Es noticia
Resa ofrecerá pisos compartidos en su futura residencia de estudiantes de Chamartín
  1. Inmobiliario
  2. Inversiones alternativas
PRECIOS, A PARTIR DE 950 EUROS AL MES

Resa ofrecerá pisos compartidos en su futura residencia de estudiantes de Chamartín

Resa impulsará este nuevo concepto de alojamiento en su próxima residencia de estudiantes en la zona norte de Madrid, que abrirá sus puertas el próximo mes de septiembre

Foto: 'Render' del futuro proyecto Resa Chamartín.
'Render' del futuro proyecto Resa Chamartín.
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Las habitaciones compartidas en residencias de estudiantes llegan a España. Resa, el mayor operador de este tipo de activos en España, impulsará este nuevo concepto de alojamiento en Resa Chamartín, su próxima residencia de estudiantes en la zona norte de Madrid, que abrirá sus puertas el próximo mes de septiembre, con el nuevo curso escolar 2024-2025.

Un nuevo concepto de alojamiento implantado en otros países de Europa, como el Reino Unido y Estados Unidos, y que la compañía traerá a España atendiendo a las peticiones de los residentes presentes y futuros.

Son lo que se denomina clústeres, un espacio similar al de un piso compartido, con varias habitaciones, en el que los estudiantes contarán con una sala común y cocina compartida, además habitaciones individuales con baño propio.

Resa Chamartín, con una superficie total construida de cerca de 11.300 metros cuadrados, contará con 320 camas con, aproximadamente, un 30% de habitaciones individuales, un 30% de habitaciones dobles —algunas con terraza y todas con cocina propia— y los clústeres, que serán de dos tipos: 28 plazas para clústeres de 30 metros cuadrados que podrán ser compartidos por cuatro personas, y 24 plazas para clústeres de 65 metros cuadrados, para un máximo de seis personas. Repartidos de momento en un total de 11 pisos compartidos.

Desde 950 euros las habitaciones dobles hasta 1.300 euros el producto más prémium

Una puesta que se produce en un momento de mayor dificultad de acceso a la vivienda por parte de los más jóvenes para irse a un piso compartido. Ante la falta de profesionalización de la oferta en el mercado de los pisos compartidos, los elevados precios y un fuerte aumento por este tipo de soluciones habitacionales, Resa ha visto una oportunidad, lo que le ha llevado a impulsar esta estrategia en su nueva residencia en Madrid, estrategia, por otra parte, testada en otros países como Reino Unido.

¿Los precios? Desde 950 euros al mes las habitaciones dobles, las más económicas, hasta 1.300 euros el producto más prémium de habitaciones individuales. Con todo incluido: limpieza, mantenimiento, suministros, gimnasio, salas de uso común, incluso piscina. Excepto la comida

¿Y los contratos? Los contratos empiezan en septiembre y acaban a finales de junio, con el año académico. Son contratos de 10 meses. "No les obligamos a pagar el verano, porque lo normal es que el residente no lo necesite. En el caso de que lo necesitara, porque ha tenido un mal curso y necesita alargar porque necesita quedarse a estudiar o tiene un convenio de prácticas, por ejemplo, puede alargar su contrato si lo desea, pero únicamente si lo desea. Si no, cuando acaba el curso académico recogen sus cosas y tranquilamente se van a casa", explica a El Confidencial Tatiana Aneiros, directora de Operaciones en Resa.

placeholder 'Render' del futuro Resa Chamartín.
'Render' del futuro Resa Chamartín.

"Dentro de la futura residencia, la oferta permite al residente hacer un ciclo de vida universitario casi completo, de tal manera que si está cómodo y a gusto, no tiene por qué dar el salto al piso compartido, sino que puede quedarse dentro de la residencia porque tiene una tipología de producto que se adapta a lo que necesita en cada momento vital", asegura Aneiros.

"Ahora, con Resa Chamartín, lo que intentamos es hacer un modelo mixto e incluir diferentes tipologías de producto y en función de sus necesidades, el universitario optará por una opción u otra. Es decir, a lo mejor, el primer año prefiere un modelo más individual, pero igual en su segundo año, cuando ya haya hecho su pequeño círculo de amigos, probablemente, preferirá ir a un modelo de un clúster con cuatro o seis amigos con los que compartir ese espacio común".

Y añade, "hemos observado que los universitarios, después de dos o tres años, hacen amigos y tienen la necesidad de buscar un espacio para compartir dentro de esta pequeña comunidad de amigos, y con ellos deciden saltar al mercado de la vivienda. Y nos ha pasado que después de una mala experiencia, bien porque esperaban tener una oferta mucho más competitiva a nivel de precios, bien por temas de convivencia, ya que al final son responsables de pagar las facturas de la luz o resolver problemas de mantenimiento, han vuelto a la residencia universitaria".

