La Bien Querida: "No he sacado nada bueno de la pandemia"

Ana Fernandez-Villaverde se despierta a las 6:30 de la mañana. “Soy de las madrugadoras. Si me levanto tarde, me siento mal y no me gusta”, confiesa desde el despacho donde compone, un lugar habilitado en su luminoso salón, rodeada de plantas, cerámicas y algún que otro cuadro pintado por ella. Sobre su mesa de trabajo hay notas, libros, un flexo y un cenicero de Murano. Los colecciona, aunque no fume. A la derecha una guitarra. Y a su espalda una estantería repleta de volúmenes de arte, carpetas y, colocados estratégicamente, dos de sus discos: ‘Fuego’ (2017) y ‘Un gatito’ (2021). “Estoy todo el día aquí sentada”.

La Bien Querida, el nombre que adoptó hace más de una década, cuando Jota, de Los Planetas, la animó a componer, es una de las artistas españolas que mejor ha sabido cantarle al amor en los últimos años. Este viernes dará un concierto en acústico junto a su inseparable David Rodriguez, productor y pareja sentimental durante un largo periodo de tiempo. El directo tendrá lugar en El Mira, el teatro inaugurado en 2004 en el municipio de Pozuelo de Alarcón, dentro del festival Inverfest.

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De Romancero a Brujería

Fue en 2007 cuando una desconocida pintora, animada por sus amigos, muchos de ellos músicos, se lanzó a escribir canciones y colgarlas en una plataforma llamada Myspace. Luego vendría su mítico concierto, en las Fiestas Demoscópicas, ante un público entregado en la sala Joy Eslava. Era febrero de 2008 y tenía a su lado al grupo de Antonio Luque, Sr Chinarro. Posteriormente publicaría un disco de debut con Elefant y contaría con la ayuda de David Rodríguez, Joe Crepúsculo, Daniel Descabello, Mohamed Soulimane y Juan Antonio Grimaldos, entre otros. “Mi manera de hacer las cosas no ha cambiado. Sigo componiendo de la misma forma que al principio”, comenta sin ningún tipo de pudor.

Aquel ‘Romancero’ incluía canciones que se harían un hueco dentro del repertorio más alabado del indie español reciente. Entre ellas estaban De momento abril, 9.6 o Bendita. “A mi no me avergüenza decir ‘amor’ o ‘enamorarme’ en una canción. Lo que me produciría pudor sería dar vueltas sobre esa idea sin enfrentarme a ella”, le decía al periodista Luis J. Menéndez en la revista Mondosonoro, que le dedicó la portada de marzo de 2009.

"Transmite muy bien cara a cara y a la gente enamorada del amor", explica Rodríguez

“El primero fue una cosa neofolclórica, el segundo estaba un poco más orientado al pop, el tercero quisimos trabajar la electrónica, el cuarto fue más oscuro y el quinto una mezcla de influencias”, confiesa David Rodríguez, que fue productor de todos ellos. El que fuera también abanderado de formaciones como Telefilme, Beef o Junco y Diamante, al lado de Joe Crepúsculo, cuenta como plantean esos conciertos tan desnudos e íntimos: “Ella tiene una voz muy especial y los directos terminan siendo muy emocionantes. Ana toca la guitarra acústica y yo hago algunos dibujos con la eléctrica. Transmite muy bien cara a cara y a la gente enamorada del amor, que es su público, eso le encanta”.

"La pandemia me ha parecido una mierda", dice La Bien Querida

“Suelo hacer un repaso a mi trayectoria. Aunque me gusta aproximarme a canciones que no son habituales tocar con el grupo, por lo que es una faceta mía más desconocida e íntima. Los temas están hechos tal y como yo los preparo en casa”, añade la bilbaina, 48 años muy vividos a caballo entre Barcelona y Madrid.

Un hueco importante tendrá su último disco, ‘Brujería’. Uno de sus trabajos más inquietos, en el que se adentra nuevamente en “el mayor de los hechizos”, como tan acertadamente definió al amor el periodista Tomás Crespo. En ese álbum, aparecido en septiembre de 2019, la cantautora se vale de referentes como Alan Moore, Lana del Rey, Broadcast, Lou Donaldson o Mario Riviere, el ilustrador que se encargó de dar forma a toda la imaginería del LP. “No tuve casi tiempo de tocar el álbum”, recuerda, “en seguida vino la pandemia, los confinamientos y la cancelación de todo”. ¿A La Bien Querida le sirvió de algo? “No he sacado nada bueno de la pandemia, sinceramente. Al contrario, me ha parecido una mierda. No me ha gustado nada. Debemos normalizar esto y tirar hacia adelante. No podemos volver a quedarnos en casa y que se paralice todo”.

Versiones de Jeanette y cortometrajes

Incansable trabajadora, su nombre se ha podido ver recientemente en varias series, además ha participado como actriz en el cortometraje de Omar Ayuso, que ha debutado en la dirección cinematográfica con ‘Matar a la madre’. “El film parte de una cita entre una enigmática mujer, Dorita, y un chico joven, Noa, en un establecimiento de comida rápida”, explica en una escueta sinopsis Ayuso, conocido por el gran público al ser una de las caras de Élite.

Sobre la música para series, Ana desarrolla un poco más su participación: “El tema para Express me lo pidió Iván Escobar, ideólogo y guionista de ella. Como no quería utilizar el título porque no me gustaba la palabra, decidí inspirarme en una canción de Kraftwerk, Trans-Europe Express”, destaca de un tema que, bajo el nombre de Río de enero, usa un sampler de la banda alemana.

“Intento sacarle partido a las desgracias que me pasan”, recalca Ana

Su relación con las plataformas de streaming no termina aquí. También hace un par de meses se estrenaba Estoy llorando por ti, una versión del clásico noventero de Ku Minerva que aparece en ‘Todo lo otro’, el trabajo que protagoniza la actriz y directora Abril Zamora en HBO Max: “Abril me pidió que versionara esta canción, que había sido muy importante para ella en su juventud”. Ana la lleva a su terreno y la transforma en algo mucho más cercano e íntimo; perdiendo toda esa carga épica del original.

El año pasado también se ocupó de Soy rebelde, interpretada originalmente por Jeanette y utilizada en un anuncio de una cerveza. ¿Que tiene La Bien Querida con este formato? “Me resulta divertido hacerlo. Aunque yo no haría una versión para un disco mío. El próximo álbum, que ya está hecho, no tendrá ninguna canción de las que he presentado anteriormente. Son todas inéditas”.

Para la artista, componer, escribir y salir a la calle a que sucedan cosas forma parte de un todo. “Intento sacarle partido a las desgracias que me pasan”, recalca. “Hay que meterse en líos y jugar con fuego. En todas las canciones hay una parte real y otra de fantasía. No tengo tanta imaginación para hacer canciones de la nada”.