Del mercadillo al tejado: el plan para integrar en el mercado laboral a 12 jóvenes gitanos

Más de diez jóvenes gitanos están viviendo la experiencia que puede cambiar sus vidas. Alejarse de la inestabilidad laboral, de contratos temporales y precarios, y luchar contra el estigma que la sociedad todavía les impone ahora es posible gracias a un proyecto auspiciado por el Secretariado Gitano. Durante meses, los integrantes del programa han aprendido cómo realizar una instalación fotovoltaica. Ahora ha llegado el momento de demostrarlo de la mano de los expertos de Ecooo, líderes en proyectos de autoconsumo: juntos se afanan por hacer de la sede del Secretariado Gitano en Entrevías, Vallecas, un edificio protagonizado por la energía sostenible y de kilómetro 0.

Jesús Barrull tiene 20 años y, hasta ahora, siempre se había dedicado a la venta ambulante, aunque también ha trabajado en algún supermercado. Desde hace unas semanas, su mentalidad es otra: "Ni te puedes imaginar el tiempo que hacía que yo no me levantaba ilusionado. Ir a trabajar así da gusto". Él es uno de los jóvenes que participa en el proyecto del Secretariado Gitano, a donde se dirigió cuando se enteró que podrían formarle como instalador de placas fotovoltaicas. "Yo no tenía ni idea de que algo así existía, pero me gusta mucho", comenta.

Una vez elegido entre los candidatos, tanto Barrull como sus compañeros recibieron formación teórica durante más de tres meses. "Según aprendía algo nuevo, más me gustaba", cuenta. Para él, es la primera vez que encuentra un trabajo que le llena, según relata: "Me siento de otra manera, útil, y es que desde que tengo el título de instalador mi vida ha mejorado".

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Introducirse en el mundo de las placas solares también le ha aportado ciertos conocimientos de electricidad que este joven de Entrevías aplica en su día a día, en su casa. "Yo he tenido muchos problemas, mi vida no ha sido fácil y he tomado caminos difíciles, así que puertas así, abiertas, se agradecen y merecen mucho la pena", añade. Por fin, ese "pan para hoy y hambre para mañana" que le aportaba la venta ambulante se ha desvanecido. "Ya no tengo que ir al día, por primera vez tengo una estabilidad gracias a todo lo que me han enseñado desde Ecooo, que me han valorado y apreciado mucho, y acompañado como ningún otro", dice entusiasmado.

Barrull sabe bien el estigma que pesa todavía sobre el pueblo gitano, cuyo Día se celebra el próximo 8 de abril. "Muchos de nosotros lo pasamos muy mal, precisamente por eso, porque no tenemos un trabajo estable. Yo ahora me veo como nunca, no estoy estancado y tampoco me ahogo en un vaso de agua como me sucedía antes", afirma el joven.

Él, como tantos otros, jamás pensó que terminaría dedicándose a la instalación de placas fotovoltaicas: "Me han dado una oportunidad y yo la he querido aprovechar. Intento sacarle todo el beneficio posible. Además, es un ejemplo de que hay futuro, y que como siempre, hay gitanos y gitanos, igual que payos y payos, cada uno con sus cosas, nadie es perfecto", se explaya haciendo referencia a esa concepción tan asentada en la sociedad y que tanto daño hace al colectivo gitano.

El futuro, a la vuelta de la esquina

Esta estabilidad económica que ha encontrado le permite soñar, algo que Barrull pocas veces había hecho. Por su cabeza pasan algunas ideas, pero sobresale el deseo de tener un par de huertos solares, "y a ver si el día de mañana puedo montar una empresa de instalación fotovoltaica, y llegar a más, conocer nuevas técnicas, experimentar todo lo que pueda", subraya con ambición. Por el momento, su objetivo es "cobrar bien, poder pagar una casa, tener un coche y vivir en paz" porque, tal y como asegura, tampoco necesita ningún lujo para ser feliz.

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Saúl Cortés es otro de los beneficiados por este programa. "Estoy muy contento porque es un sector con muchas salidas, con mucho futuro", dice. Eso, futuro, es lo que le faltaba a este joven de 18 años, vecino también de Entrevías, que siempre ha trabajado sin contrato. "También es una forma de luchar contra el estigma de los gitanos, que la gente vea que no todos somos iguales", apunta.

Este joven relata con amargura cómo casi toda su vida le han discriminado por formar parte del pueblo gitano. "Lo he notado en todos los aspectos, y sobre todo a la hora de encontrar un trabajo", destaca. Por eso, ahora está mentalizado en aprovechar esta formación que puede encaminarle hacia la vida que realmente quiere. "Nunca hubiera pensado que iba a terminar subido a un tejado montando placas solares. Al principio se me hacía un mundo, pero gracias a los profesores ahora todo lo veo más fácil", relata.

Sus expectativas, enfatiza, no se diferencian demasiado a las de cualquier otra persona: “Me gustaría poder pagar una casa, tener un coche y sacarme el carnet. También me gustaría trabajar en una empresa de instalación, incluso montarla yo, aunque eso signifique estar mucho tiempo fuera de casa, viajando”.

Un sector laboral prometedor

Héctor Pastor, coordinador del área de Autoconsumo y comunidades energéticas de Ecooo, es una de las personas que mejor conocen el proyecto: “Estamos haciendo algo muy bonito que une formación, inserción sociolaboral y práctica”. Esta práctica se lleva a cabo mediante la contratación de la docena de jóvenes para que instalen placas en el tejado de la sede del Secretariado Gitano en Vallecas, lo que aportará al edificio unos 50 kilovatios de autoconsumo.

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"Bajo nuestra dirección y experiencia, son estos jóvenes los que se suben a la cubierta y hacen los taladros para el anclaje, plantean la instalación, suben los paneles y llevan a cabo las conexiones eléctricas", ilustra Pastor. De esta forma, en siete semanas los beneficiados del programa habrán realizado la instalación de un "tamaño considerable", tal y como la caracteriza este integrante de Ecooo.

Según han explicitado Barrull y Cortés, uno de los aspectos que más les motiva es el futuro prometedor de un sector en auge: "Hablamos de un mercado que ofrece unas condiciones laborales basta buenas y que permite tener una vida digna con sus salarios. Nosotros intentamos que a este sector también puedan llegar personas que, de otra manera, no tendrían la oportunidad de acceder a este tipo de empleo", completa el propio Pastor.

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Esta Semana Santa es el ecuador de la iniciativa, por lo que a los doce jóvenes les queda de trabajo el mismo tiempo que llevan. "Ya han hecho un primer repaso a todo el diseño del proyecto, han llevado los materiales y han planteado la instalación encima del tejado", expresa el experto en autoconsumo. Así pues, en unos días llevarán los paneles a la sede del Secretariado Gitano para hacer realidad el tercer objetivo del programa. Tras la formación teórica y práctica, el edificio empezará a producir su propia energía, de kilómetro 0 y renovable.

Ese será el resultado final de "TánDEM", el programa público de formación en alternancia con el empleo cuya finalidad es capacitar profesionalmente y facilitar la inserción de personas jóvenes menores de 30 años desempleadas, financiado por los fondos europeos Next Generation y promovido por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.