Es noticia
Espadas evita una gestora a Susana Díaz, pero le enseña la puerta de salida
  1. España
  2. Andalucía
Nueva etapa en el PSOE andaluz

Espadas evita una gestora a Susana Díaz, pero le enseña la puerta de salida

El candidato hará cambios y le propondrá una ejecutiva mixta hasta el congreso. Los detractores de la secretaria general del PSOE andaluz temen que se atrinchere y aspire al PSOE de Sevilla

Foto: Juan Espadas, felicitado por Susana Díaz. (EFE)
Juan Espadas, felicitado por Susana Díaz. (EFE)

El flamante candidato del PSOE andaluz, Juan Espadas, es un político moderado, un hombre tranquilo que rehúye los enfrentamientos y a quien no le gustan nada ni los empujones ni los navajazos. Así lo llevan presentando los perfiles en los medios de comunicación desde que el alcalde de Sevilla dejó de ser un desconocido para muchos en cuestiones orgánicas y se convirtió en el ungido por Ferraz para disputar a Susana Díaz el bastión andaluz.

Por eso, cuando la misma noche del domingo los sanchistas más acérrimos, quienes más ganas tenían de ver caer a Díaz, apuntaban a que Ferraz debía intervenir Andalucía y montar una gestora sin contemplaciones, Espadas pidió calma. El día después, ordenó a los suyos frenar. Avisó a Ferraz de que quería imponer su estilo. Es la segunda vez: ya pidió en el inicio del proceso que quería controlar los tiempos del anuncio de su candidatura. Enfrío la posibilidad de una gestora y pidió hacer las cosas a su manera. No quería ese epílogo sangriento para sus primarias. Le incomoda, avisan los suyos, que de verdad lo hagan aparecer como un candidato teledirigido desde Madrid, y le espanta la guerra entre Ferraz y Moncloa para apuntarse su victoria, como si la campaña no se hubiera hecho y ejecutado en Andalucía. "Por ahí con Juan no empiezan bien", dice alguien en el PSOE con muchos trienios y que le conoce perfectamente.

"Toca esperar"

Tras el aviso de Espadas, Ferraz enfrió la gestora y los andaluces vieron a Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, vicepresidente del Congreso y miembro de la dirección federal, señalar en el programa ‘Mesa de análisis’, de Canal Sur, que Susana Díaz “ama al partido por encima de todo y no va a haber conflictos”. Había instrucciones para andar en ese sentido. Nada que ver con la versión del domingo por la noche. En caliente. Cuando muchos insistían en que Díaz no iba a quedarse quieta después de que anunciara que daba un paso al lado, pero no dimitía como secretaria general a la espera del próximo congreso, dentro de seis meses. Sus detractores insinuaban, mientras ella se fundía en un abrazo con Espadas, que ya prepara su atrincheramiento al frente del PSOE de Sevilla y pedían actuar con diligencia para liquidarla. "No la conocen, no la conocen, morirá matando", aseguraba alguien que es ahora sanchista de pro, aunque durante años caminó junto a la expresidenta.

Foto: El alcalde de Sevilla, Juan Espadas. (EFE)

Espadas insiste en que quiere controlar sus tiempos. El mensaje es que la militancia, con un 55% de apoyos para el alcalde de Sevilla frente al 38% de Díaz, ha dejado claro que quiere un cambio y pasar página. Entienden que las primarias han sido “un revulsivo” que ha vuelto a poner el partido en tensión, que el mensaje es que los socialistas de base no quieren más guerra interna, hastiados de la pelea entre Díaz y Sánchez, y que imponer a las bravas una gestora sería más de lo mismo. “Sería transmitir que no hemos entendido el mensaje”, señalan fuentes próximas a Espadas. Su tarea debe comenzar por reconstruir un PSOE andaluz roto tras años de batalla interna, y hacerlo desde una gestora que no sea de mutuo acuerdo solo lo complicaría todo, transmiten los suyos. Toca esperar, "sin ansiedad".

Este martes, hay ronda del presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno (PP), con los líderes de la oposición antes de acudir el jueves a entrevistarse con Pedro Sánchez en Moncloa. El PSOE confirmó que acudirá el actual portavoz parlamentario, José Fiscal, un hombre de Díaz. La foto del cambio no llegará a las 48 horas de que Espadas ganara las primarias.

