Vox baraja otros nombres para liderar su moción contra Sánchez y alarga la incógnita de Tamames

Hace casi dos meses que Vox anunció que presentaría una nueva moción de censura contra Pedro Sánchez, pero la iniciativa sigue llena de incógnitas. La semana pasada, Santiago Abascal confirmó que había propuesto al economista y exdiputado Ramón Tamames, de 89 años, encabezar el proyecto, pero este quiso esperar "unos días" antes de dar una respuesta definitiva a la formación de ultraderecha. En paralelo a las "conversaciones" con el líder del partido —está prevista una reunión este mismo miércoles—, el veterano político ha hecho un tour por distintos medios de comunicación que ha provocado, en parte, un cambio de discurso en Vox. La semana pasada estaban "a la espera" de la confirmación de Tamames, mientras que ahora afirman que la dirección tampoco ha tomado una decisión en firme sobre si es o no el candidato idóneo para su moción.

"Se decidirá en los próximos días", afirman en la dirección del partido, donde tampoco desvelan el plazo que manejan para el registro de la iniciativa, una vez confirmen si Tamames es o no su candidato. La moción ha perdido peso por la dilatación del proceso y por las críticas procedentes de otros partidos ante la posibilidad de que el protagonista sea el exdirigente del PCE. Y en Vox no se cierran puertas ante la posibilidad de que su primera opción no prospere, bien por decisión propia o ajena. Aseguran que presentarán la moción "sí o sí", pero que barajan un "abecedario de nombres" de perfil "independiente" para dar un paso al frente si Tamames no lo hace.

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Pese a las dudas que parecen rodear la candidatura de Ramón Tamames, en la formación se cubren las espaldas y aseguran que él es una "muy buena opción", pero prefieren no precipitarse en el diagnóstico y atar "los últimos flecos" con el economista. Además de la presentación de un candidato alternativo a la presidencia del Gobierno, la moción sirve al partido que la presenta para exponer los ejes de su futuro programa de gobierno. En este sentido, Vox asegura negociar con Tamames las líneas de su intervención, pero el exdirigente aseveró este martes en una entrevista para Antena 3 que prepara su discurso por su cuenta, con total "independencia de Vox".

Desde la dirección del partido aseguran respetar por completo esa libertad que solicita Tamames, porque el alma de la iniciativa, reiteran, era que la liderase una persona "completamente ajena" a Vox. Pero siguen sin estar convencidos. El portavoz de la formación en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, reiteró este martes en rueda de prensa que cabe la posibilidad de que Tamames no sea finalmente el candidato. Lo dijo en varias ocasiones. "Puede ser o puede no ser el candidato, pero es una persona sobradamente cualificada para hacerlo. Decida hacerlo o no (...) es un perfil verdaderamente irrepetible. (...). Si finalmente es él o no, lo sabremos en los próximos días", incidía.

Con todo, Espinosa de los Monteros defendió a Tamames de las críticas recibidas en los últimos días por su posible designación. "No sé en qué momento España ha pasado de ser un país que respeta a sus mayores a ser un país que los desprecia", al tiempo que insistió en que "muy poca gente en España tiene esa cualificación". Pese a esa convicción, Vox no se cierra puertas y asegura tener un plan B por si su primera opción conocida para liderar su moción de censura termina saliéndoles rana.

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Pese a no confirmar su candidatura, Ramón Tamames ha dejado en los últimos días un reguero de titulares por sus múltiples intervenciones en medios de comunicación. Algunas pueden llegar a incomodar a Vox, aunque en el partido niegan tal extremo. Muy llamativa ha sido su propuesta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que acepte una comida con él en su casa antes del pleno de censura. "Pienso invitarle a cenar o a comer a casa, para conocernos antes de la sesión. Me parece que es lo normal en personas civilizadas, y el presidente lo es, indudablemente", afirmó en una entrevista para la Agencia EFE.

Otra de las revelaciones más llamativas fue la que hizo a preguntas de El Confidencial el pasado jueves, cuando desveló que invitó a comer en su casa al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, una semana antes de que se oficializase la propuesta de Vox. Este martes, el exdirigente ha reiterado en Antena 3 que en aquella comida instó al jefe de la oposición que considerase censurar a Sánchez en la Cámara Baja, aunque la iniciativa no cuente con los votos suficientes para salir adelante. Génova confirmó que la comida se había producido, pero insisten en el matiz de que se celebró "antes de que Tamames sonara como candidato a la moción".

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En el PP, por su parte, mantienen que su postura no ha cambiado. Alberto Núñez Feijóo se intercambió mensajes con Santiago Abascal el pasado mes de diciembre, solo unas horas después de que el líder de Vox formalizase su intención de presentar una nueva moción contra Sánchez. Y le transmitió que el PP no obstaculizaría la iniciativa, pero que ni se sumaría ni votaría a favor. "Nos abstendremos, sea quien sea el candidato", confirman en la dirección nacional. En privado, fuentes de los populares critican el "esperpento" en que puede convertirse una moción liderada por Ramón Tamames, y tampoco ven con buenos ojos que Vox "fuerce" a un candidato de avanzada edad a aguantar un pleno que puede alargarse "horas y horas".

También Ciudadanos ha marcado distancias con Vox en este asunto. Aunque Inés Arrimadas fue una de las primeras portavoces que defendieron, junto a Abascal, la necesidad de impulsar una moción de censura, la nueva dirección nacional —encabezada por Patricia Guasp y Adrián Vázquez— prefiere poner tierra de por medio y desmarcarse de una iniciativa liderada por Tamames. "No es útil", zanjó la nueva líder de los naranjas.