García-Page se reúne con Podemos para darle su no a una lista conjunta al Senado

Más tarde de las de la tarde. Justo al término del pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha. El presidente regional, el socialista Emiliano García-Page, y el secretario autonómico de Podemos, José García Molina, se reunieron para abordar la espinosa cuestión de las listas conjuntas al Senado. Page le dijo cara a cara a su interlocutor lo que ya había adelantado en los últimos días a través de los medios, que no hay nada que hacer y que no habrá ningún tipo de alianza.

La formación morada, con Pablo Iglesias a la cabeza, ya apremió la semana pasada al PSOE para trenzar un acuerdo global, en toda España, para la Cámara Alta, con el fin de arrebatarle la mayoría al PP. Pedro Sánchez respondió enseguida con un "no, gracias". Aquello condenó de muerte la intención del 'president' valenciano, Ximo Puig, de firmar una entente con Compromís y Podemos, para reflejar en el Senado su Pacte del Botànic y, de paso, no perder toda la representación de su partido en el hemiciclo. Los podemistas, no obstante, siguieron con su ofensiva, y presionaron a los barones socialistas, instándoles a que se separasen de la doctrina de Ferraz. Uno de ellos era Page.

El presidente manchego ya rechazó esa posibilidad públicamente, pero sí se comprometió a reunirse con su homólogo morado, para abordar juntos la cuestión. Según explicaban fuentes próximas al jefe del Ejecutivo regional, la entrevista de los dos líderes estaba prevista para la semana pasada, pero se cruzó el incendio del cementerio de neumáticos en Seseña y toda la atención del Gobierno autonómico se volcó en la extinción del fuego.

Podemos no tenía esperanzas

Ayer miércoles por la noche, Podemos recibió la comunicación de que Page estaba dispuesto a recibir a García Molina este jueves en un receso del pleno de las Cortes para ventilar el tema de las listas al Senado. Fuentes de la formación morada no tenían demasiadas esperanzas de que se produjeran movimientos de última hora pese a que el PSOE manchego nunca les había dado "un no tajante". No obstante, aceptaron la invitación. El encuentro, eso sí, se materializó después de la sesión plenaria, más tarde de lo programado.

En la cúpula manchega explican que la entrevista obedece a la pretensión del presidente de mantener sus buenas relaciones con la formación emergente

En el equipo del presidente y en la cúpula regional aseguraban que no habría sorpresas, y que Page repetiría al jefe autonómico de Podemos que no hay caso, que no habrá ningún tipo de alianza para la Cámara Alta. Entonces, ¿por qué la reunión? Fuentes socialistas explicaban esta mañana que es necesario mantener engrasadas las relaciones con los morados, puesto que apoyan desde fuera al Ejecutivo regional. No obstante, al contrario que en otros territorios, donde sí han saltado más chispas entre PSOE y Podemos, Page no se ha encontrado muchas complicaciones con los de Iglesias e incluso pudo aprobar sus Presupuestos de 2016 con su respaldo.

La semana pasada, cuando Podemos rebotó su carta al presidente manchego, este ya dejó clara su postura: "Esto no puede enfocarse de una manera distinta a la de que las listas para el Congreso y para el Senado en España el PSOE las aprueba con los mismos estatutos en toda España y, por consiguiente, yo soy partidario de que las posiciones de cada territorio se pongan en cohesión con las del partido a nivel nacional y salgan unas listas, como siempre, consensuadas", explicó entonces. Page incluso bromeó con la "manía" de escribir misivas que luego se envían a los medios, cuando los dos líderes se ven y hablan "constantemente", y no tiene "el menor problema" en seguir dialogando con él. Desde la dirección manchega se recalca que el jefe del Ejecutivo regional no compartía la estrategia de Puig, igual que tampoco estaba de acuerdo la andaluza Susana Díaz.

15 a 5 a favor del PP el 20-D

De haberse producido un movimiento de última hora, habría sido interpretado sin duda como una rebelión de uno de los barones de mayor peso contra Sánchez. El pasado sábado, el comité federal del PSOE, su máximo órgano de poder, aprobó definitivamente las listas completas para Congreso y Senado en toda España -menos Cataluña, potestad del PSC-, en una reunión a la que Page no pudo ir precisamente por el incencio en Seseña. Y 24 horas antes la comisión de listas había tumbado la pretensión de Puig de un acuerdo valenciano con Compromís y Podemos, con la sola abstención del representante del PSPV, Vicent Sarrià.

Page comparte con Ferraz que las listas han de ser consensuadas a nivel nacional, pero no tiene "el menor problema" en hablar con su homólogo

Además, se habría superpuesto una cuestión legal. El registro de las coaliciones electorales se cerró el pasado viernes, 13 de mayo. Para lo que sí está abierta la ventanilla es para la presentación de las candidaturas, del 18 al 23 de mayo. La única opción que quedaba disponible, pues, era que el PSOE manchego aceptara llevar listas incompletas -como había planteado el PSPV a Ferraz, sin éxito- y después indicar a los electores que tienen que marcar a sus aspirantes y a los que ponga la coalición Unidos Podemos (Podemos e IU), con el fin de concentrar el voto de la izquierda y disputar con más fortaleza los escaños al PP. En las elecciones generales del 20-D, los populares se hicieron con 15 actas en el Senado, por las cinco que consiguió el PSOE, una por cada provincia de la comunidad. Los dos emergentes, Podemos y Ciudadanos, se quedaron sin representación.