El Barça se deshace en defensa en Mallorca y naufraga en un partido enloquecido (2-2)

Un error grosero de Marc-André ter Stegen inició el derribo del Barça en Mallorca (2-2). El portero alemán, seguro de vida la pasada temporada y uno de los futbolistas más determinantes en este inicio de curso, regaló un balón en salida de balón ante la presión de Vedat Muriqi y Antonio Sánchez y el delantero kosovar castigó sin piedad su fallo. Aunque el gol bermellón llegó en el minuto 8 de la primera parte, el Barça pudo empatar el encuentro en una ocasión clara de Ferran Torres. El equipo de Xavi Hernández perdonó la primera, pero no la segunda, cuando Raphinha ejecutó un latigazo al fondo de la red al filo del descanso. El extremo brasileño tendría el 1-2 en sus pies, que perdonó solo ante Rajkovic. Abdón Prats, a pase de Muriqi, dibujaría el 2-1 en el tiempo de descuento y Fermín López rescataría un punto para evitar que el Barça sufriese su primera derrota en esta Liga.

De menos a más evolucionó el equipo de Xavi, superado por el juego directo del Mallorca. La figura de Muriqi, imparable por arriba, tiranizó a los centrales azulgranas en los duelos directos. Un quebradero de cabeza para Íñigo Martínez y Ronald Araújo. El kosovar fue capaz de dar oxígeno a los hombres de Javier Aguirre, potenciar a Abdón Prats y Antonio Sánchez y abrir la lata. En un inicio de encuentro donde el Barça estuvo incómodo, sería Muriqi quien aprovecharía una mala salida de balón de ter Stegen para convertir la asistencia de su compañero en el primer gol de la noche.

Con ocho goles en siete jornadas, el Barça ha perdido una de sus principales señas de identidad la temporada pasada: la portería a cero. El equipo de Xavi tiene facilidad para marcar, pero también pierde el control y encaja con facilidad. El gol espoleó a los locales, que ya venían presionando con acierto y colmillo la salida de balón culé. Los de Javier Aguirre solo tenían que buscar en largo a Muriqi para desplegarse y poner en aprietos al Barça, incapaz de controlar los envíos sobre el kosovar. Joao Félix intentó poner las tablas con un remate blando y acto seguido, Ferran Torres acarició el gol.

El Barça, noqueado en el momento clave

No fluía el Barça, pero transmitía sensación de poder marcar en cualquier momento. En el 39, el delantero valenciano desperdició la oportunidad más clara tras un pase magistral de Gavi y Oriol Romeu se libró de la expulsión por un codazo. Solo dos minutos después, Raphinha se inventó una diagonal vertical y un misil desde la frontal para el 1-1. El Barça se vino arriba y Joao Félix primero, y el propio Raphinha después, rozaron la remontada. Los azulgranas perdonaron y, en el descuento, una peinada de Muriqi para Abdón Prats sorprendió a ambos centrales culés y el Mallorca daría un mazazo en el momento de más dudas local.

Los azulgranas empezaron la segunda mitad sin cambios y con Lewandowski en el banquillo. No tardaría el equipo catalán en reaccionar a través de un misil de Joao Félix al palo que Rajkovic desvió con la mirada. La ocasión despertó al Mallorca, que empezó a tocar la pelota con más tranquilidad. Xavi movió ficha y sentó a Ferran Torres por Lewandowski. No encontraba el Barça ritmo y velocidad con la pelota y Xavi insistió de nuevo: fuera Joao Félix y Oriol Romeu y dentro Lamine Yamal y Fermín López. El hispanoguineano forzó un penalti con un piscinazo que el árbitro anuló tras revisarlo con el VAR.

El Mallorca parecía respirar tranquilo hasta que Yamal otra vez frotó la lámpara con un pase filtrado hacia Raphinha, que rompió a la espalda. El brasileño centró la pelota de primeras, Lewandowski la dejó pasar y Fermín López puso el 2-2 en el marcador. No se haría con el control el Barça y Nastasic amenazó con el 3-2 a balón parado. Koundé entró por Íñigo Martínez en los minutos finales y tampoco pudo frenar la sangría frente a los delanteros bermellones. Laryn le ganó con facilidad y tuvo otro gol en sus pies. El Mallorca resistiría el arrerón final azulgrana y el Barça se dejaría dos puntos en Mallorca.