Génova agitará en Europa su temor a que la amnistía alcance a los presos de ETA

El incierto escenario que se abrió con el adelanto electoral del pasado 23 de julio culminó este jueves en el Congreso de los Diputados. Pedro Sánchez volverá a situarse al frente del Gobierno, aunque esta vez con la incómoda compañía de Junts y una ley de amnistía bajo el brazo. Alberto Núñez Feijóo acarició la Moncloa, pero asumirá el papel de líder de la oposición en una legislatura que se prevé convulsa. Pero no hay tiempo para asimilar el golpe. El PP pasa ya a la siguiente pantalla, la del enfrentamiento total al incipiente Ejecutivo, y mira a Europa como su gran esperanza para dificultar una medida de gracia que, a su juicio, podría tener más efectos que los incluidos en la actual proposición de la norma.

Génova lleva días agitando la tesis de que "el siguiente paso" al borrado de los delitos del procés será incluir a presos de ETA en la proposición de ley de amnistía. Por el momento, no es más que un temor, pero no dudarán en llevar esa teoría a Bruselas aprovechando, en primera instancia, el altavoz del debate en la Eurocámara que se celebrará el próximo 22 de noviembre y que tiene como punto del día el impacto de la norma de Sánchez y Junts sobre el Estado de derecho en España. Fuentes de la cúpula aseguran, además, que ya han avisado al comisario de Justicia de la UE, Didier Reynders, de que el PSOE solo ha enviado un primer borrador. Y que las enmiendas de sus socios, especialmente de EH Bildu, "podrían cruzar nuevos límites".

"Está por ver que Bildu vote a favor de amnistiar delitos de terrorismo catalán y no del terrorismo vasco", sentencian en la dirección, que tratará de apercibir a Bruselas del "intento de engaño" por parte de Sánchez. Los populares basan esas sospechas en el hecho de que los abertzales hayan votado a favor de la investidura de Sánchez sin haber recibido una contrapartida a cambio. La ley de amnistía fue presentada en solitario por el PSOE, sin las firmas de sus socios parlamentarios, con lo que cabe prever que el texto no estará finalizado hasta que Junts, ERC o Bildu incluyan sus enmiendas. "Cuando no se cuenta nada, lo normal es que, al final, termine habiendo algo", desconfían en Génova.

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Los populares mantienen a flote esta tesis a pesar de que la proposición de ley registrada por el PSOE excluye de su articulado los delitos de terrorismo "siempre y cuando haya recaído sentencia firme". Esta redacción no afectaría a los procedimientos contra los CDR y Tsunami Democràtic, ya que no han llegado siquiera a juicio, pero sí dejaría fuera todos los casos relativos al terrorismo de ETA. "Pero la mentira es la seña de identidad de Sánchez", rebaten fuentes populares, que insisten en no dejar de mirar esa posibilidad.

El propio Alberto Núñez Feijóo agitó desde la tribuna del Congreso el pasado miércoles esta teoría cuando exigió a Sánchez aclarar lo que había acordado con los abertzales en el marco de su investidura. "¿De verdad se piensa que somos tan ingenuos y nos creemos que el voto de Bildu ha sido a cambio de nada? ¿Cuál es el pacto encapuchado con el señor Otegi?", preguntó. "Ya veremos qué más sorpresas se tienen guardadas", agitó. Las sospechas fueron concretadas por el propio Esteban González Pons en los pasillos del hemiciclo este jueves. "No sabemos el precio", afirmó, y "no descarto que haya una enmienda de EH Bildu a la amnistía pidiendo que también sean amnistiados los presos de ETA".

Para lo que se prepara el equipo de Feijóo es para advertir de los "peligros", conocidos y no conocidos, de la ley de amnistía en la Comisión Europea en un momento en que el órgano está analizando el texto remitido por el Gobierno de Sánchez hace unos días. Por el momento, la Unión Europea examinará el próximo miércoles "la calidad de nuestra democracia" en el pleno del Parlamento Europeo, un procedimiento que los populares aseguran que solo se ha llevado a cabo en países como Polonia, Hungría y Malta. "Es una humillación para España", sintetizan.

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Génova asegura que en la Unión Europea existe una "honda preocupación" por esta cuestión que ellos están dispuestos a exprimir. Asumen, no obstante, que las iniciativas políticas suelen tener un desenlace agridulce y que los verdaderos efectos se dejan ver cuando son los jueces los que exigen a Bruselas que tome partido y abra procedimientos contra los países miembro por "atacar la división de poderes" y "quebrar el Estado de derecho". "Si la UE termina abriendo un proceso sobre España, podría suspender la recepción de los fondos Next Generation", inciden.

El PP cree que el pleno del próximo miércoles puede marcar un punto de inflexión, al menos en el relato político, después de la intervención de líderes europeos que, aseguran, están en contra de la amnistía a los encausados por el procés. Los populares trabajan ya en el armazón jurídico para tratar de frenar esta norma en los tribunales, con recursos tanto al Tribunal Constitucional como al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). Que dé o no resultado la ofensiva está aún por ver.