El exconsejero auditor de Bankia: "Guindos pidió a 'Goiri' que hiciera tabla rasa"

Aunque su despacho esté a 1.800 kilómetros, Luis de Guindos está muy presente en el juicio de Bankia que se sigue en San Fernando de Henares (Madrid). Su nombre ha vuelto a surgir este miércoles en la declaración de uno de los acusados clave, el expresidente del Comité de Auditoría de Bankia, Alberto Ibáñez.

Le ha mencionado en dos ocasiones. La primera, como posible 'filtrador' del informe del FMI de abril de 2012 en el que se señalaba indirectamente a Bankia como el gran problema del sector financiero, que agravó su situación. Y la segunda por haber provocado su salida del consejo de la entidad en mayo de 2012, tras la dimisión de Rodrigo Rato y la llegada de José Ignacio Goirigolzarri.

Choque con Deloitte

“El 25 de mayo por la mañana, justo antes del Comité de Auditoría, me llamó Goirigolzarri y me dijo que sentía tener que pedirme que dimitiera. Él hubiera querido que continuara en el banco, pero el ministro de Economía le había pedido que hiciera tabla rasa. Ese mismo día presenté mi dimisión”, ha explicado Ibáñez ante el tribunal.

Este acusado es clave porque presidió el Comité de Auditoría que no recibió el informe de Deloitte para cerrar las cuentas de 2011, lo que precipitó la salida de Rato. A este respecto, Ibáñez ha reconocido que la auditora le dijo en febrero y marzo que le faltaba información, y que por mail le advirtió de una “posible limitación al alcance”. Aun así, como no volvió a tener noticias, “entendí que todo estaba fluyendo”.

Ibáñez ha estado gran parte de su declaración explicando cómo fueron las conversaciones con Deloitte. En su opinión, el informe de la auditora estaba pendiente de que el Banco de España aprobara el plan de capitalización de Bankia, lo que ocurrió en abril. Ha mencionado llamadas de su compañera en el Comité, Araceli Mora, a la auditora preguntando qué pasaba, ante lo que no habrían encontrado respuesta. El mes acabó sin informe de Deloitte, a pesar de lo cual el secretario del consejo, Miguel Crespo, envió un correo a todos los consejeros a principios de mayo diciendo que estuvieran tranquilos, "todo está bajo control".

Esta versión no encaja con las explicaciones que dio la firma de auditoría en instrucción, que afirma no haber recibido las cuentas firmadas ni la documentación necesaria para cerrar su informe sin salvedades ni limitación al alcance.

Reformulación de cuentas

Tras ello, Ibáñez critica a la actual dirección de Bankia de desconvocar varias reuniones del Comité de Auditoría, a través de Crespo, durante el mes de mayo. Hasta que llegó el mencionado día 25, en el que se trató la reformulación de cuentas. Ibáñez y otra vocal del Comité -la fallecida Carmen Cavero- votaron a favor de reelegir a Deloitte -"no había tiempo para cambiarlo"- y Mora se abstuvo.

Esta consejera dimitió de cara al consejo de administración posterior, en el que se aprobó la reformulación de Goirigolzarri, con voto a favor de Ibáñez. "Me pareció lo honesto y responsable, hubiera causado un gran daño no haciéndolo".