De la peña El Picarol al sector cristiano: quién es quién en el caso Zaplana

La causa abierta por una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción contra el expresidente de la Generalitat valenciana y exministro de Trabajo Eduardo Zaplana ha dejado al descubierto una red de colaboradores y posibles beneficiarios del amaño de contratos públicos en la que hay tantos nombres conocidos como hasta ahora anónimos.

Además de Zaplana, estos son los detenidos e investigados en la operación Erial, que investiga presuntos delitos de blanqueo de capitales, malversación, cohecho y prevaricación con ramificaciones en el extranjero.

Joaquín Barceló y Felisa López

Es un matrimonio afincado en Benidorm muy ligado a Eduardo Zaplana. Barceló, sobre quien recaen las sospechas de que ha podido ejercer de testaferro del exministro de José María Aznar, forma parte de su círculo íntimo en la ciudad de la que fue alcalde entre 1991 y 1994. Era miembro de la llamada peña El Picarol, fundada en 1991 y que se reunía periódicamente con motivo de las fiestas mayores de la población alicantina, con Zaplana como miembro con mayores galones institucionales. Apodado 'Pachano' por sus amigos, Barceló ocupó puestos en Terra Mítica, en el Centro de Desarrollo Turístico de Benidorm y en la Agencia Valenciana de Turismo. Otros miembros de El Picarol fueron José Joaquín Ripoll, expresidente de la Diputación de Alicante y destacado zaplanista, Juan Manuel Cabot, que fue secretario general del PPCV, Francisco Murcia o el 'exconseller' de Medio Ambiente Fernando Modrego.

Francisco Grau

Se le considera el asesor fiscal de Zaplana. Economista de profesión, fue secretario del consejo de administración de Caja Mediterráneo (CAM) entre 1998 y 2007. Tras la pérdida de control de la entidad por parte de los zaplanistas en su guerra con Francisco Camps, pasó a ocupar un puesto en la comisión de control hasta que fue intervenida finalmente por el Banco de España.

Rosa Barceló

Es la mujer de Eduardo Zaplana y también está en la lista de investigados. Está casada con su marido en gananciales, de forma que casi todas las propiedades están a nombre de los dos. También el piso de 270 metros cuadrados adquirido el pasado mes de marzo en el cotizado barrio de Chamberí en Madrid, cuyo valor puede ascender a dos millones de euros, tal como adelantó este lunes El Confidencial. El inmueble no tiene ninguna carga hipotecaria, lo que en principio indica que fue pagado a tocateja.

Juan Francisco García

Es una persona clave en la primera etapa como presidente de Eduardo Zaplana. Fue su jefe de gabinete y su mano derecha en la Generalitat valenciana, y se le considera muñidor de los macroconcursos del Plan Eólico Valenciano y del reparto de las licencias de la inspección técnica de vehículos (ITV). Tras un intento fallido de asaltar la dirección de Aguas de Valencia, para pasar al sector privado García optó por la consultoría. Montó la mercantil Dobles Figuras y dedicó gran parte de su tiempo al baloncesto como presidente del Club Estudiantes, donde ejerció hasta 2014. La operación Erial le pilló a punto de exponer su proyecto para presidir la ACB en la asamblea que celebraba la asociación de clubes de baloncesto en Barcelona. Ha tenido que renunciar a sus planes. También fue consejero de la concesionaria de autopistas Aumar, del Grupo Abertis.

Juan Cotino

Ha sido citado para declar ante la guardia civil, pero no fue detenido este martes. Agentes de la UCO registraron su domicilio en una alquería de Xirivella y se llevaron varios documentos. Ligado al Opus Dei y al sector cristiano del Partido Popular, la empresa de su familia, la antigua Sedesa, está en el foco de la investigación por haber sido beneficiaria del Plan Eólico diseñado por Zaplana, participación que vendió en 2008 a Endesa con una plusvalía de casi 40 millones de euros. Pese a los muchos contratos que Sedesa obtuvo de la Generalitat, Cotino y Zaplana nunca fueron amigos. Tras la llegada de Francisco Camps al poder autonómico, el que fuera director general de la Policía Nacional se posicionó del lado del sucesor en la cruenta batalla interna por el control del partido y las instituciones en la Comunidad Valenciana. Cotino está procesado y a la espera de juicio oral por la pieza del caso Gürtel de la visita de Benedicto XVI en 2006. También figura como investigado en otra causa relacionada con el mismo evento.

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Víctor Romero José María Olmo

Vicente y José Cotino

Son los sobrinos de Juan Cotino, numerario del Opus Dei con voto de celibato. Vicente es la persona que tomó el testigo de Sedesa (luego Asedes Capital) cuando su tío entró de lleno en la política y se hizo un reparto entre primos del pequeño imperio de la construcción montado también por su padre y otro de sus tíos. Vicente Cotino lideró el proceso de crecimiento de la empresa al calor de la burbuja inmobiliaria y las excelentes relaciones con las adminstraciones del Partido Popular. Los negocios se diversificaron (residencias, obras públicas, Plan Eólico, etc.) y el empresario entró en terrenos peligrosos que lo han llevado a ser procesado en varias causas. Fue condenado a año y medio de cárcel junto al expresidente de Bancaja, José Luis Olivas, por falsificar una factura de 580.000 euros por el pelotazo de su participación en Proyectos Eólicos Valencianos, y confesó haber abonado a Orange Market 150.000 euros para sufragar actos de campaña de los populares valencianos.