Sebastian Vettel, la revelación del campeonato

Jenson Button se ha convertido, por méritos propios y de su monoplaza, en el destacado líder del Mundial de Fórmula Uno. Pero a pesar de su buen hacer a los mandos del Brawn GP001 y de su histórica campaña -tan sólo comparable a las realizadas por pilotos de renombre como Jim Clark o Michael Schumacher- no se ha convertido en el piloto del que habla toda la prensa del motor. Éste tiene otro nombre: Sebastian Vettel, que se está postulando como un futuro campeón del mundo, aunque aún le queda mucho por aprender.

Button, con su victoria en el Gran Premio de Turquía ha conseguido una racha de seis victorias en siete carreras, una efeméride muy difícil de lograr. Estos resultados tan sólo han sido conseguidos por Clark y Schumacher a lo largo de la historia. El británico lo hizo en el año 1965, mientras que el alemán lo consiguió en 1994, aunque en el año 2004 consiguió el récord absoluto, con doce victorias en las trece primeras carreras.

Pero a pesar de estos asombrosos resultados, el principal descubrimiento de la presente temporada ha sido Sebastian Vettel, un joven alemán de veintidós años que se encuentra actualmente tercer clasificado del Mundial y que se ha convertido en el único 'rival' de los Brawn GP. La superioridad de Button y Barrichello en pista es más que evidente, pero el Red Bull pilotado por Vettel es el único capaz de mantener algo de emoción en un Mundial aburrido por la superioridad del británico.

Vettel es la gran esperanza alemana en la Fórmula Uno. Aún es un piloto que está algo verde -algunos errores suyos en pista así lo corroboran-, pero está demostrando estar llamado a ser un futuro campeón de Fórmula Uno. Aunque no comenzó demasiado fino la presente temporada -con un decimotercer puesto en Australia y un decimoquinto en Malasia-, el joven piloto ha enderazado su rumbo en las útimas cinco carreras, a pesar de haber tenido que abandonar en Mónaco.

El alemán es uno de los grandes descubrimientos de la presente temporada. Ya el año pasado consiguió su primer triunfo de su carrera en la Fórmula Uno en el Gran Premio de Italia, una carrera en la que partía desde la 'pole position' y que le convirtió en el piloto más joven de la historia en conseguir ambos logros -pole y victoria-. Ahora, ha llegado el momento de su consagración, aprovechando el gran monoplaza que posee, diseño de Adrian Newey, y que es uno de los causantes de que Red Bull ocupe el tercer y cuarto puesto de la clasificación de pilotos en la actualidad.

Button y Vettel son dos buenos pilotos con dos grandes coches. Probablemente, en el duelo entre monoplazas gane Brawn GP, mientras que en el de pilotos -técnicamente hablando- lo haga Vettel. Pero al joven alemán aún le queda mucho por aprender para estar en lo más alto del Mundial de Fórmula Uno. De momento, está demostrando su calidad al volante, y aunque tiene un amplio margen de mejora, seguro que pronto dará mucho que hablar. Y, si no, tiempo al tiempo.