La imputación fantasma de Tito Berni en 2015 que no impidió que le nombraran diputado

La reciente imputación del exdiputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes Curbelo no ha sido la primera. El conocido como Tito Berni fue investigado en 2015 por presunta falsedad en documento público, en relación con una trama destapada en Fuerteventura y vinculada al fraude de subvenciones. Afectó a un funcionario del Cabildo, durante años jefe de servicio de la Unidad de Agricultura, Ganadería y Pesca, que acabó condenado. La prescripción de los hechos ahorró al socialista sentarse en el banquillo de los acusados, pero no impidió que años después fuera nombrado de nuevo diputado. Ya lo había sido entre 2004 y 2008, bajo la presidencia de Zapatero.

En el procedimiento que le salpicó, vinculado con un fraude en las subvenciones y adelantado por Las Provincias, resultó condenado Casto Berriel y uno de sus sobrinos. A Fuentes Curbelo se le atribuía haber presentado en 2009 una factura falsa en un expediente administrativo dirigido a proporcionar ayudas al sector ganadero. El conocido como Tito Berni lleva años dedicándose al sector primario. Regenta una explotación de ganado caprino en el pueblo de Tetir que fabrica de forma artesanal quesos con denominación de origen.

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Todo arrancó a través de una investigación de la Guardia Civil en colaboración con la Fiscalía de Las Palmas. Fue el Ministerio Público el que denunció los hechos tras analizar numerosos expedientes en los que el funcionario debió de abstenerse por su vínculo con Microtón Fuerteventura SL, una empresa de la que era administrador único desde el año 2000 y desde la que presta servicios veterinarios a las principales agrupaciones ganaderas de la Isla. Al revisar esas facturas, detectaron una, presuntamente falsa, vinculada con el exdiputado socialista y fechada en 2009. La falsedad tiene una prescripción de cinco años, por lo que la imputación fue archivada.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Puerto del Rosario se encargó de la instrucción. Casto Berriel fue condenado en primera instancia por la Audiencia Provincial de Las Palmas y, tras presentar recurso de casación ante el Supremo, vio rebajada su pena de cuatro a tres años con una inhabilitación especial para empleo o cargo público durante cuatro años y dos meses por un delito de falsedad en documento mercantil y público y otro de prevaricación. Asimismo, le condenó a pagar una multa de 1.800 euros.

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Según los escritos a los que ha accedido El Confidencial, la trama se centraba en la concesión fraudulenta de subvenciones a las agrupaciones de defensa sanitaria ganadera Teberite, Tajorase y Tinea y a algunos empresarios. El condenado, Berriel, se ocupó de gestionarlas desde su responsabilidad pública entre 2000 y 2013. De forma paralela a su cargo, administraba dos sociedades dedicadas a prestar servicios veterinarios, Microtón Fuerteventura y Servicios Agrarios Capraria. Las agrupaciones o los ganaderos pedían las subvenciones y se les concedían, cobraban por los servicios sanitarios prestados y expedían las facturas con las que justificaron ante el Cabildo dichas subvenciones, que ascendieron en conjunto a 300.000 euros.

Un tractor ficticio

La sentencia del Supremo y las anteriores detallan cómo uno de los detonantes de la operación contra esa trama fue la concesión por parte de Berriel de una subvención a su propia empresa para comprar un tractor presupuestado en 10.150 euros. Pidió la subvención el 20 de diciembre de 2012, y su sobrino —también condenado en el procedimiento— presentó una factura justificativa que acabó considerándose ficticia.

Años más tarde y tras este episodio desarrollado en la etapa posterior a su primera responsabilidad como diputado en la VIII Legislatura, Fuentes Curbelo accedió de nuevo a un escaño, esta vez en la etapa de Pedro Sánchez. El caso Mediador, que se instruye en la actualidad, le vincula con la pata política de la red, diseñada precisamente para engrasar la supuesta concesión de subvenciones a determinados empresarios que pagaban una comisión de 5.000 euros para acceder a ventajas a través de su influencia.