El paro subió en 63.747 personas en enero pero se mantiene el ritmo de la afiliación

El mes de enero es siempre complicado para el empleo en España ya que supone el fin de la temporada de Navidad y, por lo tanto, de despidos en el sector del comercio. Este año no ha sido diferente y el paro aumentó en 63.747 personas respecto al mes de diciembre, lo que sitúa el número total de parados en 3.476.528 personas. Sin embargo, pese al avance del número de desempleados registrados en las oficinas de empleo, el mes de enero no fue un mal mes, ya que se mantuvo la inercia de creación de empleo como muestran los datos de afiliación a la Seguridad Social.

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El número de cotizantes se redujo en 178.170 personas respecto a diciembre, el segundo mejor enero de la crisis (solo peor que el del año pasado, cuando salieron 174.879 afiliados. En tasa interanual, el ritmo de creación de empleo marcó su mejor enero desde 2007, lo que refleja el ritmo elevado de la contratación en los últimos 12 meses. En concreto, en el último año se han incorporado 607.856 nuevos cotizantes a la Seguridad Social, por encima de los 569.817 afiliados que se incorporaron en enero de 2017. De esta forma, la economía española suma ya 11 meses consecutivos con un ritmo interanual de la afiliación superior a las 600.000 personas.

Si se desestacionaliza el dato de afiliación del mes de enero, esto es, se elimina el efecto de la Navidad, la afiliación aumentó en 66.578 personas, el segundo mejor dato en una década, solo por debajo de los 67.460 afiliados que se incorporaron en enero de 2017, el mejor mes desde octubre. Esto permite que el número total de cotizantes a la Seguridad Social fuese de 1,828 millones de personas, el dato más elevado en un mes de enero desde 2008.

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El ritmo de crecimiento de la afiliación, en tasa interanual, se mantuvo por encima del 3,4%, niveles en los que se mueve desde el pasado mes de marzo. En febrero es muy probable que se mantengan estos ritmos interanuales del número de cotizantes, pero a partir de marzo será muy complicado que siga así, ya que fue en marzo de 2017 cuando el mercado laboral español dio un gran acelerón, con incrementos anuales de la afiliación de más de 600.000 personas. En mayo llegó a aumentar en 678.163 personas, cifras de récord para España que ponen el listón muy alto para este ejercicio.

Turismo y consumo

Los meses de enero siempre han sido complicados para el mercado laboral español por el fin de la temporada de Navidad. Sin embargo, desde el estallido de la crisis, los datos son sensiblemente peores, lo que refleja hasta qué punto la recuperación se asienta sobre el consumo y el turismo. Así, no es de extrañar que este mes de enero se perdieran 157.000 afiliados en el sector servicios, casi 4.000 más que en el mismo periodo del año anterior. El sector servicios originó el 88% de la pérdida de afiliación respecto a diciembre.

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El resto de sectores también destruyeron empleo, aunque a un ritmo inferior. La industria perdió 8.770 afiliados en enero, casi 500 mejor que en el mismo mes del año anterior. Por su parte, la construcción redujo el número de cotizantes en 7.800 personas, 1.300 mejor que en enero de 2017. La agricultura eliminó 4.100 afiliados, casi el doble que hace un año.

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El sector servicios también fue el culpable del aumento del paro en enero. De hecho, incorporó 72.500 desempleados de los 63.700 nuevos parados. Esto significa que sin el aumento del desempleo en el sector servicios, el número de personas registradas en las Oficinas de Empleo se hubiese reducido. El número de parados en la construcción se redujo en 5.200 personas, el mejor dato de todos los sectores.

La noticia positiva la deja el aumento de la contratación indefinida, que crece a ritmos del 15,2% interanual, mientras que la temporal se incrementó un 6,3% en enero. En total, en enero se registraron 1,75 millones de contratos, un 7,12% más que en el mismo mes del año anterior y el mayor numero de contratos en un mes de enero de toda la serie histórica. De todos ellos, el 9,9% fueron indefinidos y el 90,1%, temporales.