Qué son los 'radares en cascada', la nueva vía para controlar la velocidad en España
De manera habitual, los conductores suelen levantar el pie al llegar a un control de velocidad para, posteriormente, volver a acelerar: esa situación puede estar próxima a acabarse
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F252%2F5d7%2Fc06%2F2525d7c06e2dc80f94ad9db118f54ac1.jpg)
Vas circulando por la carretera y, de repente, observas un cartel en un costado en el que se avisa de la próxima presencia de un radar. Cauto, decides levantar un poco el pie del acelerador, con el objetivo de ajustarte a la velocidad máxima de la vía y evitar una hipotética multa. Pocos metros más adelante, observas dónde está el cinemómetro y, tras rebasarlo por debajo del límite, vuelves a aumentar ligeramente la velocidad... Sin embargo, hay un 'truco' para multarte.
La Policía Foral de Navarra ha comenzado a utilizar un nuevo sistema para conseguir 'cazar' a los conductores a los que les gusta circular por encima de la velocidad máxima permitida en la carretera. A sabiendas de que el conductor ya se conoce dónde están los radares y dónde debe ir más despacio para evitar castigos económicos, durante la pasada Semana Santa han decidido llevar a cabo un nuevo sistema hasta ahora poco utilizado.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F44a%2F33c%2F12e%2F44a33c12ed4b765a3f253ed4b314d261.jpg)
Se trata de los 'radares en cascada', una manera de coger 'in fraganti' a los conductores más desprevenidos e imprudentes. Se trata, ni más ni menos, que de colocar un cinemómetro móvil algunos metros después del fijo, el control que todo el mundo sabe dónde está. El conductor levanta el pie ante la presencia de un punto fijo de control de velocidad, a sabiendas de las consecuencias y, al pasarlo, vuelve a acelerar sin saber lo que le espera.
Unos metros más adelante, cuando el usuario está convencido de que ha pasado el peligro de ser multado por exceso de velocidad, completamente confiado, vuelve a aumentar la velocidad de su vehículo, y entonces le espera un radar móvil. Al no tener prevista esta situación, normalmente el conductor termina por mostrar su cara real, siendo multado por circular a una velocidad superior a la permitida y, por tanto, sufriendo la consiguiente multa.
Ha sido 'Navarra.com' quien ha dado a conocer el método puesto en marcha de manera experimental por la Policía Foral. Esta institución asegura que el objetivo no es otro más que tratar de reducir el número de accidentes provocados por el exceso de velocidad, enviando un mensaje claro al usuario: ojo, si aceleras nada más pasar un radar, te puedes encontrar con una sorpresa inesperada. ¿Cuál es la mejor opción? Circular siempre dentro de los límites marcados.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fe91%2Fc0a%2Feb7%2Fe91c0aeb70d0e59521d08a36edcb1565.jpg)
Concienciar al usuario
Según indica el diario navarro, esta nueva táctica seguida en las carreteras fue puesta en marcha a petición del fiscal de Seguridad Vial de la comunidad. Se envió una circular a los cuerpos de seguridad de la zona explicándoles esta estrategia de 'radares en cascada', donde el principal objetivo no es otro que concienciar a los conductores de que, tras un radar, no existe carta blanca para circular a una velocidad por encima de la permitida.
De momento, no se sabe si solo ha sido una estrategia puntual o si, en un futuro muy próximo, la Dirección General de Tráfico (DGT) tiene en mente impulsar esta estrategia en sus carreteras. Lo que es una evidencia es que, en los últimos años, la DGT está apostando fuerte por disminuir drásticamente el número de fallecidos al volante: dependiendo de los resultados obtenidos en Navarra, podríamos ver los 'radares en cascada' también en el resto de carreteras españolas.
Vas circulando por la carretera y, de repente, observas un cartel en un costado en el que se avisa de la próxima presencia de un radar. Cauto, decides levantar un poco el pie del acelerador, con el objetivo de ajustarte a la velocidad máxima de la vía y evitar una hipotética multa. Pocos metros más adelante, observas dónde está el cinemómetro y, tras rebasarlo por debajo del límite, vuelves a aumentar ligeramente la velocidad... Sin embargo, hay un 'truco' para multarte.