Piqué, muy duro con Bartomeu: "Le pedí a Leo que se quedase, que vendría gente nueva"

Gerard Piqué puede que haya elegido el momento más inoportuno para romper su silencio. Ha estado dos meses callado y se le han presentado ocasiones y tenía temas de peso como para haber hablado. Tras el 2-8 del Bayern de Múnich habló en caliente, después del partido, pidió una renovación estructural en el club, apuntando a la directiva y ofreciéndose a marcharse. Saltó la bomba del burofax de Messi, las salidas con polémicas de jugadores como Luis Suárez, el cierre del mercado de fichajes y ahora el enfrentamiento con la rebaja salarial de la que él se negó y firmó en un comunicado conjunto con los capitanes. Pero después renovó de forma individual para acabar en el Barça hasta los 37 años.

Piqué habla antes del Clásico y apunta a la mala gestión de Bartomeu en todos estos episodios mencionados. Necesitaba dar explicaciones porque se le ha acusado de desleal por haber renovado cuando había firmado ese comunicado de rechazo en la negociación colectiva junto a los capitanes. Y habla, en una entrevista en ‘La Vanguardia’, en un momento en el que el equipo tiene que recibir al Real Madrid. Pero hay tantos asuntos extradeportivos que comentar que considera que ha llegado su momento parta mojarse sobre todos ellos.

De su renovación quiere dejar claro que ha tomado la decisión de aceptar la propuesta del club porque es barcelonista y necesita ayudar a la institución en un momento delicado. "El club me comunica, a mí y a otros jugadores, que debido a la pandemia el club sufrirá mucho económicamente y en esa tesitura el Barcelona está por encima de cualquier persona. El Barça me lo ha dado todo, así que me pongo a su disposición. Me dicen que todo el dinero al que pueda renunciar este año será cobrado en un futuro. Hacemos números y propongo una cantidad".

Es difícil de entender su postura cuando se le acusa de desleal por firmar un comunicado y a la vez asegurarse un contrato más largo. Esta es su explicación: "Como capitán defiendo los intereses del equipo y tomo la decisión de firmarlo. Y aquí somos un vestuario unido. Después dicen que el vestuario se ha roto y no sé que más. Lo hicieron cuando muchos jugadores estaban con sus selecciones, metiéndonos en el mismo saco con todos los trabajadores. A título personal cada jugador es libre de aceptar la propuesta voluntariamente del club. Otra cosa es que te obliguen de forma unilateral y que lo hagan con las formas en que lo han hecho. Ahí, la verdad, estoy en total desacuerdo".

El enfado por el 'Barçagate'

El que sale peor parado es Josep María Bartomeu, al que señala y hace responsable de una mala gestión económica y ocasionar un daño a la imagen de los jugadores con el ‘Barçagate’. La empresa que monitorizaba las redes sociales para desprestigiar a los futbolistas y los que consideraban oposición a la Junta. "Yo no quiero llevarme mal con nadie (sobre Bartomeu), pero ha habido veces... El tema de las redes sociales. Yo, como jugador del Barça, veo que mi club se ha gastado dinero que ahora nos están pidiendo. Para criticar. Ya no solo a personas externas con una relación histórica con el club, sino a jugadores en activo, y eso es una barbaridad. Le pedí explicaciones y lo que me dijo es "Gerard, yo no lo sabía". Y me lo creí. Pues después ves que, en acciones futuras, la persona encargada de contratar esos servicios todavía está trabajando en el club".

Piqué se refiere a Jaume Masferrer, empleado responsable del ‘Barçagate’, que sigue trabajando en el club. "Eso me duele mucho. Lo digo aquí porque se lo dije antes personalmente al presidente. ¿Y qué quiere que le diga? ¿Es doloroso? Sí. ¿Puedo hacer algo más? Pues no. Mi relación con el presidente puede ser cordial pero hay cosas que quedan".

El burofax de Messi

El asunto de Messi y el burofax para pedir su salida es delicado. Piqué desvela que habló poco con el argentino en esos días convulsos, pero que le envió un mensaje pidiéndole que aguantara hasta que llegara una nueva Junta directiva: "¿Messi? Yo como presidente habría actuado diferente. Le pedí a Leo que aguantara. No tuve mucho trato con él esos días porque creí que era una decisión muy personal. Recuerdo uno: "Leo, es un año, y luego viene gente nueva".

El central del Barcelona da la cara y pone en valor a Messi: "Yo me pregunto: ¿Cómo puede ser que el mejor jugador de la historia, que hemos tenido la santa suerte de disfrutar, se levante un día y envíe un burofax porque siente que no le están escuchando? Todo es demasiado chocante. ¿Qué está pasando? Leo se lo merece todo. El estadio nuevo debe llevar su nombre y luego el del patrocinador. Debemos preservar nuestras figuras, no desprestigiarlas. Me pone de los nervios".