Díaz promete a Puigdemont buscar "soluciones democráticas para desbloquear el conflicto" en Cataluña

Yolanda Díaz se ha reunido este lunes en Bruselas con Carles Puigdemont para explorar la investidura de Pedro Sánchez, pero lo ha hecho por cuenta propia, con el ala socialista del Gobierno en funciones desmarcándose. Como ha adelantado El Debate y ha podido confirmar El Confidencial, el encuentro estaba inicialmente previsto para las 10.00 horas, en la sede del Parlamento Europeo en Bruselas (Bélgica). Puigdemont, ‘expresident’ de la Generalitat, eurodiputado desde 2020 y líder de Junts per Catalunya, pieza clave para la investidura del candidato socialista, ha estado acompañado en la reunión por el también europarlamentarioToni Comín.

La reunión ha sido larga, de unas tres horas, y ha “discurrido con normalidad y en un tono cordial”, según un comunicado conjunto que han emitido ambas formaciones, Sumar y Junts per Catalunya. “La reunión ha sido fructífera y permite establecer una relación normalizada y estable entre ambas formaciones políticas. Compartimos la profunda convicción de que la política debe hacerse desde el diálogo y los principios democráticos. En este sentido, estamos de acuerdo en explorar todas las soluciones democráticas para desbloquear del conflicto político”, señala el texto distribuido al finalizar el encuentro, insistiendo en que se deben “encontrar soluciones basadas en el diálogo”. “La democracia consiste en el diálogo entre posiciones diferentes”, subraya el comunicado. El encuentro no se ha incluido en la agenda oficial de la vicepresidenta segunda en funciones y se ha mantenido en absoluto secreto, aunque se lleva gestando “desde hace semanas”, según fuentes conocedoras de las conversaciones. El enlace entre Sumar y Puigdemont, el exdiputado Jaume Asens, también ha estado presente en la reunión.

La sorpresa ante esta cita afecta también a su socio en la coalición en funciones, que fue informado escasas horas antes, cuando Díaz ya estaba en Bélgica. Fuentes de la Moncloa aseguran a este diario que la vicepresidenta segunda ha acudido a esta cita únicamente "en nombre de Sumar", e inciden en que "no representa al PSOE". "Nos informaron ayer [por el domingo] a última hora de la noche a hechos consumados. No hay nada acordado", abundan. Desde el ala socialista insisten en que este encuentro no tiene "nada que ver" con ellos: "Nosotros seguimos nuestra vía", apostillan. La fotografía de una integrante del Gobierno en funciones junto a Puigdemont, en Bélgica, no es plato de buen gusto, ni en la Moncloa ni en Ferraz, aunque ayude a la líder de Sumar a recuperar foco, y a vender que lleva la iniciativa.

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El desconocimiento se extiende incluso a Podemos, que forma parte de la coalición de Díaz. En su primera rueda de prensa en dos meses, desde la sede del partido, Javier Sánchez Serna ha criticado la "falta de coordinación entre los socios", si bien se ha mostrado "a favor" de que se produzca la reunión de este lunes. Sánchez Serna es diputado de Sumar y coportavoz morado, y reconocía que han tenido conocimiento de la reunión a través de una llamada cuando Díaz ya estaba en Bruselas.

"Aquí todo el mundo está hablando con todo el mundo", aseveró el diputado de Sumar Íñigo Errejón. "La diferencia es que algunos lo reconocemos y vamos de cara", y "otros lo hacen por detrás", apostilló, en una entrevista en La Sexta. Errejón ha defendido que Díaz ha viajado a Bruselas "a cumplir" con su programa, para "avanzar en reconocer la realidad plurinacional de España", y para "continuar un camino que ya se inició" con los indultos a los líderes del procés. "Nosotros queremos que avance más, no sólo con los líderes", "hay miles de ciudadanos catalanes con causas abiertas", abundó. Lo hizo, además, reivindicando a Sumar como una "fuerza autónoma" que ha emprendido "una acción política" hacia la "normalización, a la que seguirán otros actores.

