Cómo una niña ‘rugbier’ de 10 años se convirtió en la imagen de una gran marca

“No todas las princesas llevan corona”, esto fue lo que pensó Raquel Vega, madre de Isabel Andersen, al presentar como candidata la historia de su hija a la última campaña de publicidad que lanzaba el grupo Mondelez España para representar el espíritu de sus famosas ‘Galletas Príncipe’. Buscaban un ‘Héroe’ y hallaron una heroína muy terrenal. Buscaban un nuevo ‘Príncipe’ y encontraron una princesa con botas de tacos y casco de rugby en vez de corona. La historia de superación y lucha diaria de la joven Isabel en su equipo de rugby, conquistó al grupo Mondelez España para convertirse en la protagonista de su último spot publicitario ‘Tu Héroe Príncipe’.

La historia de Isabel conmovió y convenció a los directivos de esta marca. Entre casi doscientas historias de diferentes ‘príncipes’ se decidieron por esta joven jugadora de rugby para representar los valores de su marca (presente desde finales del siglo XIX en los desayunos y meriendas de los niños, y no tan niños). Según la brand manager del grupo en nuestro país, Alexandra Martínez, el ejemplo de Isabel ha conseguido reflejar lo que buscaban con esta nueva campaña (activa desde el pasado mes de mayo con el proceso de inscripción y selección).

Relata que “su historia es inspiradora, porque ha sacado ese pequeño héroe que lleva dentro para enfrentarse a una situación complicada, un deporte desconocido, muy duro físicamente y además en un entorno no muy habitual para una chica. Ella no sólo ha conseguido ser excelente en rugby y aprender rápidamente, sino que además se ha convertido en una fuente de inspiración y energía para sus compañeros. Éste es el espíritu que buscábamos en Príncipe”, explicaba Alexandra en la nota de prensa.

Su amigo Willy

Los principios de esta joven madrileña con el deporte oval no fueron fáciles. Tras probar con otras actividades como la gimnasia rítmica, el fútbol o el ballet, Isabel quiso probar con el equipo de rugby de su barrio, el XV de Hortaleza (su amigo Willy la animó y su padre Pedro, ex jugador del actual CAU Metropolitano, la terminó de convencer). Así, con seis años, Isabel comienza a entrenar con un equipo formado en su totalidad por chicos que llevaban jugando juntos desde dos años antes.

Su madre cuenta a El Confidencial cómo fue el comienzo: “Le costó adaptarse, en un principio los chicos tenían su grupo hecho y no pasaban a Isabel”. Pero esta niña no estaba dispuesta a rendirse y demostrando su valentía y lucha constante, primero conquistó el corazón de sus compañeros como persona y después como compañera de equipo.

Así, hoy en día, cuatro años después, “Isabel es una de las piezas clave de su equipo, además de ser la referencia de su compañeros en el campo al ser la capitana; todos la respetan y admiran su capacidad de entrega e ímpetu, tanto en los entrenamientos como en los partidos”, son las palabras de su entrenador, Gabriel Martín, a este periódico.

Un imán perfecto

Las sesiones de grabación se hicieron muy largas, como reconocen sus protagonistas, pero fueron totalmente gratificantes porque se pudo enseñar a gente externa a este deporte los valores que en él todavía se conservan. “La historia de Isabel es un imán perfecto para enganchar a más niños y niñas al rugby”, enfatiza el técnico. “Estamos de moda y de eso se están dando cuenta las grandes marcas como Mondelez España”, explica el entrenador del equipo madrileño.

“Cuándo me llamaron por primera vez de Galletas Príncipe, me preguntaron por los grandes hitos deportivos, los grandes ensayos que había metido mi hija, los partidos que se habían ganado gracias a ella. Yo les contesté que Isabel no era ninguna CR7, que su mérito no recaía en ser la mejor jugadora de rugby, que ella era una heroína por su trabajo diario, por su garra y por su lucha constante”, aclara Raquel Vega.

De esta manera, lo que en un principio era una historia particular de una niña ejemplar, se convirtió en el ejemplo de un deporte que a través de la historia de una pequeña de diez años, es capaz de convencer a una gran marca para representar su espíritu. El spot reducido de televisión se ha podido ver durante este mes de agosto y la versión completa de la nueva ‘Heroína Príncipe’ se puede ver desde esta web.

Equipos mixtos hasta juvenil

La historia de Isabel no es un caso aislado en el rugby español. En nuestro país crece, cada año se bate el récord de fichas federativas (31.692 en 2016), y uno de los grandes artífices de este crecimiento es el buen trabajo que están haciendo los clubes desde sus categorías inferiores.

Así, lo que antes era casi una utopía, ver equipos de chicas en las escuelas, hoy en día se ve mucho más cerca gracias a ejemplos como el de Isabel Andersen o el de la ‘leona’ internacional Anne Fernández, que te contábamos hace apenas un año en El Confidencial.

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Conseguir enganchar cada vez a más niños y niñas a este deporte es un mérito en el que intervienen muchos factores. Un gran ejemplo de ello es cualquier partido de categorías inferiores (hasta dieciséis años), en los que podemos ver a niños y niñas jugando juntos en el mismo equipo. Un gran acierto por parte de la Federación Española, las territoriales y los clubes, que favorece el crecimiento de este deporte a un ritmo vertiginoso en nuestro país. Parafraseando a la mejor árbitro del mundo de rugby, Alhambra Nievas: “Esta sociedad necesita más rugby” y en España parece que nos estamos empezando a dar cuenta de ello.