Almeida pide un pacto con el ministerio y la CAM para rediseñar el monumento del 11-M

El Ayuntamiento de Madrid ha solicitado a las otras administraciones —el Gobierno central y la Comunidad de Madrid— que formulen un acuerdo conjunto para abordar el futuro del monumento en honor a las víctimas del 11-M, ubicado en Atocha. Esta propuesta surge en un momento en el que el enclave está en proceso de transformación, coincidiendo con las mejoras llevadas a cabo por el Ejecutivo autonómico en distintas líneas de Metro.

El Confidencial informó hace tres semanas que la ampliación de la línea 11 en Atocha conllevará el traslado del cilindro en honor a las víctimas del atentado. Durante este mes, aprovechando la inactividad de la Línea 1, se están llevando a cabo los trabajos preliminares en el interior. Posteriormente, en octubre, comenzará el desmontaje de la pieza exterior. Para ello, la Comunidad de Madrid deberá obtener un permiso del Ayuntamiento dirigido por José Luis Martínez-Almeida y proceder a instalar andamios y el material necesario para la remodelación.

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Jorge García González

La vicealcaldesa de Madrid, Inmaculada Sanz, confirmó este jueves la intención del Consistorio madrileño de alcanzar un acuerdo a tres para definir el enfoque de acción respecto al muy probable cambio del monumento en memoria de las víctimas. Esto aseguraría la continuidad de su valor conmemorativo. "El camino a seguir se basa en el acuerdo entre Adif —entidad competente y dependiente del Ministerio de Transportes—, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento. Creo que las obras comenzarán pronto", declaró la número dos de Almeida en referencia al tema.

Sanz aclaró su compromiso con la causa, respaldando que, una vez finalizadas las obras en Atocha, las víctimas cuenten con un monumento en memoria. "Este esfuerzo no solo debe involucrar a la comunidad madrileña en su conjunto, sino también a las propias víctimas, asegurando que sus voces sean fundamentales en esta conmemoración", manifestó.

En un año se conmemorará el vigésimo aniversario de los atentados del 11-M, ocurridos el 11 de marzo de 2004

La comunidad ha iniciado los trabajos de desmontaje del actual Monumento Homenaje a las Víctimas del 11-M, que en el proyecto del futuro vestíbulo de Metro de Madrid en Atocha aumentará su tamaño, proyectando referencias al atentado y un espacio para los familiares. Se planea que la estación duplique sus usuarios anuales tras la prolongación de la Línea 11, según recoge Europa Press. En un año se conmemorará el vigésimo aniversario de los atentados del 11-M, ocurridos el 11 de marzo de 2004, en los cuales 10 de las 13 bombas colocadas por terroristas yihadistas explotaron en trenes de Cercanías de Madrid, dejando 192 víctimas mortales.

El monumento estuvo años descuidado

Durante años, el cilindro del monumento estuvo descuidado, con problemas como goteras y grietas. Manuela Carmena, la alcaldesa en ese entonces, reconoció que la construcción original no fue adecuada. Entre 2019 y 2020, se realizaron obras de rehabilitación y, desde entonces, el monumento se mantuvo en mejores condiciones, facilitando su accesibilidad. La realidad es que esta no es la pieza original que se pretendía levantar. Cuando el concurso salió a licitación, el proyecto ganador fue una especie de burbuja deformada, “muy moderna y llamativa en su momento”.

Así lo recuerda el diseñador y arquitecto Pepe Cruz, quien estuvo a punto de presentarse al concurso público. Finalmente, no lo hizo, y el equipo de arquitectos a quienes se les adjudicó la obra tuvieron que reformular el diseño por cuestiones técnicas. Además, al cilindro se le ha apodado comúnmente como vaso de plástico y demás descalificaciones. “Los buenos arquitectos tienen la obligación de remover el gusto establecido y de ir un poco más allá. El Guggenheim al principio tampoco gustaba”, continúa el experto.