Nueve CCAA estudian prohibir a los menores el consumo de bebidas energéticas tras Galicia

Galicia ha abierto la veda y prohibirá la venta de bebidas energéticas a los menores de edad a partir de 2024. Y ahora gran parte de las comunidades autónomas estudia seguir sus pasos. Tras conocer los planes de Alfonso Rueda, otras nueve regiones han confirmado a El Confidencial que analizarán el proyecto gallego y sopesarán su implantación. Las dos únicas que se desmarcan de forma explícita son Madrid y Extremadura. "No estamos en eso", apuntan fuentes de la Consejería de Sanidad madrileña, que además pide que sea el Ministerio del ramo el que lidere y coordine la implantación de una medida de dichas características.

El elevado consumo de este tipo de bebidas preocupa a los expertos. "Tiene importantes consecuencias negativas para la salud en la edad pediátrica y también en el adulto", defienden desde la Asociación Española de Pediatría. Los especialistas identifican la ingesta de bebidas energéticas con la obesidad (suelen concentrar 52 gramos de azúcar, el doble de la dosis diaria recomendada, además de sus altísimos niveles de cafeína) y con otras patologías. "Los estudios ponen en evidencia que su consumo se asocia a irritabilidad, insomnio, falta de concentración y patologías metabólicas y cardiovasculares. Por tanto, no deben ser consumidas en la edad pediátrica", resume Rosaura Leis, coordinadora del Comité de Nutrición y Lactancia Materna de la entidad.

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Tras Galicia, que perfila ahora la letra pequeña de la Ley para la Prevención de Adicciones con la que regulará el acceso a las bebidas energéticas, Andalucía, Cataluña, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Baleares, Murcia, País Vasco y Navarra estudian la propuesta y no descartan implantarla en caso de que los técnicos lo recomienden.

El proyecto de Galicia pasa por limitar su acceso a los menores como si de una bebida alcohólica se tratase, además de regular otros aspectos como su posible ubicación en los supermercados ―para que no sea un producto accesible para los adolescentes― o la publicidad de las mismas. Desde Cataluña precisan que la Generalitat hace tiempo que desaconseja el consumo de bebidas energéticas en niños y adolescentes, además de contar con material específico para la concienciación y sensibilización de las familias.

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El Govern, según explican fuentes de la Consejería de Sanidad, estudia cómo avanzar en la implantación de una medida similar a la gallega. También se abre a estudiarla Andalucía, inmersa en estos momentos en el diseño de "una estrategia de vida saludable, así como en un decreto de alimentación, donde se incluirán medidas que afecten no solo a los jóvenes sino a la población en su conjunto".

Públicamente, el Gobierno de Castilla-La Mancha y el de la Comunidad Valenciana confirmaron que analizan la ley que ultima Galicia. "Vamos a estudiarla muy seriamente y no solo el tema de las bebidas energéticas, sino de cualquier tipo de adicción", avanzó el conseller de Sanidad, Marciano Gómez. Se refería, entre otras cuestiones, al abuso de los videojuegos además de las dependencias físicas. Fuentes de su Departamento destacan que mirarán con lupa lo que se haga en Galicia y estudiarán su implantación en el marco de la estrategia de la comunidad para el tratamiento de las adicciones en los menores de edad.

La importancia de la educación de los niños

"Muchas de estas bebidas se venden en envases de medio litro. La cantidad de cafeína puede suponer más de 2 cafés expresos, así como un elevadísimo aporte de azúcares simples", ilustra la doctora Leis, defensora de un correcto etiquetado que permita a las familias elegir aquellos alimentos o bebidas más saludables para sus hijos. La especialista también es partidaria de incidir en la educación de los menores para que sean ellos los que reconozcan cuáles son los mejores hábitos para su salud. En concreto, propone introducir en el currículum escolar contenidos relacionados con la cocina, además de potenciar la actividad física. "Los estilos de vida saludables adquiridos en la edad pediátrica son un seguro de salud durante todo el ciclo vital", zanja.

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Desde el Ministerio de Consumo acogen de forma positiva la propuesta gallega, pero recuerdan que la competencia de "prohibir o no este tipo de bebidas corresponde a Sanidad". El Departamento que dirige Alberto Garzón, a través de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), elaboró una serie de recomendaciones para el consumo de bebidas energéticas y advirtió de los riesgos en adolescentes.

"El consumo de más de 60 miligramos de cafeína en adolescentes de 11 a 17 años (unos 200 mililitros de bebida energética con 32 mg de cafeína/100 ml) puede provocar alteraciones del sueño. A partir de 160 miligramos puede provocar efectos adversos generales para la salud: efectos psicológicos y alteraciones comportamentales y trastornos cardiovasculares", señala el documento de la Aesan que también alerta de los riesgos de mezclar estas bebidas con alcohol, una práctica relativamente común entre adolescentes y adultos. "El consumo de alcohol mezclado o en combinación con bebidas energéticas conduce a estados subjetivos alterados que, entre otros efectos, incluyen una disminución de la percepción de intoxicación etílica".