Sin acuerdo en AENA: división entre inquilinos por rebajas del 50% en el alquiler

Dos semanas después, las tensiones entre AENA y sus inquilinos comerciales siguen sin resolverse del todo. Este martes expiraba el plazo ofrecido por el operador aeroportuario español para acogerse a una rebaja del 50% en el precio de los alquileres a partir de este 2021 (para el año pasado el descuento real es del 60%) y el desenlace ha sido dispar, teniendo presente las tres tipologías de inquilinos (comercio, restauración y servicios financieros).

El resultado ha sido también a tres bandas. Una mayoría del 51% ha rechazado la propuesta de AENA, con grandes operadores como Dufry o Areas entre ellos, lo que hace que el desenlace pueda considerarse como un cierto fracaso. Por otro, hasta un 40% ha aceptado las condiciones, con grandes clientes como Inditex entre los más destacados, mientras que los integrantes del otro 9% (bancos y casas de cambio) han pedido más plazo para valorarlo.

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J. Zuloaga R. Ugalde

Este desenlace provocará que AENA remita el cobro correspondiente a 2020 a quienes no han aceptado la propuesta, aunque cabe la posibilidad de que durante el plazo de pago voluntario pueda alcanzarse un acuerdo. La cotizada ha ofrecido también otras medidas complementarias, como la prórroga de los contratos por varios años o el adelanto de planes de inversión, que podrían servir para encauzar el desencuentro sustanciado este martes 2 de febrero.

En caso contrario, las discrepancias entre arrendador e inquilinos tendrán que resolverse en los tribunales, como ya ha ocurrido durante estas semanas tras las demandas interpuestas por algún pequeño operador como Zea Retail, con resultados dispares según el tribunal de primera instancia. Hasta la fecha, la compañía ha conseguido cuatro fallos a favor, por dos en contra, algunos de ellos canalizados desde la Asociación de Comerciantes de AENA.

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El origen de este conflicto es el desplome de pasajeros provocado por la pandemia, de más del 70% en 2020, haciendo caer en picado la facturación de los comercios. Tras la renuncia a cobrar la renta mínima garantizada anual durante un trimestre (marzo-junio), el operador aeroportuario considera que su oferta implica un reparto de esfuerzos ante el deterioro provocado por una causa ajena y le blinda de cualquier responsabilidad en caso de proceso judicial.

A pesar del tira y afloja, ni AENA ni los grandes operadores (Areas, Ibersol, Dufry, SSP...) están interesados en judicializar sus discrepancias. Aunque la más expuesta es la cotizada presidida (aún) por Maurici Lucena, que se juega nada menos que 750 millones con los alquileres de espacios comerciales, una cifra que ya tiene en revisión. Hasta que no expiren todos los plazos, la posibilidad de un acuerdo está viva, conscientes de que más vale un mal acuerdo que un buen pleito.