Tesla compra una empresa especializada en recargar coches eléctricos por inducción
Wiferion, una empresa alemana dedicada a la recarga de vehículos eléctricos sin necesidad de cable, ha sido adquirida por Tesla, en línea con una recurrente preocupación de Elon Musk: simplificar aún más la carga de la batería
La startup Wiferion, una joven compañía germana especializada en la recarga sin cable de vehículos eléctricos, con aplicaciones sobre todo en el sector industrial y de los vehículos pesados, ha sido adquirida por Tesla, y aunque se desconocen los pormenores del acuerdo, firmado en las últimas semanas, algunos medios alemanes hablan de cifras en torno a 76 millones de dólares (69 millones de euros).
Aunque la recarga wireless ha sido probada ya por otros fabricantes de automóviles, como Volvo, Audi, Renault, BMW, Lexus o el grupo Stellantis, en este caso mediante su proyecto Arena of the Future, Tesla no oculta que estaría interesada en ser la primera marca en ofrecer la tecnología de carga por inducción para sus coches de forma masiva, pues desde hace tiempo trabaja en un sistema alternativo al empleado actualmente en todos los vehículos eléctricos: nos paramos junto a una estación, bajamos del coche, conectamos un cable a la toma del vehículo y comienza la carga, mientras que, al finalizar esta, debemos desconectar el cable, entrar al coche y marcharnos. Hasta ahí, nada diferente a lo que hacemos, por ejemplo, con los automóviles de combustión, solo que multiplicando los tiempos. Pero Elon Musk busca un sistema más automatizado, y Tesla llegó a contar con un prototipo de estación dotado de un brazo robotizado que se encargaba de conectar el cable y desconectarlo después, aunque las pruebas no pasaron de ahí.
En cambio, la recarga por inducción sigue siendo contemplada por muchos fabricantes, Tesla incluida, como el futuro de las operaciones de carga, y la compra de Wiferion podría ir en ese camino. Además, la compañía alemana ha defendido tradicionalmente que su sistema de recarga por inducción soluciona algunos de los problemas tradicionales en ese tipo de dispositivos, como la pérdida de eficiencia en la operación o la dificultad para estacionar el vehículo sobre el punto exacto que activa la operación. En el primer caso, Wiferion afirma que la eficiencia de su recarga wireless es un 93% de la que tendría esa misma recarga mediante un cable, mientras que en lo referente al posicionamiento exacto del coche sobre la fuente de energía, su sistema admite desviaciones de hasta 40 milímetros, superiores, al parecer, a las de otros equipos.
La startup Wiferion, una joven compañía germana especializada en la recarga sin cable de vehículos eléctricos, con aplicaciones sobre todo en el sector industrial y de los vehículos pesados, ha sido adquirida por Tesla, y aunque se desconocen los pormenores del acuerdo, firmado en las últimas semanas, algunos medios alemanes hablan de cifras en torno a 76 millones de dólares (69 millones de euros).