Gobierno y oposición chocan por la reforma de la factura de la luz con el precio en récord

Tormenta perfecta en el mercado eléctrico. La subida estructural que está viviendo la luz en los dos últimos meses, con niveles nunca vistos para estas alturas del año, se mezcla con la nueva factura, que entra en vigor el próximo martes 1 de junio y que generará mayores costes para millones de usuarios. Ante este panorama, Gobierno y oposición tratan de actuar y frenar la escalada, aunque sus propuestas miran en direcciones opuestas.

Pese a que aún faltan dos días para que cierre mayo, los elevados precios que se han dado durante todo el mes ya le convierten, pase lo que pase, en el mayo más caro de la historia. El precio medio del mercado mayorista es de más de 66 euros por megavatio hora, cuando en 2020 estaba en 21 euros y en 2019, antes de la pandemia, en 48 euros MW/h. Este viernes la luz escaló a su mayor cota desde la tormenta de Filomena en enero, pese a las suaves temperaturas.

La clave está en los derechos de emisión de CO₂ y del gas, que acaban marcando el precio y actualmente se encuentran disparados, por el alto precio de la materia prima y la especulación alrededor de la ambición en la lucha contra el cambio climático dentro de la Unión Europea.

* Si no ves correctamente el módulo de suscripción, haz click aquí

Y la situación no mejora: los mercados de futuros apuntan a que los precios elevados continuarán en el corto plazo. El mercado mayorista es una parte de la factura, correspondiente al coste de la energía, pero además, el próximo martes entra en vigor un nuevo sistema de factura que redistribuirá el coste de los cargos, otra parte de la factura. El nuevo recibo trata de penalizar aquellos horarios de más demanda (de 10 h a 14 h y de 18 h a 22 h de lunes a viernes) e incentivar las horas de la noche y el fin de semana.

No obstante, los expertos advierten que muchos consumos no se acabarán trasladando de hora y el usuario pagará más. Este mismo jueves, la asociación de consumidores Facua calificaba de "aberrantes" las tarifas que se van a imponer. Desde que se conocieron los nuevos precios de tarificación, los expertos advertían de subidas de más del 10% para usuarios que tenían ya su tarifa optimizada (con discriminación horaria), y que suponen casi once millones de consumidores, mientras no se aprecian grandes efectos de ahorro para el resto si no se desplazan consumos a la madrugada y al fin de semana.

TE PUEDE INTERESAR

La luz se dispara al nivel más caro de la historia en un mes de abril por el coste del CO2

Juan Cruz Peña

Todos los usuarios con la factura regulada (PVPC) notarán el cambio y muchas compañías eléctricas están avisando a sus clientes que están en mercado libre de que les subirán la luz a tenor del nuevo sistema de cargos, con los que se pagan las primas a las renovables, la generación extrapeninsular o la deuda histórica del sistema eléctrico.

Gobierno y oposición, sin acuerdo para bajar la luz

Con este panorama, tanto Gobierno como oposición tratan de hacer propuestas que permitan un alivio sobre la factura de la luz, bien de primera necesidad. Sin embargo, también en esta cuestión hay un desacuerdo manifiesto. Esta misma semana, el Partido Popular llevaba al Congreso de los Diputados una batería de reformas fiscales sobre la ley del sector eléctrico encaminadas a reducir el precio de la factura.

Entre las propuestas más destacadas está la eliminación del impuesto del 7% a la generación, que según estiman provocaría una bajada del coste de la luz en el mercado mayorista inmediata. Con este gravamen se recaudan cada año entre 1.500 y 1.600 millones de euros. Dados los altos precios, este año la recaudación será alta por este fin. Sin embargo, PSOE, Podemos, ERC, Bildu, Compromís o la CUP votaron en contra de excluir este tributo al entender que dicha medida supone un golpe a los ingresos de las arcas públicas.

Más de 2.000 millones por el CO₂

Otra medida muy destacada que proponía el PP es llevar hasta los 2.000 millones el límite de ingresos por las subastas de CO₂ para dotar al sistema eléctrico. La fuerte subida del coste de los derechos de emisión de gases de efecto invernadero, que está repercutiendo en la subida de la luz, generará unos ingresos este año de unos 2.200 millones de euros, según estiman fuentes empresariales consultadas por El Confidencial. Esto supone 1.100 millones más de los 1.100 millones que hay presupuestados para el sistema eléctrico. De elevar la dotación de fondos procedentes del CO₂, las fuentes consultadas creen que se podría rebajar el precio de la luz de forma inmediata.

TE PUEDE INTERESAR

El Gobierno apunta al recorte de hidráulica y nuclear para mitigar los altos precios de la luz

Juan Cruz Peña

Sin embargo, el Gobierno no está de momento mirando en esa dirección, ya que otros sectores como la industria también reclaman llevarse parte de esa partida del CO₂ que ha disparado los ingresos. El Ejecutivo pretende rebajar el precio del mercado mayorista de la electricidad reduciendo los ingresos de las empresas. Concretamente, estudia reducir la retribución de la hidráulica y la nuclear, que aprovechan el alto coste que provoca el CO₂ sin tener que asumir su coste, ya que no son fuentes emisoras.

Una medida sensible para las compañías, que el Ejecutivo pretende llevar el próximo mártes a Consejo de Ministros, según avanzaba este viernes 'El País'. Esta medida afecta fundamentalmente a Iberdrola y Endesa, aliados del Gobierno para otras reformas como el Fondo Nacional de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico, que pretende trasladar costes de la factura de la luz al gas y a los combustibles. Esta reforma se aprobará de forma inminente también antes de llegar al trámite parlamentario en las Cortes.

Pese a ello, y en paralelo a lo anterior, el Ejecutivo lleva meses trabajando en el recorte a hidráulica y nuclear, una medida que pactó con su socio de Gobierno Unidas Podemos en el programa del Gobierno de coalición. La propia ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, volvió a poner esta medida encima de la mesa a principios de este mes, dados los elevados precios de la luz, que, entre otras cosas, están presionando con fuerza a la inflación. Sin embargo, la luz sigue al alza y dichas reformas, por ahora, no llegan.