Es noticia
Inmaculada Sanz y Borja Carabante, los 'consiglieri' de Almeida en Cibeles
  1. España
  2. Madrid
Nuevo organigrama

Inmaculada Sanz y Borja Carabante, los 'consiglieri' de Almeida en Cibeles

Los dos concejales, del círculo más íntimo del alcalde, suman nuevas competencias ejecutivas en el ayuntamiento y refuerzan su estatus jerárquico en la toma de decisiones políticas

Foto: José Luis Martínez-Almeida, junto a Borja Carabante e Inmaculada Sanz, en un acto de partido. (EFE/Daniel González)
José Luis Martínez-Almeida, junto a Borja Carabante e Inmaculada Sanz, en un acto de partido. (EFE/Daniel González)

José Luis Martínez-Almeida ha confiado la columna vertebral de su nuevo gobierno a Inmaculada Sanz y Borja Carabante. Los dos concejales, de su círculo más íntimo, asumen nuevas competencias ejecutivas en el organigrama con dos macroáreas que aglutinan buena parte de la actividad esencial de la ciudad: seguridad, emergencias, medio ambiente, movilidad y urbanismo. Pero la realidad es que son mucho más que dos simples delegados. Desde las elecciones municipales de 2019 ejercen de facto como una suerte de consiglieri del alcalde en cualquier toma de decisión, con un peso específico en la estrategia política del Ayuntamiento de Madrid.

Fuentes municipales señalan que nada de lo que ocurre en la sala de mandos de Cibeles es ajeno a Sanz y Carabante. Ni lo bueno, ni lo malo. Los dos ediles fueron de los pocos miembros del equipo de Gobierno que estaban al tanto del presunto espionaje al hermano de Isabel Díaz Ayuso incluso antes de que apareciera en los medios de comunicación. Y ambos conocían también los planes de Almeida para su primer mandato con mayoría absoluta. "Son los principales pilares del alcalde", subrayan las voces consultadas.

Foto: José Luis Martínez-Almeida, durante la sesión de investidura en Cibeles. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)

El alcalde de Madrid apenas ha variado la estructura de su Gobierno. Repiten todos los delegados que nombró hace cuatro años, con la única excepción de Andrea Levy, que ha sido sustituida en Cultura por Marta Rivera de la Cruz, y el ascenso de Álvaro González y José Fernández al frente de Vivienda y Políticas Sociales, Familia e Igualdad, respectivamente. Inmaculada Sanz y Borja Carabante, sin embargo, acumulan más poder y escalan jerárquicamente en Cibeles tras la salida de Ciudadanos. Sanz añade la vicealcaldía a sus funciones como portavoz y edil de Seguridad, mientras que Carabante incorpora Urbanismo a Medio Ambiente y Movilidad, articulando una concejalía enorme que soporta la clave de bóveda de la ciudad en muchos aspectos.

Sanz y Carabante fueron la jefa y el portavoz de campaña de Almeida en 2023 y 2019. "Son los pilares del alcalde", señalan en su entorno

El papel de los dos concejales no es una novedad. Sanz y Carabante ya fueron designados como jefa y portavoz de campaña antes del 28 de mayo. Y en las elecciones de 2019 también ejercieron como tal. La pasada legislatura tuvieron un protagonismo esencial incluso antes de que el Ayuntamiento echara a andar, con la negociación con Ciudadanos para armar la coalición y persuadir a Vox.

Pero los caminos de Almeida, Sanz y Carabante se cruzaron mucho antes, lejos del Palacio de Cibeles. Fue en el año 2008, cuando todos ocupaban cargos de segunda línea en el Gobierno de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid. En las oficinas de Sol se fraguó el embrión de un equipo que dio el salto a la política municipal en 2015, también de la mano de la expresidenta popular.

La victoria de Manuela Carmena truncó los planes de futuro a corto plazo, aunque les proporcionó la experiencia de la oposición. El entorno de la portavoz, de hecho, sostiene que esta etapa fue crucial para conseguir todo lo que vino después. Carabante dejó el Ayuntamiento en la primera mitad de la legislatura para ser consejero delegado de Metro, pero incluso entonces mantuvo el contacto con el alcalde. El equipo ya estaba hecho y Almeida y Carabante, junto a Álvaro González, eran conocidos en Cibeles como los hermanos Dalton.