¿Por qué Chamartín y por qué zona norte?

"En Chamartín están abriendo universidades que, probablemente, van a traer perfiles de estudiantes muy distintos. Tienes el Centro de Alto Rendimiento Musical, escuelas de diseño, de innovación, La Nebrija, el Campus de la Paz de la UAX... Probablemente, este modelo mixto encaje también con la nueva demanda que va a haber en la zona. Además, en Chamartin, esperamos entre un 20% o un 30% de estudiantes internacionales, si bien es cierto que el gran peso lo tendrán los estudiantes nacionales. En Resa, prácticamente en todo nuestro portfolio tenemos un peso muy importante de la demanda nacional, pero sí que esperamos en Chamartín tener también presencia internacional, un mix equilibrado", asegura Aneiros.

"Adaptar el modelo de clústeres en residencias ya operativas es complicado y puede tener un sobrecoste bastante elevado"

"Además", explica, "cuando nos embarcamos en un proyecto vemos cuál es la ubicación de la residencia y analizamos la demanda, qué perfil de residente va a venir. Si tienes muchas escuelas de arquitectura cerca, normalmente poníamos una sala de arquitectura, si tienes una escuela de música muy potente, a lo mejor deberías plantearte tener una sala insonorizada para que los chicos puedan ensayar... Hay determinadas cosas que tienes que pensar antes de aterrizar el proyecto. Una vez que ya más o menos ves qué perfil de residente va a venir, qué necesidades tienes que cubrir, ahí es cuando aterrizas la lo que sería el diseño arquitectónico, tanto de las habitaciones como de los espacios comunes".

Con más de 30 años de experiencia, Resa es el operador de residencias universitarias más importante en España. Con un total de 11.300 plazas de alojamiento, más de 45 convenios y acuerdos de colaboración con las principales universidades e instituciones y 41 activos presentes en 21 ciudades españolas —nueve en Madrid—, se posiciona como la red más extensa del país.

placeholder 'Render' del futuro Resa Chamartín.
'Render' del futuro Resa Chamartín.

Además, la compañía cuenta con un programa 360º pensado por y para el estudiante que integra un amplio abanico de servicios y actividades focalizado al 100% en su bienestar e integración en esta nueva etapa universitaria, consiguiendo una tasa de renovación de cerca del 40% en sus residencias para este curso 2023-24.

"Lo cierto es en España, normalmente, tanto el residente como los padres prefieren la habitación individual, con el baño de uso privativo, pero en otros mercados más maduros, como pueden ser por ejemplo el inglés y americano, es bastante habitual el tener este modelo de clúster, es decir, como si fuese un pequeño apartamento, pero dentro de una unidad más grande, que es una residencia universitaria, que normalmente está en un campus. Un modelo en el que se comparten los espacios comunes", explica la directora de operaciones en Resa, quien añade que, "a diferencia de un piso compartido, hay un tema clave de seguridad en todos los niveles. El residente o sus padres saben lo que han comprado, no hay sorpresas. Y yo creo que esto es muy importante. La seguridad y la confianza en lo que van a recibir, también en cuanto al estado de las instalaciones. Sabes que vas a recibir algo con una calidad mínima".

Respecto a la implantación de pisos compartidos en otras residencias ya en funcionamiento de Resa, Aneiros asegura que "en residencias ya construidas, adaptar el modelo es complicado y puede tener un sobrecoste bastante elevado. Sí que es cierto que tanto en los nuevos proyectos como en algunas remodelaciones que tenemos encima de la mesa sí que estamos contemplando cómo evolucionarlo hacia un modelo mucho más flexible. Está encima de la mesa", mientras que sobre la puesta en marcha de nuevos proyectos, "estamos buscando oportunidades. Somos operadores desde hace 30 años, somos los primeros que hemos empezado en el sector y claro que sí que buscamos oportunidades. Estamos buscando activamente, pero como en los últimos 30 años, no es nada nuevo. Seguimos creciendo", concluye.

Las habitaciones compartidas en residencias de estudiantes llegan a España. Resa, el mayor operador de este tipo de activos en España, impulsará este nuevo concepto de alojamiento en Resa Chamartín, su próxima residencia de estudiantes en la zona norte de Madrid, que abrirá sus puertas el próximo mes de septiembre, con el nuevo curso escolar 2024-2025.

Residencias de estudiantes Mercado inmobiliario
El redactor recomienda