El ERE de Telefónica finaliza con exceso de solicitudes y no habrá despidos forzados

El expediente de regulación de empleo (ERE) ejecutado por Telefónica ha registrado más solicitudes de las que se habían planteado. En concreto, la compañía pactó con los sindicatos un recorte de plantilla de 3.421 trabajadores, pero hasta 3.640 personas han demandado su adhesión de forma voluntaria.

No obstante, la empresa de telecomunicaciones ha aceptado finalmente 3.420 peticiones, con lo que solo ha quedado una plaza vacante, según informan desde los sindicatos UGT y Sumados-Fetico. En cualquier caso, no habrá despidos forzados, como se había pensado si el número de solicitudes no alcanzaba a cubrir el proceso. Telefónica se había guardado esta opción al decantarse por un ERE en lugar de los planes de separación individual (PSI) que venía aplicando en los últimos ocho años.

Este proceso afecta a sus tres principales filiales en España. Específicamente, se han aceptado 2.946 solicitudes en Telefónica de España, 391 en Móviles y 56 en Soluciones. "Respecto a las solicitudes recibidas en las áreas consideradas como no excedentarias, se aceptarán las mismas hasta cubrir los porcentajes marcados en el acuerdo, lo que supone que 247 solicitudes serán denegadas al ser las que exceden el 35% pactado", explican desde UGT.

En un primer momento, quedaron vacantes 28 solicitudes adicionales —sobre la cifra inicial de 3.421 despidos previstos—. Pero tras una reunión celebrada este viernes, la empresa ha aceptado aceptar la mayoría de ellas, reduciendo el número de personas vetadas hasta que finalmente solo ha quedado una plaza sin cubrir.

Podían adherirse los empleados que cumplan 56 años o más durante 2024 y tuviesen una antigüedad superior a los 15 años. Las indemnizaciones son diferentes en función de la edad. Aquellos nacidos en 1968 recibirán el 68% de su salario hasta cumplir los 63 años y un 38% hasta los 65 años. De la misma manera que los nacidos entre 1967 y 1964 percibirán un 62% y un 34% de su sueldo, respectivamente. Mientras que los que sean más mayores ingresarán un 52% hasta los 63 años y un 34% hasta los 65.

Telefónica calcula que este proceso le costará 1.300 millones de euros, cantidad que ya ha provisionado, sin que exista impacto en caja. Es decir, el coste promedio por trabajador se situará en unos 380.000 euros, una cifra inferior a la de los planes de salidas acometidos por la compañía en los últimos años.

Entre sus previsiones también contempla un ahorro de 285 millones anuales en los gastos directos a partir de 2025, cuando se haya completado la reducción de plantilla. Además, estima que el impacto en generación de caja será positivo en 2024, ya que se espera que el adiós de los empleados comience en este primer trimestre.