Vox casi duplica sus apoderados del 28-A al 10-N y pasa de 10.900 a 17.000

Los internautas dieron como ganador del debate del pasado lunes al candidato de Vox, Santiago Abascal. Así lo reflejó la mayoría de las encuestas que publicaron las ediciones digitales de los diarios españoles horas después del evento televisivo. El optimista panorama que se dibujaba para la formación, sin embargo, fue recibido con prudencia por su cúpula. Fuentes del partido, de hecho, matizaron a El Confidencial esa supuesta victoria. Admitieron que se trataba de sondeos no científicos y que muchos de los que votaron que el líder de Vox fue el vencedor de la disputa dialéctica muy posiblemente eran electores espontáneos, pero seguro que también había una elevada cantidad de seguidores leales.

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Los de Abascal son, de hecho, la formación que cuenta con más incondicionales del arco parlamentario. Sus simpatizantes, como reflejó la encuesta de IMOP para El Confidencial, además de otros sondeos, son los más fieles, los que más volverán a votar al mismo partido al que respaldaron en las últimas elecciones generales, celebradas el pasado 28 de abril. Esta característica convierte al público de Vox en el más leal de los que participaron en el debate y, en cierto modo, difuminaría el resultado arrojado por las encuestas que publicaron los diarios sobre el supuesto ganador del debate, ya que los adictos a un partido son más proclives a movilizarse, según entendían las fuentes consultadas.

Sí consideran también desde Vox que Abascal llegó a gente que no había alcanzado antes. De hecho, para eso iba el líder del partido, como él mismo explicó durante su exposición en el minuto final, cuando señaló que su pretensión era poder explicar sus propuestas sin intermediarios que pudieran modificarlas. Y, a juicio de la formación, el candidato consiguió su objetivo. El debate, por lo tanto, empujó a Vox un poco más hacia arriba en sus aspiraciones electorales, que ya dibujaban una tendencia creciente en las últimas semanas, como han ido reflejando todas las encuestas —salvo la del barómetro del CIS, muy criticada por los sociólogos—.

Después de la cita televisiva, el sondeo del Gabinet d'Estudis Socials i Opinió Pública para 'El Periòdic d'Andorra' dio ayer entre 53 y 58 escaños a Vox, una cifra que más que duplica la que ya tenía la formación en el Congreso de los Diputados, donde obtuvo 24 asientos tras las pasadas elecciones generales. Desde el partido, sin embargo, también quieren ser cautos en este punto, ya que no se olvidan de que los días previos a los comicios de abril algunos sondeos también arrojaban números similares.

Otros datos muestran igualmente la tendencia alcista de Vox. Según ha podido saber El Confidencial, los de Abascal experimentaron un importante crecimiento de afiliados tras el debate. En concreto, entre el fin de semana y el lunes, el número de socios de la formación se ha incrementado en medio millar de personas —de 52.577 a algo más de 53.000—, un crecimiento que no se daba desde que el partido irrumpió en las elecciones andaluzas, para sorpresa de todos sus rivales, con una docena de escaños en el Parlamento regional. Desde el partido, entienden que el debate ha tenido mucho que ver en esta afiliación masiva.

Sea como fuere, la formación ha experimentado un notable crecimiento en apenas medio año, desde que tuvieron lugar las pasadas elecciones generales, que no sirvieron para que el candidato con más respaldos, Pedro Sánchez, lograra formar Gobierno. Para esos comicios, Vox contaba con 10.900 apoderados que velaban por los intereses del partido en los cerca de 20.000 colegios electorales. Ahora, los de Abascal tienen casi 17.000 personas que van a realizar la misma función, lo que permitirá a la formación tener presencia en la práctica totalidad de las urnas repartidas por toda España.

La mayor aparición en los medios, el citado debate televisivo, el acto de Vistalegre (que movilizó a 14.000 personas, 6.000 más que el año anterior) o la nueva sede del partido muestran a una formación con más músculo financiero y con una estrategia más trabajada que la que se presentó a los comicios de abril, cuando los de Abascal estaban enfrentados a gran cantidad de medios y su presencia en las cadenas fue mucho menor, hechos que también hacen pensar en una mayor respuesta ciudadana de cara a las elecciones del próximo domingo, que serán las únicas que ofrezcan los datos reales.