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"Este es un paso más en nuestra apuesta decidida por abrir un nuevo tiempo de soluciones basadas en el diálogo y la democracia", afirmaban desde su partido, a posteriori. Sumar se ha mantenido en silencio hasta 15 minutos antes de la hora en la que debía comenzar la reunión. Tras conocerse las informaciones sobre el plan de Díaz, su partido se ha limitado a enviar una convocatoria a los medios gráficos, y ha pospuesto hasta las 12:00 el encuentro.

Puigdemont es prófugo de la Justicia y el juez Pablo Llarena, del Tribunal Supremo, espera a que el TJUE se pronuncie sobre su inmunidad antes de reactivar la euroorden en su contra. Por lo pronto, el Tribunal General de la Unión Europea ha confirmado la retirada de la inmunidad europarlamentaria a Puigdemont y Comín, pero su defensa ya ha anunciado un recurso ante el más alto tribunal europeo y Llarena prefiere esperar a que se pronuncie Luxemburgo. Se trata del primer encuentro oficial entre un miembro del Gobierno en funciones y Puigdemont desde que el líder independentista huyera de la justicia española en octubre de 2017 y se refugiara en Bélgica, y se ha producido en un ambiente relajado, con la vicepresidenta segunda riendo mientras charlaba con el líder independentista.

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La cita se produce un día antes de que el expresident de la Generalitat haga públicas sus condiciones para apoyar la investidura de Sánchez. Y después de que los socialistas hayan incidido, en reiteradas ocasiones, en que es el PSOE quien lleva el peso de las negociaciones, minimizando el rol desempeñado por Díaz y los suyos. De hecho, en Sumar repetían estos días que han mantenido contactos con JxCAT "al máximo nivel" para intentar tender puentes.

Hace mes y medio, poco después de las elecciones generales, la vicepresidenta en funciones designó a Asens para liderar las conversaciones con Puigdemont en su nombre, para intentar tender puentes con Waterloo. Asens es, además, quien coordina los trabajos de un equipo de 20 juristas para estudiar los límites de una ley de amnistía que Junts per Catalunya y ERC reclaman a cambio de sus votos. Si el PSOE se muestra muy cauto y evita hablar de la amnistía, Sumar trabaja para normalizarla.

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Puigdemont huyó del país en octubre de 2017, después de que el Gobierno de Mariano Rajoy activara el artículo 155 de la Constitución, tras el referéndum independentista. La imagen de una integrante del Ejecutivo en funciones reuniéndose con el expresident, reclamado para ser juzgado por el Tribunal Supremo, puede acarrear un coste político que en Sumar no quieren hoy valorar.

La aritmética parlamentaria surgida de las urnas el 23-J hace que los siete votos de Junts sean imprescindibles para que Sánchez y Díaz puedan revalidar el Gobierno. Sin embargo, en estas semanas de negociaciones discretas no había trascendido que ningún miembro del Ejecutivo en funciones viajara personalmente a Bélgica para visitar al expresident. Tampoco que el partido del candidato a la investidura se desmarcara de los esfuerzos de la líder del partido minoritario por intentar atar los apoyos de los que ambos requieren para mantenerse en la Moncloa.

Sumar vende "transparencia" tras conocerse la reunión

Fuentes de Sumar han presumido de desarrollar las conversaciones "con total transparencia", horas después de conocerse la reunión en Bruselas. Desde el partido de Díaz afirman que son "quienes estamos pensando en soluciones para la próxima década", y defienden haberse puesto "manos a la obra" para lograr una legislatura "de avance social y plurinacional". "En nuestro país, el avance social y el territorial siempre han ido de la mano", "así debe volver a ser", abundan.

"Es tiempo de abrir una nueva etapa de diálogo. En Sumar negociamos con transparencia y respeto a la ciudadanía. Hoy en Bruselas damos un paso importante para seguir construyendo soluciones en clave social y territorial para nuestro país", ha señalado por su parte Ernest Urtasun, eurodiputado de Catalunya en Comú y que ha ejercido como portavoz de Sumar durante la campaña electoral.