Las presiones medioambientales apuntalan el 'boom' de las materias primas

Los inversores están incrementando sus apuestas de que el esfuerzo global por reducir las emisiones de carbono dificultará la producción de mercancías, aumentando los precios de todo, desde el gas natural hasta el aluminio.

Con productores como Exxon Mobil Corp. y Chevron Corp. bajo presión de los inversores por minimizar su impacto medioambiental, muchos están limitando su gasto en nueva producción. La prudencia llega después de años de caída de la inversión en producción, impulsada por unos precios de materias primas por los suelos y una estrategia centrada en devolver el dinero a los accionistas, según los analistas.

Se prevé que el gasto en la producción de gas y petróleo sea más elevado en los próximos años, pero se mantenga por debajo de 2019

Ahora se prevé que el gasto en la exploración y producción de gas y petróleo sea más elevado en los próximos años, pero se mantenga por debajo de los niveles de 2019 y entre un 40% y un 50% por debajo del récord de 2014, según muestran cálculos de la consultora Rystad Energy. Incluso con los precios de metales como el cobre en sus niveles más altos en años, se espera que el gasto anual de las empresas de minería se mantenga un 30% o más por debajo de un máximo de 2012 en cada uno de los próximos cinco años, según datos recopilados por el banco de inversión Jefferies.

Las apuestas por alteraciones en la oferta y la recuperación de la demanda ya están aumentando los precios de las materias primas para consumidores y empresas y alimentando la preocupación inversora por la creciente inflación. Si bien las previsiones a corto plazo para la demanda son imprecisas por la propagación de la variante delta del coronavirus y la agitación que rodea al promotor inmobiliario chino altamente endeudado Evergrande Group, algunos analistas aún esperan que el suministro limitado mantenga los precios de los productos básicos.

Tras los recientes aumentos en los precios, un índice de productos básicos se encuentra ahora camino de su mayor aumento porcentual anual registrado en datos que se remontan a hace tres décadas, según FactSet. Este año, la subida en el petróleo ha provocado que los consumidores estén pagando algunos de los precios de gasóleo más elevados en años, impulsando el precio estadounidense medio de un litro regular hasta cerca de 12,10 dólares, según indican datos del rastreador de precios GasBuddy.

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El gas natural, utilizado como combustible de producción energética para enfriar las casas en verano y calentarlas en invierno, hace poco alcanzó máximos en siete años y medio, por encima de los cinco dólares los 300 kW. Los precios podrían subir aún más si las frías temperaturas de los próximos meses aumentan la demanda, según los inversores. La escasez de gas natural y energía eólica ha disparado los precios de la energía europeos hasta niveles récord.

La tendencia se extiende a los metales industriales que se necesitan para fabricar coches eléctricos y viviendas. Los precios del cobre registraron máximos históricos en mayo, en parte debido a cortes de suministro y demoras en los proyectos provocados por preocupaciones ambientales en todas partes, desde Minnesota hasta Alaska. En las últimas semanas, el aluminio se ha disparado, impulsado por limitaciones en la energía que los fundidores de aluminio de China pueden consumir.

Si bien las preocupaciones ambientales no son nada nuevo para las empresas que consumen grandes cantidades de agua y energía y a menudo contribuyen a la contaminación local, los inversores de ‘commodities’ dicen que el alcance mundial de la presión actual no tiene precedentes. Algunos alegan que los productos básicos están entrando en un ciclo definido por un suministro irregular y precios volátiles a medida que disminuye la capacidad de impulsar la producción.

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Para algunos productos básicos, “estamos de forma justificada ante el precipicio de no tener suficiente”, declara Rory Johnston, execonomista de un banco que ahora escribe una ‘newsletter’ sobre las materias primas. “Resulta delicado y cada vez más difícil prever las consecuencias”.

A medida que desarrollar nuevas fuentes de suministro de productos básicos se vuelve más complicado para las grandes empresas, algunas firmas están invirtiendo millones en reciclar materiales antiguos y en métodos de producción verdes. Algunos analistas también esperan que las empresas privadas y los países que se enfrentan a un menor escrutinio ambiental, como la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, aumenten el suministro y expriman los precios más altos, lo que les otorgaría una mayor influencia en dichos mercados.

Una campaña activista inversora centrada en el clima, que consiguió puestos en el consejo de Exxon con una pequeña participación en la compañía a principios de año, fue una señal de aviso para todos los productores de materia prima, obligándoles a acelerar sus objetivos ambientales, según los inversores. Chevron se ha preparado para un desafío inversor similar, según publicó ‘The Wall Street Journal’ a principios de mes.

Las autoridades estadounidenses han declarado que quieren aumentar la producción doméstica de materiales cruciales como el litio

Muchas empresas también son cautelosas a la hora de aumentar el gasto en producción después de que aumentos en la oferta anteriores hundieran los precios de los productos básicos, un argumento adicional que está haciendo que muchos productores se mantengan prudentes. “Incluso si deciden gastar el dinero ahora, llevará cierto tiempo que el gasto llegue realmente”, declara Darwei Kung, jefe de productos básicos y gestor de cartera en DWS Group.

Un motivo por el que algunos inversores son especialmente alcistas en metales como el cobre, el aluminio y el litio —componente clave de las baterías recargables que alimentan los vehículos eléctricos— es que se espera que la demanda de dichos materiales crezca en proyectos de energías limpias, aunque las preocupaciones ambientales limiten la oferta.

Las autoridades estadounidenses han declarado que quieren aumentar la producción doméstica de materiales cruciales como el litio, pero los proyectos en California, Nevada y Carolina del Norte se enfrentan a oposición local y largos procesos de obtención de permisos. Los precios del litio han aumentado en los últimos meses.

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Una mayor presión ambiental en Estados Unidos podría hacer que el país siguiera dependiendo de actores extranjeros dominantes como China para muchos materiales, según los analistas. Otro resultado podría ser que la ya costosa lucha climática se vuelva todavía más cara o requiera más tiempo, indican.

“Hay muchas consecuencias inesperadas con todos estos desarrollos”, declara Adam Rozencwajg, socio director de la firma de inversión en recursos naturales Goehring & Rozencwajg Associates, que ha apostado por unos mayores precios de productos básicos a través de las acciones de los productores. “Las cosas avanzan rápidamente”.

China incluso ha liberado reservas de petróleo y metales industriales en los últimos meses para enfriar el reciente repunte en los precios. Aun así, algunos inversores no creen que esa y otras fuentes suplan las brechas de suministro a más largo plazo, en parte porque ahora hay pocas partes del mundo exentas de la presión ambiental.

“La mayoría de los factores que limitan la oferta ahora están relacionados con cuestiones medioambientales”

“Ahora es importante en todas partes”, declara Chris LaFemina, analista de metales y minería en Jefferies, que espera que la limitación de suministro ayude a elevar los precios. “La mayoría de los factores que limitan la oferta ahora están relacionados con cuestiones medioambientales”.

*Contenido con licencia de ‘The Wall Street Journal’.