Encuentro discreto con Díaz

En el entorno de Díaz, esperan que Espadas llame a la actual secretaria general y se sienten ambos a negociar la transición. Insisten en que ella no ofrecerá resistencias. También en el círculo del alcalde de Sevilla creen que lo lógico es darle unos días para que recapacite y entienda que tiene que dimitir. Dan por hecho que habrá un encuentro que esperan que sea "discreto". El mensaje que ha recibido Díaz es “contundente”, subrayan. Y además es el tercer revés en su carrera política. Perdió las primarias frente a Pedro Sánchez, en 2017, vio salir al PSOE de la Junta de Andalucía pese a ganar las elecciones, en diciembre de 2018, y ha visto cómo ahora la militancia del partido del que es secretaria general le señala la puerta de salida y apuesta por Espadas como candidato. "Nadie aguanta eso", insisten sus rivales. Ni ella, que presume siempre de que nadie ha sido aún capaz de escribir su epitafio político.

Posiblemente, la secretaria general del PSOE andaluz esté aguantando por quienes la han acompañado en esta última aventura

Posiblemente, la secretaria general del PSOE andaluz esté aguantando no por ella sino por quienes la han acompañado en esta última aventura. Pedirá integración para ‘los suyos’. En su equipo, también hay hartazgo de tanta guerra. “No hay que darle más argumentos, sino dejarla que recapacite. Si Juan [Espadas] le pide que se vaya, se irá”, dice alguien que conoce muy bien a la líder andaluza. Sus salidas no son muchas. Su última reinvención no ha funcionado en estas primarias y es difícil imaginar que la expresidenta andaluza vaya a quedarse en su escaño en el Parlamento andaluz en quinta fila hasta que se acabe la legislatura. Podría elegir retirarse de la vida pública y probar en el sector privado. Algo que nunca ha hecho antes. O también podría optar por quedarse en el Consejo Consultivo, donde tendría un retiro dorado hasta una nueva salida y un sillón nato como expresidenta de la Junta.

Dos mujeres en el Parlamento

El equipo que llega para ponerse al mando del PSOE andaluz quiere acelerar los tiempos para controlar la oposición en Andalucía. Los primeros cambios se harán en el grupo parlamentario. En el equipo de Espadas hay dos diputadas, Ángeles Ferriz y María Márquez. La jiennense es la que suena como portavoz, aunque hay cautelas. “No está decidido”, insisten, pidiendo que Espadas pueda controlar los nombramientos. Los más lanzados creen que ya en la próxima sesión de control se podrá visualizar el cambio y será Ferriz quien interpele a Moreno. Es otra de las dificultades con que se enfrentará el candidato socialista, que no tiene escaño en la Cámara. Ni él ni el posible candidato de Unidas Podemos por Andalucía, lo que da mucho margen al presidente andaluz, sin rivales directos en el hemiciclo.

Foto: El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos. (EFE)

La bicefalia que se abre en el PSOE andaluz no preocupa, sobre todo porque todos creen que durará “poco”. “Se abre un tiempo nuevo donde las formas serán distintas, pero donde evidentemente todo el mundo tiene que saber leer cuál es el papel que la militancia le ha dado”, señala alguien con escaño en la Cámara. La duda es si Susana Díaz sabrá leer que le enseñan la puerta de salida. En su núcleo duro se muestran convencidos de que sí. “Si Espadas la sienta y le pide que dimita, lo hará. Pero hay que pactar la transición y respetar los estatutos y los tiempos”, insisten desde el círculo de la todavía secretaria general del PSOE-A. “No hay que forzar una transición abrupta y con malos modos que no corresponde”, añaden.

El flamante candidato del PSOE andaluz, Juan Espadas, es un político moderado, un hombre tranquilo que rehúye los enfrentamientos y a quien no le gustan nada ni los empujones ni los navajazos. Así lo llevan presentando los perfiles en los medios de comunicación desde que el alcalde de Sevilla dejó de ser un desconocido para muchos en cuestiones orgánicas y se convirtió en el ungido por Ferraz para disputar a Susana Díaz el bastión andaluz.

Susana Díaz Moncloa Pedro Sánchez Parlamento de Andalucía Alfonso Rodríguez Gómez de Celis
El redactor recomienda