Carmena abre fuego contra Podemos e Iglesias: "¡Qué peligro!"

Manuela Carmena (Madrid, 1944) tiene nuevo libro. Se titula 'La joven política' y es un alegato hacia quienes se sienten cada vez más lejos de la cosa pública. Para la exalcaldesa de Madrid, los actuales partidos son un instrumento inútil de representación ciudadana. Aboga por un sistema alternativo, una plataforma como la que está empezando a construir Yolanda Díaz y para la que ella misma se ha puesto a disposición, para romper con el debate "violento" en el que, según defiende, los medios de comunicación tienen buena parte de culpa. El volumen es un ajuste de cuentas con Podemos y, especialmente, con Pablo Iglesias.

"¡Qué peligro!", deja por escrito Carmena sobre Iglesias. Lo dice en referencia a la política de confrontación, de trincheras, de la que quiere huir la exalcaldesa. "Y lo que más me preocupa es que eso de que a la política hay que venir llorado no solo se lo oí en nuestro pleno a Esperanza Aguirre, sino que también lo dijo Pablo Iglesias en 2020. Este elevó el concepto a una categoría superior porque alardeó de que le insultaran. 'Si no te insultan y acosan no eres nadie'. A la lucha hay que venir pertrechado y con escudo protector, ¡qué peligro!". Iglesias fue, precisamente, quien apostó por ella para la alcaldía de la capital.

Es un libro de vivencias, de experiencias y también de crítica constructiva, bajo su punto de vista. "Los partidos relativamente nuevos, como Ciudadanos y Podemos, son enormemente parcos y genéricos en la enumeración de sus pretensiones políticas o ideológicas", escribe Carmena. Y añade: "Los partidos viven para ellos mismos. Su actividad es endogámica. La pandemia ha sido la prueba del nueve de que esto es así. Durante la pandemia solo fueron ONG y asociaciones civiles las que dieron la respuesta solidaria. ¿Dónde estaba la estructura capilar que se atribuye a los partidos?".

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Apenas menciona expresamente a Iglesias, pero sí deja caer que "la vida de los partidos se concreta en torno a los núcleos duros del poder, es decir, a las direcciones políticas". "En los últimos años, tras el 15-M, surgieron dos partidos con vocación de ser grandes y, sobre todo, como muestras de una nueva política frente al arrastrado bipartidismo: Podemos y Cs. ¡Qué pronto han envejecido!", proclama.

De Monedero, fundador del partido morado y con quien Carmena compartió una etapa, la exalcaldesa afirma: "En 2021, Juan Carlos Monedero, uno de los fundadores de Podemos, desde su atalaya de analista político pontificó algo parecido a que no se podía gobernar con magdalenas. Sin duda esa afirmación responde a toda una concepción de lo que es el Gobierno y para quién se gobierna, si para los propios o para todos. Aun así, la magdalenización fue un éxito porque contribuyó, y mucho, a ganar unas elecciones, las de 2019, que otros, queriendo interrumpir la experiencia de las magdalenas, consideraron que no merecía la pena apoyar".

Esa "magdalenización" de la política le lleva precisamente a publicar en las últimas páginas de este libro su receta de los dulces que introdujo en Cibeles. De sus magdalenas, Carmena dice: "Lo sé. Han hecho historia. Salen muy buenas".

Hay un momento de la historia política reciente que la izquierda tiene grabado y del que Carmena habla en este libro. Noviembre de 2019. Íñigo Errejón invitó a la exalcaldesa con la que conformó tándem electoral al cierre de campaña de las generales. Allí estuvo, no sin reticencias, ella. Y alabó a Irene Montero. Así lo cuenta: "Se me ocurrió nada menos que elogiar algo que había dicho Irene Montero, la número dos de Podemos, en un reciente debate en televisión. Recibí críticas y tuve que oír interpretaciones de todo tipo. ¿A quién se le ocurre en una campaña electoral decir algo bueno de los rivales?". La exalcaldesa no entiende las reacciones negativas que tuvo aquella intervención en la que lanzaba una loa hacia sus ya enemigos.

Manuela Carmena también tiene palabras hacia los periodistas y los medios de comunicación, con quienes se muestra especialmente crítica: "Fue una mentira afirmar que no me bajaba del coche oficial cuando todas las mañana cogía el metro. Hace unos cuantos meses, ya sin ser alcaldesa, entré a tomar un café al bar que está muy cerca de mi parada de metro. El dueño me dijo lo que sufría viéndome entrar todas las mañanas en el transporte público. Me dijo que, a su juicio, no estaba bien que una autoridad lo utilizara. 'Es relajar la dignidad de la autoridad', me decía. No creo que fuera eso lo que motivó que algunos periodistas me siguieran a modo de sabuesos. Parecía que querían pillarme y demostrar, cómo no, que mentía". Y añade en otro momento: "Qué gran responsabilidad tienen los medios en esa forma, frívola dirían algunos; irresponsable, otros, de alimentar la política de confrontación".

Manuela Carmena arremete en su libro contra los periodistas y los medios de comunicación

Iván Redondo y la "mercadotecnia de la política" también reciben la crítica de Carmena. Y apuesta por una forma de elección de líderes diferente: "Las primarias han resultado enormemente manipulables desde las direcciones de los partidos". Pone como ejemplo su equipo municipal: "Cuando constituí mi equipo de Gobierno en 2015 lo tuve que hacer escogiendo entre concejales que habíamos resultado elegidos. Desde ese mismo momento eché de menos que no se hubiera buscado personas especialmente idóneas para gestionar cada una de las áreas del Gobierno".

Carmena lamenta haberse encontrado los cajones del Ayuntamiento vacíos cuando llegó a Cibeles y asegura que ella dejó todos sus contactos, documentos y agendas a su sucesor, José Luis Martínez-Almeida.