Estilos distintos

Borja Carabante e Inmaculada Sanz tienen estilos distintos. El del concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad es parecido al del regidor, socarrón y distendido. El de la titular de Seguridad es más recto y serio. Los dos equipos, sin embargo, coinciden en la "capacidad de trabajo" de ambos. "Inmaculada es una persona que exige mucho, pero no pide nada que no haga ella antes. Lo que mejor la define es el rigor", detallan en el entorno de Sanz. La misma receta destacan en la concejalía de Carabante, reivindicando el trabajo realizado durante los últimos cuatro años.

Foto: José Luis Martínez-Almeida, junto a Marta Rivera de la Cruz (dcha.) e Inmaculada Sanz (izq.). (EFE/Rodrigo Jiménez)

La elección de Carabante como 'hombre fuerte' se enmarca en el círculo de confianza de Almeida, pero también es cierto que se ha tenido en cuenta su gestión al frente de la concejalía. Ningún área ha estado más expuesta a la crítica que la suya, con crisis como el varapalo judicial a la suspensión de Madrid Central, las quejas por la falta de limpieza, los atascos o los problemas con Bicimad. El balance final, según fuentes municipales, es positivo y el trabajo de Medio Ambiente se ha convertido en una de las grandes banderas de los populares en Madrid. La capital cumplió por primera vez con la normativa europea de contaminación, aprobó los nuevos contratos de limpieza y transformó el grueso de la flota de autobuses, entre otras cuestiones.

La suma de poder en ambos casos despierta ya algunos recelos, con la incógnita de si no son demasiadas atribuciones. La rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, celebrada este lunes, dio cuenta de esta situación. Inmaculada Sanz, como portavoz del Ayuntamiento, rechazó cualquier tipo de saturación y reivindicó el trabajo de los profesionales de segunda línea en el área. "Hay que seleccionar qué hacer por sí mismo y qué delegar", subrayó. En su caso, además, sumará la vicealcaldía, con una proyección mucho más ejecutiva de la que tenía con Begoña Villacís hasta la fecha.

El crecimiento de Inmaculada Sanz en el organigrama del PP en los últimos años está fuera de toda duda. La número dos de José Luis Martínez-Almeida cuenta también con un asiento en el equipo de Isabel Díaz Ayuso como una de las cuatro vicesecretarías, en su caso al frente del área de Sectorial.

Foto: Almeida en un acto con el Atlético de Madrid femenino. (EFE/Daniel González)

La presente legislatura, a salvo de los obstáculos de otras formaciones políticas, está llamada a ser la de la gestión y la transformación de la capital. Inmaculada Sanz y Borja Carabante no son una excepción y el alcalde de Madrid ya les ha puesto deberes, al igual que a sus compañeros. La prioridad para Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad será aprobar las normas urbanísticas bloqueadas por Vox, con los primeros diez días de julio en el horizonte. Seguridad y Emergencias, por su parte, debe configurar la nueva unidad antigrafitis para acabar con el vandalismo callejero. "No vamos a perder ni un solo minuto", destacó José Luis Martínez-Almeida ante los medios. Cada paso y decisión, de nuevo, pasará por el filtro de sus consiglieri.

José Luis Martínez-Almeida ha confiado la columna vertebral de su nuevo gobierno a Inmaculada Sanz y Borja Carabante. Los dos concejales, de su círculo más íntimo, asumen nuevas competencias ejecutivas en el organigrama con dos macroáreas que aglutinan buena parte de la actividad esencial de la ciudad: seguridad, emergencias, medio ambiente, movilidad y urbanismo. Pero la realidad es que son mucho más que dos simples delegados. Desde las elecciones municipales de 2019 ejercen de facto como una suerte de consiglieri del alcalde en cualquier toma de decisión, con un peso específico en la estrategia política del Ayuntamiento de Madrid.

Ayuntamiento de Madrid José Luis Martínez-Almeida Noticias de Madrid Partido Popular (PP)