Casado opta por la 'vía Rajoy': no volverá a su escaño y mantendrá un perfil bajo

Pablo Casado seguirá el modelo de Mariano Rajoy para su adiós a la presidencia del PP. Se mantendrá al frente del partido hasta el cónclave extraordinario del 2 y 3 de abril, pero no tiene previsto volver a ocupar su escaño en el Congreso, según fuentes populares. La intervención en la sesión de control del miércoles ha sido la última y este fin de semana preparará el discurso que el martes pronunciará ante la Junta Directiva Nacional. Desde ese momento, se retirará como hizo su antecesor. En la larga reunión con los barones dio su palabra de que se mantendría al margen. “Ya me despedí en el Congreso”, aclaró, ante la insistencia de alguno de los asistentes que quería garantías por escrito del paso atrás. El todavía presidente les dio su palabra. Su entorno reconoce que aún no sabe bien qué hará en un futuro. La abrupta salida no le ha dejado ni un minuto para reflexionar y ahora tiene que recomponerse, explican cuando se les pregunta por los planes inmediatos: “De momento, pasar más tiempo con la familia”.

Las riendas del Grupo Parlamentario Popular las tomará la portavoz, Cuca Gamarra, que, si no hay cambios de última hora, asumiría las preguntas al presidente Pedro Sánchez en la sesión de control. Será durante un mes, porque, tras la celebración del congreso, Alberto Núñez Feijóo diseñará sus equipos tanto en el partido como en el Congreso y el Senado. Si Casado quiere seguir en algún puesto dentro de la nueva estructura, Feijóo contará con él y la idea es integrar también en su proyecto a personas que han trabajado estos últimos tres años en la cúpula.

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“No es cuestión de personas, sino de respeto al partido”, trasladó el presidente de la Xunta a sus compañeros en la reunión de Génova, en la que también tuvo una mención para Casado. Recordó que, lejos de lo que se ha venido denunciando estos días, los barones siempre le han apoyado. El gallego tiró de hemeroteca: “Hemos sido muy generosos contigo. Cuando sacaste 66 diputados lo entendimos y te dimos nuestro respaldo”. También le reprochó que dejase el partido en manos del secretario general, Teodoro García Egea. Hizo una lista de agravios a los presidentes autonómicos y provinciales. Quedaba dicho. De la dirección nacional casi todos son recuperables salvo el ex secretario general, que solo podría seguir de diputado raso.

El entorno de Casado reconoce que aún no sabe qué hará en un futuro. “De momento, pasar más tiempo con la familia”, señalan

El nombre de Ana Pastor toma una vez más relevancia dentro del “clan gallego”, donde tampoco puede pasar desapercibido el diputado por Lugo, Jaime de Olano. Como les ocurrió a los socialistas con la marcha de Sánchez en 2016, vivirán una situación de interinidad que se irá normalizando cuando se repartan las nuevas responsabilidades. Aunque, si el presidente del Gobierno cumple su palabra y no adelanta las elecciones generales, Feijóo tendrá que convivir con los miembros de la lista que en su día confeccionó Casado hasta finales de 2023.

Rehabilitar a Álvarez de Toledo

En el partido ya se ha puesto a circular la idea de rehabilitar a Cayetana Álvarez de Toledo. No como portavoz, pero sí con más funciones. Los que defienden esta alternativa recuerdan que es bueno tener varios perfiles como en su día hizo José María Aznar para ensanchar el PP. Hay temor a que el votante sitúe demasiado al centro a Feijóo y por eso piden dar vuelo a Álvarez de Toledo e Isabel Díaz Ayuso ante el auge de Vox. 'A priori', no obstante, el presidente de la Xunta no se arriesgará con la exportavoz en el Congreso, que no encaja en la forma de ver la política del futuro líder del PP.

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Con el sillón del líder vacío, afrontará el principal partido de la oposición el debate del estado de la nación, que no se celebra desde 2015. Gamarra podría ser la encargada de enfrentarse al presidente, pero entre sus compañeros hay dudas de que sea el perfil adecuado para una cita de ese calado. El barón gallego tendrá que optar por buscar un espacio donde confrontar con Sánchez y ya se habla de que desembarque en el Senado, aunque su equipo más cercano es tajante: “Aún no se ha cerrado nada de eso”. En cuanto a la sucesión en Galicia, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, es el designado. Sería una transición fácil, ya que el propio Feijóo anunció que eran las últimas elecciones a las que se presentaba.