García Egea: "No me voy porque haya hecho nada malo, sino para facilitar un congreso"

No ha habido ajuste de cuentas. Teodoro García Egea ha roto su silencio tan sólo unas horas después de comunicar a Pablo Casado que había decidido dimitir de su cargo como secretario general del PP. En una entrevista para 'La Sexta', Egea ha asegurado que el presidente nacional no ha entregado su cabeza, sino que su salida ha sido una "decisión propia" para "facilitar un congreso". El conjunto de la entrevista, que se ha alargado durante más de una hora, ha sido un alegato a favor de la unidad interna "sea quien sea" el nuevo presidente que elijan los militantes en el próximo congreso extraordinario, deslizando incluso un guiño a Alberto Núñez Feijóo en forma de chascarrillo: "Me estoy volviendo gallego", ha ironizado el popular.

"No me voy por que haya hecho nada malo", ha reiterado el hasta hoy número dos de Génova, defendiendo tanto su papel como el del todavía presidente nacional en la batalla entre la dirección nacional e Isabel Díaz Ayuso, que acusó a Génova y a él mismo de emprender una campaña "cruel" contra ella para tratar de derribarla políticamente. "Un secretario general aguanta todas las campañas. Un padre no tanto", lamentaba.

"Para mí lo cómodo hubiese sido obviar esa información"

El dirigente popular ha negado una vez más que Génova urdiese una campaña de espionaje contra Isabel Díaz Ayuso para investigar un presunto "tráfico de influencias" en la administración de la madrileña por la adjudicación de un contrato sanitario en el que medió el hermano de la dirigente, Tomás Díaz Ayuso. "En el momento en que me llega una información, me enfrento a una encrucijada. ¿Conveniencia o rectitud? Para mí lo cómodo hubiese sido obviar esa información", ha defendido Egea, que ha priorizado la defensa de las denostadas siglas del PP por encima de un ajuste de cuentas con la madrileña.

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Ignacio S. Calleja

El ex secretario general ha asegurado que, tras las explicaciones presentadas por los dos consejeros de la presidenta el pasado viernes, Enrique Ossorio y Javier Fernández-Lasquetty, el partido decidió cerrar el expediente contra Ayuso, aunque ha lamentado que no existiese colaboración por parte de la dirigente para esclarecer las informaciones que llegaban a Génova. "Me creo a la presidenta de la Comunidad de Madrid", ha asegurado. "Es uno de los mayores activos del partido", continuaba, negando cualquier batalla interna entre él mismo y la presidenta.

Sí ha lanzado un ataque contra su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, del que ha sugerido que "no tiene límites" y que está "lejos" del día a día del partido. También ha reiterado Teodoro García Egea que las presiones por parte de la presidenta de la Comunidad de Madrid para convocar el congreso regional comenzaron justo cuando él mismo solicitó información a Ayuso sobre los negocios de su hermano. "Eso es un hecho", zanjaba.

Se quedó sin apoyos

El popular ha presentado su dimisión en la jornada de este martes tras varios días de vértigo en las filas populares. El ya exsecretario general se había resistido a salir en un primer momento, siendo la cara visible del enfrentamiento con Isabel Díaz Ayuso, pero finalmente se ha visto forzado a dejar el cargo. El próximo martes, Pablo Casado convocará el XX Congreso Nacional, que será extraordinario, y que será activado en el marco de la Junta Directiva Nacional.

Los apoyos que conservaban Pablo Casado y Teodoro García Egea han ido cayendo como un castillo de naipes a lo largo de este martes. Si ayer los dos dirigentes estaban decididos a pelear y resistir, hoy todos los dirigentes autonómicos -salvo Navarra- y la mayoría de cargos de la cúpula popular le han dado la espalda. Tampoco han conservado los apoyos de su grupo parlamentario. Cuca Gamarra ya se desmarcó ayer de Casado en la reunión de la dirección, mientras que éste martes la dirección del PP en el Congreso, con Adolfo Suárez Illana, Mario Garcés o Guillermo Mariscal al frente, ha exigido la cabeza del secretario general y la convocatoria de un congreso urgente.