Calviño promete a los inversores globales que la reforma laboral no frenará el empleo

La flamante vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, ha empezado su andadura cumpliendo con el papel encomendado por el presidente Pedro Sánchez: calmar la incertidumbre de los inversores. En su intervención en el Spain Investors Day, en el que se dan cita los principales bancos y fondos de inversión del mundo y los reguladores, la vicepresidenta económica ha remarcado que la prioridad para el nuevo Gobierno será la creación de empleo. Esta, y no otra; crecer y crear empleo. Esto significa que cualquier medida encaminada a redistribuir las rentas, mejorar la calidad en el empleo o reducir la desigualdad tendrá que ser compatible con la contratación.

Durante su intervención, Calviño ha repetido que el Ejecutivo seguirá una "política moderada y responsable" con un claro "compromiso con la reducción del déficit y la deuda públicas". Los inversores han mostrado su preocupación por la derogación de la reforma laboral que prometió la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en su toma de posesión hace solo dos días. Calviño ha remarcado que en ningún caso habrá una derogación total de la reforma laboral, sino que se cambiarán algunos aspectos, muchos de ellos ya están identificados por sindicatos y patronal en el marco del diálogo social, por ejemplo, reducir la dualidad de las contrataciones.

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"Hay un acuerdo en que tenemos que ajustar algunos elementos de la legislación laboral en los que los sindicatos y patronales llevan tiempo trabajando", ha explicado la vicepresidenta económica. Eso sí, cualquier cambio en materia laboral será compatible con "seguir creando empleo". "El desempleo sigue en un nivel intolerablemente alto", ha recordado Calviño, "por lo que mantener la creación de empleo es la prioridad total". En palabras de la vicepresidenta: "El objetivo es lograr un mercado laboral justo con salarios apropiados [...], es posible mejorar elequilibrio del mercado laboral y mantener la creación de empleo".

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La vicepresidenta económica ha estrenado el cargo ante los inversores internacionales con un mensaje claro: "El gobierno quiere duplicar el ritmo de reducción de la ratio de deuda pública sobre el PIB". Esto significa lograr un ajuste del endeudamiento próximo a los dos puntos del PIB al año, para lo que sería necesrio mantener la reducción del déficit público y apuntalar el crecimiento económico.

El desempleo sigue en un nivel intolerablemente alto [...], por lo que mantener la creación de empleo es la prioridad total

"Los mercados de deuda pública han confirmado la mejora de la confianza en España con la última emisión de deuda sindicada a 10 años", ha presumido Calviño. En efecto, el Tesoro cerró el martes su libro de demanda para la emisión de un nuevo bono a 10 años con una emisión sindicada que logró más de 52.000 millones de euros de peticiones. "Es la mayor demanda nunca registrada por un emisor público o privado en Europa", señaló Calviño. En su opinión, tal apetito por el 'papel' español es la mejor evidencia de la confianza que despierta el nuevo Ejecutivo entre los inversores.

Calviño tampoco ha querido eludir el compromiso social del Gobierno. "La disciplina presupuestaria tiene que acompañarse con políticas sociales", señaló la vicepresidenta, "pondremos mucha atención en la parte más débil de nuestra sociedad para asegurar que nadie se queda atrás". Entre las prioridades para combatir la desigualdad está la inversión que beneficie especialmente a las clases más bajas: "educación, salud y garantizar la suficiencia del sistema de pensiones". "España puede demostrar, con una política económica moderada y realista, que puede hacer que dos más sumen mucho más de cuatro", culminó Calviño.