Junqueras envía a Maragall al Senado para luchar contra la abstención el 23-J

La abstención que impulsan en Cataluña sectores radicales del independentismo es considerada como el gran peligro para ERC en estas elecciones generales. En las municipales, este movimiento les costó a los republicanos más de 300.000 votos. Así que Oriol Junqueras se ha subido a la ola victimista generada por la pérdida de la alcaldía de Barcelona por Xavier Trias. Por eso, ha optado por pedirle a Ernest Maragall que vaya de número dos de la formación en la lista del Senado como una manera de movilizar al electorado reticente a volver a respaldar al partido.

“Me presento para responder al pacto de los socialistas por el que nos han quitado la alcaldía de Barcelona. Le pido a la ciudadanía que pase del veto al voto”, declaró Maragall en el acto donde se presentó su nombramiento. El hermano menor de Pasqual Maragall, con 80 años, sigue así con su guerra abierta contra el PSC, llevándola a otro nivel y trasladándola a Madrid. "Voy a Madrid a recuperar la llave que Sumar ha quitado a Barcelona", insistió Maragall. Antes, el candidato había culpado a Ada Colau de haber "abandonado Barcelona para entregarla a Madrid".

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Si Ernest Maragall pretende vengarse del PSC, ERC propone lo mismo a sus votantes independentistas: una revancha por la pérdida de la alcaldía de la capital catalana, un pacto que sus líderes consideran ilegítimo. “Un 155 para Barcelona”, según lo definió el propio Maragall. Fuentes de ERC explican que la decisión se tomó este mismo lunes, como un medio para responder a lo que se considera un veto injustificable a que los republicanos estén presentes en el Gobierno municipal.

La designación de Maragall se produce al día siguiente de que la ANC haya activado lo que se denomina “el cuarto espacio”. La ANC se reunió en Girona este domingo y aprobó crear una agrupación de electores, la cual requerirá unas 50.000 firmas —el 1% del censo electoral— para poder presentarse a las elecciones al Parlament. Los miembros del secretariado no serán candidatos. Pero el peligro está ahí. Y la organización es la punta de lanza del movimiento abstencionista para que el votante independentista castigue a ERC, JxCAT y la CUP desentendiéndose de las urnas el próximo 23 de julio. Si la campaña es un éxito, el denominado “cuarto espacio”, con Clara Ponsatí, Josep Costa y otras figuras al frente, tendrá pista libre.

ERC tenía que mover pieza. Está por demostrar que un senador de 80 años sea capaz de movilizar a ese votante frustrado, porque después de las movilizaciones que empezaron en 2012, la independencia no solo no ha llegado, sino que está más lejos que nunca.

Bicoca económica

Un senador cuenta con sueldo base de 3.050 euros al mes, 14 pagas más dietas, que lo elevan a 4.000 euros al mes para aquellos que no viven en Madrid. Ernest Maragall, desde que se desvinculó del PSC, ha tenido una gran habilidad en seguir captando cargos públicos bien remunerados. Su papel será más bien el de un fetiche para recordar al votante lo que se considera una injerencia intolerable de Madrid en la designación de la alcaldía de la capital catalana.

El cabeza de lista para el Congreso es Gabriel Rufián. ERC tiene claro que el objetivo es cerrar el paso a una posible coalición del PP y Vox, tal y como muestran las encuestas. Xavier Trias está intentando algo parecido, pero no se compromete de manera personal. De hecho, ya ha dicho que en algún momento dejará la política municipal, aunque no ha dicho cuándo llevará a cabo esta renuncia a su cargo de concejal.

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Como número dos del Senado, Ernest Maragall aportará poco a la dirección política de los republicanos en Madrid. La estrategia seguirá pivotando alrededor de Gabriel Rufián. Pero, de nuevo, la política independentista vive de los símbolos.

Un jurista, de uno

El número uno de ERC para el Senado es Joan Queralt, un jurista conocido como tertuliano en los medios públicos de la Generalitat. No es el único opinador que se pasa a la política en estas elecciones generales gracias a los republicanos. El número tres para el Congreso es el periodista Francesc Marc Alvaro. Y el propio Rufián tiene un programa de entrevistas en 8TV. Pero a pesar de la búsqueda de caras conocidas en los medios de comunicación, las encuestas pintan mal. Entre ocho y nueve diputados para ERC, cuando ahora tiene 13 en el Congreso.

De hecho, uno de los problemas de Pedro Sánchez es que una parte de sus socios naturales está menguando, como es el caso de ERC, y otros, como el PNV, ya se están preparando para pactar con el PP en caso de victoria de Alberto Núñez Feijóo.