Podemos ignora a Iglesias en Navarra y negocia con Bildu sin condenar a ETA
Laura Pérez, perteneciente al sector no oficialista, negociará con la izquierda abertzale en contra de la exigencia de Iglesias, que reclamaba como condición una condena de la violencia
La líder de Podemos en Navarra, Laura Pérez, no recogerá el guante lanzado por Pablo Iglesias, quien se mostró partidario de exigir a EH Bildu una condena explícita de la violencia para sentarse a negociar. La secretaria general navarra, que forma parte del sector no oficialista, se ha mostrado dispuesta a negociar a cuatro bandas con Geroa Bai, Bildu y la marca de IU en la comunidad foral (I-E, Izquierda-Ezquerra), y confía en que habrá cambios en la presidencia, actualmente ostentada en funciones por Yolanda Barcina (UPN).
Sumidos en la elaboración de informes para arrancar las negociaciones en los próximos días, los máximos responsables de Podemos en Navarra (Nafarroa Nahal Dugu) no tienen claro si formarán parte de un Gobierno de coalición, previsiblemente presidido por Uxue Barkos (Geroa). Sin embargo, sí adelantan que no frustrarán el cambio, lo que pasa necesariamente por dar su apoyo en la investidura a los abertzales. La línea roja impuesta por Pablo Iglesias ni siquiera se ha valorado, tampoco entre los círculos de esta comunidad autonómica, capacitados para establecer medidas de máximos y de mínimos, así como para votar la hipotética entrada en un gobierno de coalición.
La repulsa de la dirección nacional a formar gobiernos con la izquierda abertzale se enmarca en el contexto electoralista por el que Podemos mantiene una calculada ambigüedad respecto al modelo territorial, que evite perjudicarle de cara a las generales. Una cuestión sobre la que no ha rehuido Podemos Navarra, al defender en su programa para las autonómicas el derecho a decidir, “como parte importante de un proceso constituyente general”, así como otras medidas relacionadas con la incorporación de Navarra a la Eurorregión conformada por Aquitania y la Comunidad Autónoma Vasca o, de forma más difusa, “la constitución de un órgano que se ocupe de todas las problemáticas de interés común a Navarra y las comunidades autónomas limítrofes”.
Vídeo:Podemos apoyará a Uxue Barkos en Navarra
La premisa general por la que Podemos no formará gobiernos en aquellos territorios en los que no sea la fuerza mayoritariatampoco será aplicada en Navarra, donde la secretaria general apela a una realidad distinta. En Valencia se apuesta también por formar gobierno, aun en minoría, si la presidenta es Mónica Oltra (Compromís), en lugar de Ximo Puig (PSOE).
En un encuentro entre los líderes territoriales y la ejecutiva, celebradoel pasado jueves en Madrid, se llegó a la conclusión de que el peso de las negociaciones poselectorales recaería sobre los responsables autonómicos. El secretario de Organización, Sergio Pascual, se congratuló ayer por la posibilidad de que Uxue Barkos encabece un nuevo gobierno en Navarra “para acabar con la corrupción de UPN, que abra puertas y ventanas, y levante las alfombras”.
Desde la dirección de Podemos señalan que, al menos hasta el momento, no se está barajando la posibilidad de formar parte del futuro gobierno de Navarra. Un extremo que está menos claro en la capital, Pamplona, donde el líder de Bildu,Joseba Asirón, posiblemente el próximo alcalde, dice contar ya con el apoyo de Geroa Bai, Aranzadi e Izquierda-Ezkerra para su investidura. La plataforma ciudadana apoyada por Podemos en la capital navarra, Aranzadi, con tres concejales, abrirá una consulta para decidir si integra un gobierno de coalición o no.
Puerta abierta al soberanismo de izquierdas
A nivel autonómico, la secretaria general Laura Pérez también insistió en su intención de llevar a referéndum las alianzas poselectorales. “Hasta donde yo sé no se trata de entrar en gobiernos, por lo que no sería necesario (el referéndum), pero es potestad de la secretaria general de Navarra convocarlo o no, aunque no sea obligatorio estatutariamente”, según remarcó Pascual.
El secretario de Organización también eludió la línea roja marcada por el secretario general respecto a la condena de la violencia, recalcando que, “afortunadamente, ningún partido que no respete escrupulosamente los derechos humanospuedepresentarse a las elecciones”. En este sentido aludió a que está en manos de los jueces ilegalizar a los partidos que no se enmarquen dentro del respeto de los derechos humanos.
El acercamiento estratégico de Podemos al polo soberanista de izquierdas también se extiende a fuerzas gallegas y catalanas. En Galicia, el secretario general hizo un llamamiento explícito al líder de Anova, el histórico nacionalista Xosé Manuel Beiras, para que se sumase, junto a las exitosas mareas gallegas, al proyecto de Podemos de cara a las generales. En Cataluña, el candidato oficial a las autonómicas del 27-S es Albano Dante, próximo al soberanismo. Con un perfil independiente y defensor de articulación de frentes amplios, ha colaborado con las CUP de David Fernández para llevar al Parlament casos de corrupción en materia sanitaria.
La formación de un frente de unidad popular de cara a las generales, al que Podemos tiende la mano pero exigiendo, de momento, que se haga bajo su nombre y siglas, no excluye pues a fuerzas nacionalistas de izquierda. Galicia, País Vasco y Cataluña son, precisamente, comunidades en las que Podemos tiene un menor peso electoral, según las encuestas. De hecho, el propio Pascual reconoció que “no es descartable” la participación de Podemos en un frente amplio en Cataluña, de cara al 27-S, que no lleve sus siglas. Aunque “a día de hoy” la opción es presentarse con su nombre, pueden “existir otras posibilidades que, sin suponer una suma de siglas, se visibilice que Podemos llega a acuerdos con otras organizaciones”, pero según matizó “todo está por explorar”.
La líder de Podemos en Navarra, Laura Pérez, no recogerá el guante lanzado por Pablo Iglesias, quien se mostró partidario de exigir a EH Bildu una condena explícita de la violencia para sentarse a negociar. La secretaria general navarra, que forma parte del sector no oficialista, se ha mostrado dispuesta a negociar a cuatro bandas con Geroa Bai, Bildu y la marca de IU en la comunidad foral (I-E, Izquierda-Ezquerra), y confía en que habrá cambios en la presidencia, actualmente ostentada en funciones por Yolanda Barcina (UPN).