La valentía del Real Madrid o cómo se ha quitado los complejos
El Real Madrid va como un tiro. Ganó y convenció contra el Alavés con una pareja sobresaliente: Benzema y Vinícius. Sabe a lo que juega y ha recuperado la autoestima
Después de 23 partidos con Solari, el Real Madrid ha despegado. Está en su mejor momento y esto son excelentes noticias para un equipo que el 28 de octubre tocó fondo en el Camp Nou. El Real Madrid, con otra victoria (3-0) convincente, confirma que tiene identidad. Afrontará el partido de ida de la Copa del Rey contra el Barcelona sin complejos. Es un Madrid con moral, autoestima y seguridad en todo lo que hace en el terreno de juego. Seguro que puede mejorar y hay cosas que perfeccionar, pero tiene la certeza de que ante el Barça ya no hay que agachar la cabeza. Saldrá al Camp Nou con su estilo renovado y la confianza que da haber encadenado una racha de cinco partidos seguidos ganados.
El Real Madrid de Solari sigue madurando como equipo. Cada vez hace más cosas bien y empieza a ser fiable para la traca de partidos que tiene por delante en este mes de febrero —Barcelona, en la Copa, Atleti en la Liga, Ajax en la Champions…—. Es un equipo con identidad y consistencia que ha experimentado una mejoría en cuanto a juego y actitud. Tiene un patrón futbolístico con el que ha resuelto el principal problema: el gol. El juego directo y por las bandas garantiza profundidad y aumenta el tanto por ciento de efectividad.
En la mejoría física y en la mentalidad está la base del cambio. En líneas generales, esta es la explicación para comprender por qué es un equipo que está en semifinales de la Copa y acaba de ponerse a dos puntos del Atlético de Madrid y ocho del Barcelona en la Liga. Para entrar en detalles, hay que ir a las individualidades. En los grandes equipos se tienen que poner al servicio del colectivo. Lo ha conseguido Solari. Era su gran batalla. Que jugara quien jugara, no se notara en el rendimiento colectivo. Para ello, ha elegido sentar a vacas sagradas —Isco y Marcelo— y apostar por la frescura y la energía de los jóvenes —Vinícius y Reguilón—. Solari se ha cargado los estatus y poco a poco ha ido moldeando su idea con más éxitos que fracasos.
Benzema es una amenaza
La pieza clave de todo este engranaje está en Benzema. Hay muchos jugadores que han experimentado una sobresaliente mejoría —Modric, principalmente—, pero el ‘9’ se ha convencido de que tiene que ser el ‘9’. Benzema está enorme. Abrió el marcador contra el Alavés para apuntarse a una racha de cuatro partidos seguidos marcando. No hay mejor terapia para quitarte los complejos de equipo inofensivo —como le sucedió al Madrid de Lopetegui cuando estuvo cinco partidos sin ver portería— que ver de lo que es capaz el francés. Se atreve con todo. Juega y pega. Combina y vuela. Presiona y define. Lo tiene todo Benzema. Si le dura en este mes de febrero, los rivales ya tienen de quién volver a preocuparse. Está imparable y en modo devastador.
Las buenas noticias se acumulan en el Madrid. Al liderazgo de Benzema se ha unido la osadía con la que juega Vinícius, autor del segundo gol. Han hecho sociedad el francés y el brasileño, y aquí hay complicidad. Es como si Benzema hubiera rejuvenecido con el brasileño a su lado. La velocidad y el atrevimiento de Vinícius cada vez tienen un efecto contagio mayor. Entre todos sus compañeros. Verle correr, encarar, driblar, insistir en el uno contra uno… Toda la coctelera de Vinícius es explosiva y tiene incidencia en el juego ofensivo. Contra el Alavés, agitó el partido por la banda izquierda con Reguilón. Juntos encontraron cómo taladrar al rival hasta ponérsela en el pie para que Benzema la empujara.
El juego del Madrid tiene continuidad. Trabaja, presiona, ataca por fuera y por dentro, hay solidaridad y acumula cantidad de ocasiones. Si despliega este ritmo contra el Barcelona y el Atlético —próximos rivales—, es un equipo amenazante. Sufrirá ante dos buenos equipos, pero ya tiene armas para sembrar el terror. Y cada vez se suman más efectivos. Los lesionados ya están fuera de la enfermería. Bale fue titular, Asensio entró en la segunda parte y a Mariano le dio tiempo para hacer el tercer gol. Un Real Madrid recuperado e interesante que se ha quitado sus miedos antes de medirse a Barcelona y Atlético.
Ficha técnica
3 - Real Madrid: Courtois; Odriozola, Nacho, Sergio Ramos, Reguilón; Casemiro, Modric, Ceballos; Bale (Marco Asensio, m.63), Vinicius (Isco, m.87) y Benzema (Mariano, m.74).
0 - Alavés: Pacheco; Vigaray, Laguardia, Maripán, Duarte; Pina, Manu García (Guidetti, m.81), Wakaso; Jony, Burgui (Diego Rolan, m.68) y Calleri (Álex Blanco, m.81).
Goles: 1-0, m.30: Benzema. 2-0, m.80: Vinicius. 3-0, m.91: Mariano.
Árbitro: Santiago Jaime Latre (Comité aragonés). Amonestó a Laguardia (32), Burgui (54) y Wakaso (74) por el Alavés.
Incidencias: encuentro correspondiente a la 22ª jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio Santiago Bernabéu, ante la presencia de 53.132 espectadores.
Después de 23 partidos con Solari, el Real Madrid ha despegado. Está en su mejor momento y esto son excelentes noticias para un equipo que el 28 de octubre tocó fondo en el Camp Nou. El Real Madrid, con otra victoria (3-0) convincente, confirma que tiene identidad. Afrontará el partido de ida de la Copa del Rey contra el Barcelona sin complejos. Es un Madrid con moral, autoestima y seguridad en todo lo que hace en el terreno de juego. Seguro que puede mejorar y hay cosas que perfeccionar, pero tiene la certeza de que ante el Barça ya no hay que agachar la cabeza. Saldrá al Camp Nou con su estilo renovado y la confianza que da haber encadenado una racha de cinco partidos seguidos ganados.