El lío de Neymar: la mujer aporta imágenes y hay un informe médico

El lío en el que se ha metido Neymar por una denuncia de una presunta violación se va haciendo más grande. Coge unas dimensiones tan grandes como peligrosas, después de que el brasileño haya revelado públicamente los mensajes y las fotografías, de contenido sexual, con la chica en su cuenta de Instagram. La policía ha requisado el teléfono móvil del futbolista y la mujer ha aportado, de forma privada, imágenes en las que se podría ver a Neymar actuando de forma agresiva y visiblemente alterado en la habitación del hotel en París. Una información que corrobora el medio brasileño 'UOL Esporte'.

Ese mismo medio también reveló que existe un informe médico realizado a la mujer el 21 de mayo, seis días después del encuentro en París. Según el citado medio, el informe incluye imágenes que muestran hematomas en nalgas y piernas. El informe, que fue redactado por un médico particular de Sao Paulo, relata un cuadro de dolor, pérdida de peso, ansiedad y problemas gástricos tras un episodio de estrés emocional.

Las investigaciones judiciales siguen su curso después de que la Policía Civil de Sao Paulo y la de Río de Janeiro hayan requisado los teléfonos móviles. En el caso de Neymar, la situación se agrava por haber decidido emitir en un vídeo, de más de siete minutos de duración, las imágenes de los mensajes que cruzó con la chica y en los que acompaña fotografías con desnudos. El error que ha podido cometer es mayúsculo, porque en Brasil está tipificado como delito el hecho de divulgar mensajes privados con contenido sexual. El jugador del Paris Saint-Germain se puede enfrentar a una pena de cárcel de hasta cinco años por difundir las imágenes sin permiso de la chica, en este caso, la denunciante.

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Neymar se podría haber metido en un gran lío y cometido un error grave con el objetivo de pretender demostrar que fue víctima de un chantaje o una extorsión. Así se manifiesta en el largo vídeo donde quiere rebatir la denuncia por abusos y salvaguardar su honradez e imagen. “Lo que ocurrió ese día fue una relación entre un hombre y una mujer dentro de cuatro paredes. Algo que ocurre en todas las parejas. Al día siguiente, no pasó nada de más. Continuamos intercambiando mensajes”, es parte del contenido que expone el brasileño. El efecto no es el deseado porque, acto seguido, el Departamento contra los Delitos Informáticos comunicó que actuaría por la divulgación de un vídeo en el que Neymar propagó contenido sexual. El propósito del futbolista era demostrar que la relación era consentida, normal y sin violencia. Aún así, Neymar ha decidido borrar el vídeo de sus redes sociales.

Le quitan la capitanía

Los hechos ocurrieron el pasado 15 de mayo en un hotel de París después de que Neymar, según la denunciante, la citara en una habitación y entrara con síntomas de embriaguez, actuara con violencia y la relación no fuera consentida. La chica regresó dos días después a Brasil y hasta el pasado viernes no interpuso la denuncia por miedo. Neymar se encuentra en estos momentos concentrado con la Selección brasileña en Granja Comary, en la localidad de Teresópolis, para preparar la Copa de América que se disputa en su país del 17 de junio al 7 de julio. La conmoción en Brasil por lo que está aconteciendo en torno a la estrella provoca que el fútbol haya pasado a un segundo plano.

Los problemas se le acumulan a un jugador que está perdiendo prestigio y admiración no solo entre sus fans y los ciudadanos de su país. El seleccionador, Tite, antes de que se hiciera pública la denuncia por presuntos abusos sexuales, decidió quitarle la capitanía a Neymar para dársela a Dani Alves. Un hecho relevante que indica la falta de liderazgo o carisma por la que atraviesa un futbolista que es la estrella del Paris Saint-Germain, el fichaje más caro de la historia del fútbol, y que parece que tiene problemas de convivencia con otra estrella de su equipo: Mbappé. Este ya ha dejado claro, públicamente, que quiere más responsabilidad en el equipo y entiende que exige ganar más dinero, como pide más responsabilidad a un Neymar que no está destacando en los dos años que lleva en París, siendo más protagonista por asuntos extradeportivos que por su fútbol.