Valencia acelera la expropiación de terrenos para atraer la gigafactoría de Volkswagen

La Generalitat Valenciana ha acelerado los trámites para la expropiación de los terrenos de la segunda fase de Parc Sagunt, el polígono logístico junto a la ciudad valenciana de Sagunto que la Volkswagen baraja como uno de los emplazamientos para su fábrica de celdas de baterías para el automóvil eléctrico. La comisión técnica informativa de la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad informó este miércoles por la mañana del proyecto de adquisición de 5,6 millones de metros cuadrados, ahora de uso rústico, junto a la primera fase del complejo industrial y logístico que desarrolla la mercantil Espacios Económicos Empresariales, participada al 50% por la Administración autonómica y la estatal SEPI.

Del total de la pastilla de suelo, la mercantil pública ha comprado y cerca de un millón de metros tras alcanzar acuerdos privados con los propietarios a un precio de entre 15 y 18 euros metro en función del uso del plan de reparcelación. El resto se transmitirán por expropiación a la tarifa marcada por el jurado provincial. Tras el informe favorable de los técnicos de la 'conselleria' que dirige el socialista Arcadi España, el proyecto se someterá a la Comisión Territorial de Urbanismo de la semana que viene, que es el órgano competente para aprobarlo de forma definitiva.

TE PUEDE INTERESAR

El Gobierno corrige el Perte del automóvil para dar más poder a los grandes fabricantes

Víctor Romero. Valencia

Este paso es clave para iniciar los trabajos de desarrollo de la pastilla de suelo, que desarrollará Espacios Económicos en su condición de agente urbanizador con una inversión económica importante. Además de dotar a las parcelas de los accesos y los servicios básicos, el plan contempla la creación de una zona intermodal ferroviaria, con conexión directa al Puerto de Sagunto, al corredor mediterráneo y al cantábrico, lo que habilita la posibilidad tanto de exportar producto como de suministrar a las plantas de SEAT y Volkswagen en Martorell (Barcelona) y Landaben (Navarra). "En el Plan Especial del Área Logística de Sagunt se está estudiando la implantación de servicios de autopista ferroviaria. Se generará un nuevo espacio con accesibilidad ferroviaria que permita atender las necesidades adicionales de intermodalidad de la Comunitat Valenciana", señala la empresa promotora.

La conectividad logística, los plazos de ejecución y la posibilidad de ofrecer una extensión de suelo capaz de albergar, no solamente la gigafactoría, sino también empresas proveedoras y de componentes son algunas de las ventajas que la Generalitat valenciana pone en valor para la elección de Sagunto como emplazamiento del que será una de las iniciativas estrellas del plan estratégico de transformación de la industria del automóvil en España. La gigafactoría implica inversiones que superarán los dos mil millones de euros y cientos de puestos de trabajo de nueva creación.

TE PUEDE INTERESAR

Europa empuja el tren de mercancías en Extremadura en pleno pulso por la gigaplanta

Víctor Romero. Valencia

El efecto tractor para el territorio que resulte elegido como base de la planta industrial es innegable. Sin embargo, Volkswagen sigue guardando silencio sobre su decisión. Extremadura es otro de los emplazamientos barajados y que contaba inicialmente con el visto bueno del Gobierno que preside Pedro Sánchez. Aragón no da por perdida la carrera y esta misma semana la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, mostraba su deseo de que una de las posibles dos plantas de baterías que se construya en España se instale en Cataluña, de donde ella procede como exalcaldesa de Gavà por las siglas del PSC. "Ojalá fuera así. Es una de las opciones", señaló en una entrevista en Ràdio 4.

La elección tiene que conocerse, probablemente antes del final del primer semestre. Tras obtener luz verde de Bruselas en el encaje entre grandes fabricantes y pymes por el uso de los fondos, el Gobierno prevé publicar en breve la convocatoria de ayudas del Perte del automóvil. Las empresas del sector que pujen por los fondos europeos tendrán que enseñar sus cartas con sus proyectos. Tic, tac.