Sánchez arriesga el apoyo de Compromís en el Congreso por la ampliación del puerto de Valencia

Un partido dentro de la coalición del socio minoritario de Gobierno amenazando al Ejecutivo con llevarle a los tribunales, y hasta comparando a un integrante socialista del Consejo de Ministros con el defenestrado Rodrigo Rato. La ampliación del puerto de Valencia ha tensionado a Compromís, dentro del grupo Sumar en el Congreso, hasta el punto de advertir al PSOE de que sus relaciones "se enfrían mucho", y de asegurar que votarán no a todas sus iniciativas que no casen con su "agenda" para Valencia. Esté o no dentro de la coalición con la que concurrieron el 23-J dentro del mismo Gobierno. Y a las puertas de la negociación de los nuevos presupuestos.

En el Consejo de Ministros no quisieron aceptar cartera alguna en el Gobierno, a diferencia de otros partidos dentro de Sumar, y que, por tanto, tienen margen para actuar en respuesta. Fuentes del grupo parlamentario de Díaz criticaban este "regreso al pasado" con "desarrollismo destructor del territorio y el medio ambiente". El enfado, abundan, es compartido en el espacio: "Es lamentable que la primera visita que hace Puente a Valencia sea para cargarse la Albufera, y no para mejorar los cercanías, que son un absoluto desastre", afearon.

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Tras la ruptura de Podemos con Sumar, el grupo se vende hoy cohesionado. Algunos dirigentes morados, como el exdiputado y ex responsable de argumentario del partido, Pedro Honrubia, deslizaban en redes que Díaz está cerca de perder el apoyo de Compromís. Expresaba así una idea que comparten otros representantes morados, de momento con cierta discreción. Por lo pronto, fue Proyecto Drago, sin representación parlamentaria, quien dio el último toque de atención al partido de Díaz.

Desde el principio, la coalición valencianista reivindicó la misma "autonomía política" en el Congreso que los morados. La tensión entre Compromís y la dirección de Díaz se disparó la semana pasada, cuando se filtró que una ex integrante del Gobierno del Botànic, Irene Gavidia, sería designada directora del Imserso, controlado por el Ministerio de Derechos Sociales de Pablo Bustinduy. Compromís frenó una designación que no les había sido consultada ni comunicada antes de llegar a los medios.

Pocos días antes, la secretaria general de Més-Compromís, Amparo Piquer, llegó a recordar públicamente a Sumar que ya firmaron un acuerdo comprometiéndose a no competir electoralmente, y, por tanto, rechazando de plano que el partido de Díaz pueda implantarse en la Comunidad Valenciana. "No es conveniente ni necesario", aseguró. Respondía a declaraciones de Txema Guijarro, hombre fuerte de la vicepresidenta en el grupo parlamentario Sumar, que afirmó en la Cadena SER que estudiaban desplegarse en esa región, dentro de los márgenes permitidos por el acuerdo con Compromís.

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Hoy, la coalición valenciana insiste en que las aguas están más calmadas con Sumar, y que es el PSOE quien tiene un problema en lo que a ellos respecta: "Es el partido que ha truncado una mayoría y un acuerdo con sus socios parlamentarios".