La sentencia del TS sobre nombramientos "discrecionales" a la que se agarra Delgado

Dolores Delgado no va a plegarse ante las advertencias del Tribunal Supremo sobre su política de nombramientos. La fiscal general volvió a promover esta semana a Eduardo Esteban como fiscal de Sala de Menores, pese a que su designación inicial ya fue anulada por el tribunal por "falta de motivación", una maniobra que no ha tardado en interpretarse como un desafío. En el marco de este cara a cara, fuentes del entorno de Delgado señalan una reciente sentencia en la que el Supremo rechaza el recurso contra un nombramiento del Consejo General del Poder Judicial. El mensaje es claro: la discrecionalidad en los nombramientos del CGPJ es aplicable a la Fiscalía.

La Sala de lo Contencioso-Administrativo emitió su sentencia el pasado 30 de mayo. En ella rechazan el recurso del magistrado José Ramón Chaves García contra el acuerdo del CGPJ de diciembre de 2020 por el que se nombró presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia del Principado de Asturias a David Ordóñez Solís. Según argumentaba Chaves, la "comparación de méritos" entre ambos candidatos en ningún caso "respalda la decisión que adopta el acuerdo", pues valora "indebidamente la excelencia judicial" y nombra al magistrado "sin explicación, razón, justificación o, en definitiva, motivación alguna".

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Frente a este razonamiento, el Supremo centra su análisis en dos cuestiones: la alegación de que "no se han valorado sus méritos en el informe propuesta de la Comisión Permanente ni en el acuerdo del Pleno" y, de forma paralela, la de "que este acuerdo carece de la exigible motivación". En cuanto al primer punto, los magistrados se muestran tajantes y apuntan a que el examen del nombramiento "pone de relieve que la ponderación de los méritos invocados por los candidatos satisface suficientemente las exigencias legales", desde sus expedientes personales hasta las comparecencias que realizaron ante el CGPJ, pasando por sus "proyectos de actuación presentados".

Descartado este argumento, la Sala de lo Contencioso-Administrativo se centra en la supuesta falta de motivación del acuerdo y, una vez más, echa por tierra esta alegación, apuntando a su propia jurisprudencia. En concreto, a una sentencia de junio de 2020 que incide en que "el Consejo General del Poder Judicial tiene amplísimas facultades de valoración y elección en los nombramientos de carácter discrecional que efectúa". Para defender esta idea, los magistrados destacaron entonces que no tiene sentido convertirlo "en una mera comisión calificadora de automática y objetivada computación de méritos, excluyéndole de hacer valoraciones de conveniencia institucional".

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Según argumentan desde el entorno de Delgado, este mismo razonamiento es aplicable a la fiscal general del Estado. Ella misma se encarga de ponerlo negro sobre blanco en su nueva propuesta de nombramiento de Eduardo Esteban como fiscal de Sala de Menores, a la que ha tenido acceso El Confidencial. "La fiscal general del Estado ostenta la jefatura superior del Ministerio Fiscal y su representación en todo el territorio español", advierte en su primera página. "Una de las más relevantes manifestaciones de esta facultad de dirección consiste en la potestad de efectuar nombramientos discrecionales o, en su caso, de elevar propuestas de nombramientos al Gobierno".

A partir de ahí, Delgado apunta que los fiscales de Sala únicamente deberán contar con "una mínima especialización acreditable" y no se puede exigir que el elegido precise "de extraordinarios conocimientos" o sea "el más versado en la especialidad". De esta manera, vuelve a nombrar a Eduardo Esteban elaborando argumentos nuevos y desmereciendo al oponente, una estrategia que, a la vista de la mencionada sentencia, en principio permitiría esquivar el argumento de que "no se han valorado sus méritos". Cumplido este requisito, la fiscal general considera que no cabe otra conclusión: al igual que el CGPJ, ella también goza de discrecionalidad en los nombramientos.