El Gobierno aplaza el 'banco malo' y las preferentes hasta el 31 de agosto

El Gobierno ha aplazado definitivamente la aprobación de la nueva reforma financiera al próximo viernes 31 de agosto porque no estaba totalmente perfilado el 'banco malo', según confirmaron fuentes próximas al Ejecutivo. De esta forma, se incumple la fecha del 24 de agosto que dio el propio ministro de Economía, Luis de Guindos, para aprobar esta nueva norma. No obstante, todavía está dentro del plazo impuesto por el Memorándum de Entendimiento con Bruselas, que establece que el diseño de este vehículo debe estar listo en el mes de agosto.

La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ya había abierto el miércoles la puerta a un aplazamiento de la norma. Según las fuentes consultadas, la Comisión de Subsecretarios no ha incluido en el orden del día del Consejo de Ministros de mañana las nuevas normas sobre el sector financiero. Lo que sí irá a la reunión del Gabinete de mañana es la reforma de la ayuda de los 400 euros para parados sin otra prestación y una nueva ley de impulso al alquiler.

Las nuevas normas financieras incluyen un Real Decreto sobre la reforma del FROB para darle competencias en la liquidación de entidades y sobre las preferentes, así como la creación del 'banco malo'. Pero ni siquiera se sabe si esta última se incluirá en el mismo Decreto o en uno diferente. El motivo de este retraso es la falta de concreción de la mayoría de los aspectos del 'banco malo', aunque ya se conocen algunos aspectos, como que será una sociedad de gestión de activos y no un fondo ni un banco, como adelanta este jueves El Confidencial. Entre los elementos que quedan por definir están los activos que se van a incluir en este vehículo, cómo se van a valorar y cómo se va a realizar el pago de este importe a las entidades rescatadas.

Más avanzado está el desarrollo de los otros dos aspectos, la reforma del FROB y las preferentes. Varios medios han dado cuenta hoy del borrador de un Real Decreto que desarrolla en detalle las facultades que tendrá el fondo de rescate para liquidar entidades (aunque Economía insiste en que no se va a liquidar ninguna), así como la situación en que quedan las preferentes y las nuevas condiciones que se van a imponer para su comercialización, también adelantadas por este diario.

Respecto al 'banco malo', aún no está cerrado el "perímetro" de los activos que se van a incluir. Así, se contempla que se incluya todo o parte del crédito promotor 'sano' -normalmente refinanciado-, así como del crédito a grandes empresas y pymes, que pasaría a considerarse promotor. Es lo que el sector denomina "reclasificación de créditos", otra de las grandes batallas no sólo del 'banco malo', sino de todo el proceso de evaluación de la banca española para determinar el importe definitivo del rescate europeo.

Una tercera incógnita es cómo se va a realizar el pago de este valor a los bancos. En principio, estos pueden recibir dinero en efectivo, deuda pública o participaciones en el capital del propio 'banco malo'. Cualquiera de estas opciones tiene ventajas e inconvenientes, según los expertos. Pero, en todo caso, está claro que la pérdida respecto al valor en libros de los activos menos las provisiones dotadas la tendrán que asumir las entidades, y para ello contarán con el dinero del rescate. Por otro lado, si el precio es superior al de mercado, la diferencia se considerará también ayuda de Estado y se descontará de la ayuda comunitaria.