Más Madrid da el salto y se postula como alternativa a costa de la debacle del PSOE

La noche electoral del 4 de mayo en la Comunidad de Madrid estuvo marcada por acontecimientos que determinarán el futuro de la política nacional. Más allá de la arrolladora victoria de Isabel Díaz Ayuso y del adiós de Pablo Iglesias a la política, Más Madrid protagonizó este martes una hazaña histórica al sorpasar al PSOE en la región y arrebatar a los socialistas el liderazgo de la oposición. Los de Mónica García han ido creciendo conforme avanzaba la campaña electoral, hasta dejar a Ángel Gabilondo en su mínimo histórico autonómico. Con 24 escaños, cuatro más, la formación se consolidó en su segunda participación electoral para convertirse en la primera fuerza de la izquierda, empatada en diputados con Ángel Gabilondo, pero por encima en apoyos.

El sorpaso, aunque leve, marca un antes y un después en la configuración de las fuerzas de izquierdas en la comunidad, especialmente con un PSOE que deberá abordar una renovación que se ha ido posponiendo mientras se esperaba la salida fallida de Gabilondo como defensor del pueblo. Con los socialistas en plena reconstrucción y con UP repitiendo en la última plaza, Más Madrid se abre hueco ahora para seguir ampliando su granero de votantes con la figura de su líder en pleno auge.

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La campaña comenzó para los de García con la aspiración de que su bloque sumara más que el de la derecha y de ser la tercera fuerza en la Asamblea de Madrid, por detrás de PP y PSOE. Ninguna de esas dos aspiraciones se cumplió. Por un lado, por la sobrada victoria de PP y Vox (78 diputados frente a 58) y, por otro, porque la debacle de los socialistas fue muy superior a la esperada y esto les impulsó hasta ser la segunda fuerza más votada.

Ante una legislatura que solo se extenderá hasta 2023, MM dio un paso al frente este martes para presentarse dentro de dos años como la alternativa real a Díaz Ayuso. Si desde 2019 han sacado pecho de ser la izquierda dura contra el Gobierno de PP y Ciudadanos ante un PSOE desdibujado, los resultados refuerzan ahora esa versión. Los dos años que restan de legislatura se convertirán en un campo de batalla de cara a los próximos comicios, y en Más Madrid lo saben bien. La propia García avanzó este martes que con el final del escrutinio se activaba "la cuenta atrás para las elecciones de 2023", a la par que anunció su intención de volver a liderar la candidatura.

"Asumimos el compromiso de ser la fuerza que lidere el cambio. Redoblamos la apuesta. Esta campaña es el anticipo de la alternativa que me comprometo a liderar desde hoy mismo", aseguró la cabeza de lista tras conocerse los resultados, dejando claro que a partir de junio comenzará una suerte de precampaña electoral.

Subida respecto a 2019

El partido vio incrementados los resultados que experimentó en 2019, cuando contaba con un candidato de proyección nacional como Íñigo Errejón y con el arrastre que Manuela Carmena generaba en las elecciones municipales que se celebraban a la vez. Con el adiós de la exalcaldesa y con la salida de su líder para intentar un salto a nivel nacional, el partido quedó en busca de nuevos rumbos y nuevas figuras que relanzaran el proyecto, algo que finalmente recayó en las manos de Mónica García.

Este martes, cosecharon 614.477 votos (138.805 más) y el 16,97% del total (2,28 puntos más), frente a un PSOE que se quedó en 610.190 sufragios (274.028 menos) y el 16,85% (10,46 puntos por debajo de hace dos años, y casi nueve puntos menos que su mínimo histórico). En la capital, el margen fue mayor y los de García crecieron hasta el 17,89%, cuando los de Gabilondo rozaron el 16,1%. La izquierda, eso sí, perdió votantes en términos globales.

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García concurría a las elecciones madrileñas después de haber sabido esquivar con éxito la propuesta de Pablo Iglesias de concurrir conjuntamente el 4-M. Pese al desembarco del secretario general morado, entre las filas de MM se mostraron entonces convencidos de que no era una buena idea y estaban seguros de que tenían su propio espacio al margen de PSOE y de Unidas Podemos. Los votantes parecen haber respaldado estas tesis, que se cimentaban sobre su apuesta por las consignas verdes y al margen de la crispación y del desgaste que acusaba UP en las últimas citas electorales.

Entre sus dirigentes, también han marcado diferencias con los socialistas, a los que han acusado en reiteradas ocasiones de haber abandonado a los madrileños y de usar la Comunidad de Madrid como moneda de cambio para sostener las tácticas de Moncloa, algo en lo que volvió a incidir en la noche de este martes García. "Una forma de hacer política que no tiene que ver con considerar a los madrileños como moneda de cambio y de otras estrategias políticas", aseveró la candidata.

Con el escrutinio finalizado, Más Madrid consuma el sorpaso que no logró en su momento Podemos a nivel nacional y deja a los socialistas tocados en una plaza clave en la que deberán reconstruir su estrategia para ser competitivos en 2023. Las urnas madrileñas no solo dan un toque de atención en Ferraz, sino que impulsan también el proyecto de Íñigo Errejón, que no logró despegar a nivel nacional con Más País.

El exportavoz de Unidas Podemos afronta en los próximos meses decisiones clave para expandirse por el territorio. Tras afianzarse en Madrid y con alianzas en la Comunidad Valenciana y Aragón, el inminente lanzamiento del nuevo partido de Teresa Rodríguez en Andalucía se augura como una oportunidad para unir caminos al margen de los morados y para tratar de plantar cara al PSOE movilizando a la izquierda hastiada.