sobre España, la mayoría de los encuestados de diversos países puntúan mejor a España que a su propio país. Todos, salvo uno: México.

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La encuesta de Elcano, realizada a más de 4.000 personas, refleja la opinión de 8 países: Guatemala, México, Perú, Ecuador, Brasil, Colombia, Argentina, Perú y Chile. Dentro de esta lista, los países que mayor nota otorgan a España son México y Guatemala, con un 7,3, y 7,4 sobre 10. Mientras que, según se baja al sur, la nota desciende, siendo Perú y Chile los que peor valoración otorgan, un 6,6 y un 6,5 respectivamente.

Aunque dentro de la región el país azteca es uno de los que mejor valoración otorga a España, es también el único país que se valora a sí mismo por encima. Una anomalía dentro del estudio, que refleja la "notoriamente baja autoestima" de la región. Pero el caso mexicano atiende a razones concretas. "México tiene una percepción superior sobre España por razones de orgullo. Los resultados tienen que ver más con la idiosincrasia que la percepción política", argumenta Carmen González Enríquez, investigadora sobre opinión pública de Elcano, en la presentación del informe celebrada este miércoles. "Esta misma valoración se ve también en países de Centroamérica, como por ejemplo Guatemala", a El Confidencial.

"Hubo matanzas, imposiciones. La llamada Conquista se hizo con la espada y con la cruz", escribió en 2019 el presidente del país norteamericano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), en una carta dirigida al rey Felipe VI en la que le exigía que se disculpara en nombre de España por la época colonial. Este episodio supuso el pico de la tensión en las relaciones bilaterales, pero no fue la única disputa.

Aun así, la línea más dura del discurso antiespañol en México (y otras partes de Latinoamérica) tampoco ha sido el elemento más definitorio contra la imagen de España. De hecho, según apunta el informe utilizando datos de años atrás, el barómetro ratifica "una completa recuperación de la imagen de España" desde el pico más bajo durante la crisis económica, y alcanzando cifras de comienzos de siglo (2003).

España tiene, en general, una imagen positiva en América Latina con una valoración de 6,9 puntos sobre 10, seguido por Francia, Italia o Estados Unidos, con una nota muy similar. Sin embargo, muy por encima de estos estados se encuentra Alemania, con un 7,5. Una nación que aparentemente no guarda una relación preferente con los estados latinoamericanos. Este resultado responde, como explica la investigadora, con la percepción de influencia en la Unión Europea y su prestigio internacional.

Historia e ideología en las respuestas

El barómetro también apunta a que el país que ejerció una mayor influencia en la historia de su país (excluyendo a los brasileños) en los siglos pasados, sobre todo del XVI al XVIII, es España, aunque solo con un 60%. "Este resultado es muy llamativo", dice Enríquez y asegura que la respuesta es "muy preocupante", respecto a la percepción histórica de nuestro país. Unos resultados que, según menciona la investigadora, se ven más acentuados en la población más joven y de menor nivel de estudios.

Por otra parte, un 33% cree que fueron otras naciones o países los más influyentes en su historia en esos siglos y un 7% no puede citar a ningún país que ejerciera ese papel. Por lo que una gran mayoría tiene en cuenta el pasado histórico, aunque "los encuestados con una ideología de izquierdas tienen una visión más negativa sobre España que los orientados a la derecha", aclara Enríquez. Según explica el estudio, la imagen de España también mejora entre los encuestados que tienen un nivel educativo más alto, algo que ocurre de la misma manera con la percepción que tienen en la zona de los demás países europeos.

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Respecto al atractivo de España, la potencia turística es el atributo mejor valorado en América Latina y ningún aspecto importante del país recibe un suspenso en ninguno de los ocho países de la muestra. Sin embargo, hay importantes diferencias entre la visión europea y la latinoamericana: América Latina valora mejor que Europa las infraestructuras españolas, su sistema educativo, su economía, su tecnología y su producción cultural actual. España también despierta sentimientos de confianza y simpatía en América Latina, mayores entre las personas de más edad. Además, los españoles son vistos mayoritariamente como simpáticos, cultos y amables, pero también orgullosos. Los países andinos (Chile, Perú, Ecuador y Colombia) son los más críticos respecto al carácter orgulloso que perciben los encuestados.

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España aparece como el tercer país más atractivo para la emigración latinoamericana, después de Canadá y EEUU. Obviamente, el idioma desempeña aquí un papel clave, pero también la existencia de redes de apoyo formadas por migrantes de los mismos orígenes geográficos. El atractivo migratorio español es mayor entre los que tienen un bajo nivel de estudios. Comparando entre sí los países de la muestra, la predilección de los argentinos por nuestro país es muy superior a la del resto.

China es elegida como el segundo aliado internacional preferido, pero a una gran distancia del líder, EEUU. España aparece en cuarto lugar, tras Canadá. La influencia del gigante asiático es una cuestión —junto con Rusia— que la UE trata de frenar en el Sur Global. Su influencia ha sido motivo de debate en los diferentes órganos ejecutivos y Bruselas se ha marcado una línea clara para no perder su relación con América Latina. Sin embargo, respecto a los datos de la muestra, aún falta esfuerzo para cambiar su percepción.

Opinión

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Sin embargo, el resultado que valora mejor la investigadora es que "la mejora de la imagen de España, en lo que se refiere al informe de otros años, tiene que ver con la recuperación económica respecto a la crisis del 2008". "Caímos en imagen respecto a los datos económicos, pero ahora España, ya no solo en América Latina, sino en Europa y el resto del mundo, también en los países del G7, ha recuperado su imagen, incluso está por encima de ese momento previo a la crisis", concluye Carmen González Enríquez.