El PP se toma "un café" con Vox y Cs avisa de que si negocian se romperá el acuerdo

Los acontecimientos cogen velocidad en Andalucía. Mientras Albert Rivera se paseaba por el Parlamento andaluz con sus 21 flamantes diputados para hacerse una foto y reunirse con el grupo. Trascendió, por una exclusiva de Newtral en La Sexta, que el pasado miércoles hubo un encuentro discreto en un hotel entre el líder del PP andaluz, Juanma Moreno, y el candidato de Vox en Andalucía, el juez en excedencia Francisco Serrano. Fuentes de Cs, preguntados por este asunto, aseguraron que no sabían "absolutamente nada" de este encuentro y advirtieron de que lo acordado era negociar solo PP y Cs. "Si esto no lo cumplen, nuestro acuerdo se rompe", aseguraron desde la formación de Rivera con absoluta rotundidad.

El PP andaluz confirmó que Moreno y Serrano "se tomaron un café", tratando de restar importancia a un encuentro que puede ser clave porque los votos de Vox son imprescindibles, si no se abstiene el PSOE, y tienen la llave del Gobierno y de la Mesa del Parlamento andaluz. "Quedaron para conocerse y presentarse porque no se conocían personalmente", insisten desde el PP andaluz, que aseguran que la reunión, que no la habían comunicado, "no fue secreta" y se celebró "a la vista de todos en la cafetería de un céntrico hotel". "Nada de negociación", subrayaron. Esto complica el discurso de Rivera que este vienes en Sevilla ha negado cualquier acuerdo con Vox y ha insistido en pasar la pelota al PSOE.

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Isabel Morillo. Sevilla

"Susana Díaz es lo suficientemente inteligente para saber que el PSOE se va a ir a la oposición, lo sabe, que asuma su papel, ella defendió la abstención de su partido para que no hubiera terceras elecciones en España, que lo haga ahora y se abstenga en Andalucía". Albert Rivera depositó este viernes, en un desayuno de la SER en Sevilla, toda la responsabilidad sobre el papel de Vox en Andalucía al PSOE, que si se abstiene frente a un Gobierno del cambio de PP y Cs deja al partido de Santiago Abascal fuera de juego. Para ello recordó que Díaz se alineó con los barones del PSOE que promovieron una abstención a Mariano Rajoy para evitar unas nuevas generales.

"¿Sánchez nos va a dejar poner en marcha el Gobierno de Andalucía? Sí o no ¿Susana Díaz prefiere que los populistas tengan la llave o que los constitucionalistas pactemos? Se van a tener que mojar porque vamos a llegar a un acuerdo", sostuvo Rivera. Para cambiar el foco y que la pregunta no sea si Cs y Albert Rivera pacta o no con el nacional populismo de Vox, según definición de sus propios socios europeos, trató de poner toda la atención en Pedro Sánchez, Susana Díaz y la decisión que adopte el PSOE. "Susana Díaz prefiere que los constitucionalistas tengan la llave o que los constitucionalistas gobernemos", recalcó en varios momento del coloquio.

Todos nuestros votantes quieren cambio. La mayoría de los andaluces quieren cambio. El PSOE tiene que ir a la oposición, el gobierno socialista tiene que cambiar, no hay más", avisó Rivera dando por hecho el acuerdo con el PP. Dejó claro es que va a haber un gobierno del cambio y si será o no con los votos de Vox, explicó, dependerá de los socialistas. "Vamos a llegar un acuerdo y que se retrate Susana Díaz" o "mis aliados son los constitucionalistas y habrá que votarles", "hay que gobernar entre constitucionalistas, que el PSOE diga a los andaluces si va a jugar ese papel o se va a posicionar en el no no no y el bloqueo", "pensaba que Susana Díaz era otra cosa pero si quiere eso después de la derrota":.. Este fue el tenor de los argumentos con los que se presentó Rivera en Sevilla.

Del papel del PSOE culpó directamente a Pedro Sánchez, al que culpó de polarizar la sociedad española y a quien consideró "un obstáculo para los acuerdos entre constitucionalistas porque prefiere escoger a Torra o a Iglesias", "no me va a explicar a mi Sánchez como funcionan las alianzas con los populistas".

Según Rivera los socialistas están "muy nerviosos" por el trasvase de votos del PSOE a Cs, "casi 100.000 andaluces que votaban PSOE han votado a Cs". "Lo que le han hecho los andaluces en las urnas se lo van a hacer los españoles también si sigue por ese camino de sectarismo, de enfrentamiento".

"Cambio desde la moderación"

Rivera evitó aclarar si sus socios europeos, que le han pedido que no dialogue ni pacte nada con Vox, entenderían que se hagan con el Gobierno andaluz o con la presidencia del Parlamento andaluz gracias a los votos de Vox este partido. De hecho se burló y negó que ese asunto hubiera estado sobre la mesa este jueves en su visita a Bruselas. "Estamos hablando de la salida del Reino Unido, de las políticas de inmigración, de los tratados de libre comercio con Japón, no hablamos de los votos de la Mesa de un Parlamento andaluz y muy contentos y satisfechos de que Cs pueda encabezar el futuro de España".

En su intervención inicial, Rivera prometió "cambio desde la moderación". Evitó mencionar medidas concretas del futuro gobierno andaluz y pidió "unas semanitas" después de 37 años de gobiernos socialistas en Andalucía. Una mesa de negociación de PP y Cs debate en el Parlamento andaluz la que será la futura guía del Gobierno del cambio, las medidas que se pondrán en marcha en esta legislatura.

El líder de Cs recalcó en su discurso que "Andalucía tiene que acabar con la política de compra de voluntades" y prometió despolitizar los servicios públicos y acabar con los puestos a dedos para dirigir asuntos como la sanidad o la educación. Subrayó que son los profesionales quienes deben gestionar por concurso público y "no por ser amigo, primo o cuñado de un cargo socialista". En la administración autonómica, dijo, encontrarán "dinosaurios, reptiles y todo tipo de especies animales".