Es noticia
Escrivá, el ministro de acero: "Es déspota con los de abajo y servil con los de arriba"
  1. España
Goteo de bajas en su gabinete

Escrivá, el ministro de acero: "Es déspota con los de abajo y servil con los de arriba"

Antiguos empleados de su gabinete relatan gritos y desplantes por sus "cambios de humor y de criterio". Ningún ministro del Gobierno quería arroparle en el último desayuno informativo que dio

Foto: El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá. (EFE/Chema Moya)
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá. (EFE/Chema Moya)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Desde que Pedro Sánchez le llamó para dirigir Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá no ha pasado desapercibido. Al margen de lo complicado de su gestión, han sido públicos sus enfrentamientos con compañeros del Consejo de Ministros que le han llevado a rectificar en más de una ocasión. Desde su choque con la vicepresidenta Yolanda Díaz por subir a 35 años el cómputo de las pensiones hasta el encontronazo con la titular de Hacienda, María Jesús Montero, a cuenta de la creación de una tasa especial para Madrid por ostentar la capitalidad. La relación con ambas es “delicada”, según fuentes del gabinete, que puntualizan que Díaz y Montero conforman junto con Nadia Calviño un equipo económico “bien engrasado”. El verso suelto sería Escrivá.

Con Yolanda Díaz se ha hecho evidente en negociaciones con los agentes sociales que hay no solo disparidad de criterios, sino animadversión, relatan quienes han compartido mesa con ambos. “Se considera superior intelectualmente al resto y eso complica mucho llegar a acuerdos”, apuntan las mismas fuentes, que se quejan de que siempre busca imponer su criterio y es “poco dialogante”. De ahí que en la CEOE se haya contrapuesto siempre la “mano tendida” de Díaz frente al autoritarismo de Escrivá. Desde la patronal, hay quienes destacan que es “cordial” de tú a tú, pero de puertas para dentro es un “hueso duro”. Ha estado en las discusiones de la reforma laboral y llevado el peso en el cambio del sistema de cotización de los autónomos. En ambas deliberaciones, ha costado que diese su brazo a torcer en pro del pacto.

Foto: El ministro Escrivá, en el Senado. (EFE)

La imagen de “hombre complicado”, como le definen en diferentes ámbitos consultados por este diario, puede acabar suponiendo un problema para el Gobierno. La actitud displicente que ha manifestado en algunos de los foros anteriormente citados sería una “constante” en el trato con los miembros de su equipo. Las deserciones en el departamento que dirige han sido un goteo constante y, una vez que han abandonado su puesto de trabajo, el relato de algunos de los empleados es demoledor.

Una empleada abandonó llorando una videoconferencia por los gritos del ministro

“Sentía miedo cada vez que se abría la puerta de su despacho”, cuenta uno de los exempleados, que describe que cuando el ministro salía a la sala donde ellos estaban trabajando, se creaba un clima de tensión insoportable. “Es déspota con los que tiene por debajo y servil con los de arriba”, continúa. Entre sus vivencias, destaca también cuando una compañera se derrumbó durante una videoconferencia de directores generales de varios ministerios. Mientras estaba conectada, empezó a escuchar cómo Escrivá se dirigía a ella gritando, hasta que acabó llorando. Este hecho ha sido confirmado a este diario por otros participantes en la reunión.

Las salidas más recientes han sido las de Jesús Perea, secretario de Estado de Migraciones, e Israel Arroyo, dos de Escrivá en las mesas de negociación. El primero volverá a Moncloa; el segundo, a la sede de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, donde ya había trabajado con el ministro. En la AIReF, el recuerdo de Escrivá también tiene claroscuros. Como profesional, destacan su preparación y capacidad de trabajo, pero coinciden en describirle como una persona “compleja” en el trato y en la gestión de equipos. Exactamente igual es el retrato que se hace en el BBVA, donde estuvo desde 2004 a 2012 en puestos de máxima responsabilidad. Con anterioridad, también ha habido bajas de directores generales y otros puestos intermedios. La queja es siempre la misma: “Cambios de humor y de postura constantes” con los que tiene bajo su mando.

Foto: El exsecretario de Estado para la Agenda 2030, Enrique Santiago. (EFE/Zipi)

En la bancada azul, también cuenta con pocos amigos. Los que mantienen una relación con él tienen un “buen concepto”, pero "desconocen cómo es el día a día de su departamento". Uno de los ministros que suscriben las “rarezas” de Escrivá refiere una anécdota como prueba de su talante: ningún compañero se ofreció voluntario para ir al desayuno informativo que daba el titular de la Seguridad Social. Lo habitual, según la citada fuente, es que cuando un compañero del Consejo de Ministros es invitado a este tipo de eventos, haya incluso 'overbooking' por acudir a arroparle. En el caso de Escrivá, como nadie se apuntaba, desde el gabinete de Presidencia, a través de los directores de Comunicación, se pidieron voluntarios. Yolanda Díaz tiró una vez más de espíritu conciliador y acabó en la mesa de su 'adversario'.

En el PSOE nunca han entendido que Sánchez le eligiese a él. Su doctrina choca con el ideario de los socialistas, que en más de una ocasión le han afeado su comportamiento. Escrivá no tiene carné político y por ahora siempre ha contado con el respaldo del presidente. Vienen tiempos difíciles en lo económico y la revalorización de las pensiones con el IPC amenaza con ser una bomba de relojería.

Desde que Pedro Sánchez le llamó para dirigir Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá no ha pasado desapercibido. Al margen de lo complicado de su gestión, han sido públicos sus enfrentamientos con compañeros del Consejo de Ministros que le han llevado a rectificar en más de una ocasión. Desde su choque con la vicepresidenta Yolanda Díaz por subir a 35 años el cómputo de las pensiones hasta el encontronazo con la titular de Hacienda, María Jesús Montero, a cuenta de la creación de una tasa especial para Madrid por ostentar la capitalidad. La relación con ambas es “delicada”, según fuentes del gabinete, que puntualizan que Díaz y Montero conforman junto con Nadia Calviño un equipo económico “bien engrasado”. El verso suelto sería Escrivá.

José Luis Escrivá
El redactor recomienda