Un equipo brasileño ajusta cuentas con Hacienda por la venta de Casemiro al Real Madrid

La Audiencia Nacional ha atendido parcialmente el recurso del São Paulo Futebol Clube contra una reclamación de casi dos millones de euros de la Agencia Tributaria por el impuesto sobre la renta de no residentes (IRNR) de 2013 a 2016. La sentencia, a la que ha tenido acceso El Confidencial, repasa la venta de tres jugadores de este equipo de Brasil a clubes españoles: el de Carlos Enrique Casimiro, 'Casemiro', al Real Madrid en julio de 2013; el de Douglas Pereira Dos Santos al Fútbol Club Barcelona en agosto de 2014, y el Pablo Enrique Chagas de Lima, más conocido como Ganso, al Sevilla en julio de 2016.

"Entiende la Agencia Tributaria que por la transmisión de estos jugadores a clubes de fútbol españoles se obtuvo una renta calificada de ganancia patrimonial y la entendió sometida a imposición en España", explica la sentencia. Los magistrados no discuten ese planteamiento, pero consideran que Hacienda cometió un error al calcular esas ganancias y acuerdan rebajar su reclamación.

El grueso del debate se centra en el fichaje de Casemiro y Pereira. Los inspectores reconocen que el club no obtuvo beneficio alguno con Ganso, pero apuntan a que la venta al Barça les reportó una "ganancia patrimonial de 2.400.000 euros" y la del Real Madrid más del doble: "En virtud del contrato de 4 de julio de 2013 se transfiere el jugador por un precio de 6.500.000 euros, resultando una ganancia patrimonial de 5.525.000 euros".

Al trasladar estas supuestas ganancias al IRNR, el club brasileño se enfrentaba a "una deuda tributaria de 1.160.250 euros correspondiente al ejercicio de 2013 y de 504.000 euros para el ejercicio de 2014". Si se sumaban los intereses, la Audiencia elevaba la cuantía del pleito hasta los 1.985.658,33 euros.

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Para tratar de anular esta reclamación, el São Paulo alegó que no había existido ganancia patrimonial: "Es un club que se dedica constantemente a vender jugadores de fútbol de su cantera, como lo demuestra su contabilidad, por lo que puede hablarse perfectamente de una ganancia ordinaria y no extraordinaria". La sentencia explica que este razonamiento pasa por alto los ingresos que se "derivan de los derechos televisivos o de las cuotas de los socios", por lo que en ningún caso puede descartarse la ganancia patrimonial de estos traspasos: "Deben calificarse como extraordinarios en tanto proceden de la enajenación de un inmovilizado".

Los siguientes dos argumentos del club sí fueron atendidos por el tribunal. El primero de ellos se centraba en que no se había calculado de forma correcta esa ganancia, pues el São Paulo solo era titular del "60% de los derechos económicos" de Pereira. En el caso de Casemiro, destacan a su vez que "debe deducirse un 5% añadido al 15% por la cesión de los derechos económicos" a una empresa brasileña.

El último motivo por el que los magistrados ordenan rebajar la reclamación se basa en las comisiones de venta y gastos de intermediación que conllevaron estos traspasos para el club. Solo por Casemiro, la Audiencia explica que tuvieron que pagar 556.039 euros para cerrar la operación y, un año después, el de Pereiro les costó otros 366.567. "Deben ser excluidos todos ellos como gastos deducibles", concluye la sentencia, que obliga ahora a la Agencia Tributaria a recalcular su reclamación.