El poder de Sergio Ramos para elegir el entrenador del Real Madrid
No acertar en quién tiene que ser el entrenador que acabe la temporada provoca que Florentino Pérez también tenga en cuenta lo que le transmite Sergio Ramos
La influencia que pueda ejercer Sergio Ramos sobre Florentino Pérez para decidir quién tiene que ser el próximo entrenador también hay que tenerla en cuenta en unos días de indecisión en el club. En el casting para elegir cuál es el mejor sustituto de Lopetegui no hay un candidato claro que agrade o convenza al presidente y la decisión se ha vuelto a tomar, como suele ser en estos casos en el Real Madrid, por descarte. Poner a Solari con el cartel de provisional y ganar tiempo es la estrategia de los dirigentes a la espera de los primeros resultados en Copa del Rey -Melilla-, Liga -Valladolid y Celta- y Champions -Viktoria Plzen-. Florentino comparte sus dudas con el director general ejecutivo -José Ángel Sánchez-, asesores cercanos -Juni Calafat, con cargo de jefe de la sección de internacional- y también escucha a Sergio Ramos como capitán del equipo. Diferentes puntos de vista para hacerse una idea más completa y tener una visión más global de las soluciones que necesitan los problemas para salir de la crisis.
El poder que puede tener Sergio Ramos en la decisión de Florentino también marca la pauta sobre lo que conviene o no a una plantilla que tiene necesidades de recuperar confianza y autoestima. Las palabras del capitán no son definitivas, ni mucho menos determinantes, porque el presidente tiene la última palabra y suele actuar con bastante recelo si detecta que quien le aconseja lo hace por capricho o intereses particulares. Pero la opinión de Ramos también condiciona en un momento en el que Florentino no quiere errar un segundo tiro. Ha fallado en la elección de Florentino y existe el miedo a precipitarse con los candidatos que suenan -Antonio Conte y Roberto Martínez-.
No acertar en quién tiene que ser el entrenador que acabe la temporada provoca que el presidente tenga cada vez más en cuenta lo que le transmite Sergio Ramos como portavoz del vestuario. El capitán fue muy claro después de perder en el Camp Nou cuando dijo “el respeto se gana, no se impone. Y la gestión del vestuario es más importante que el conocimiento técnico”. Palabras que con el calentón que tenía el presidente fueron mal encajadas en un primer momento y ya más en frío se aclararon. Sergio Ramos, como todos los que asesoran a Florentino, habla desde la experiencia para no precipitarse ni equivocarse con el sustituto de Lopetegui. Mejor Solari, que es de la casa, que empezar de cero en el mes de noviembre y provocar más daños. Postura que se debate en el club.
La reunión de Ramos con Solari
El planteamiento de que se pueda quedar Solari no se descarta porque empiezan a circular los mensajes por la casa blanca que dicen: “Hay que ayudar a Solari”. No sólo cuentan los mensajes sino también los hechos. Y Sergio Ramos ha reaccionado rápido al despido de Lopetegui para dejar de guardar luto en el vestuario y ponerse del lado del técnico que asciende del Castilla al primer equipo. El capitán viajó a Melilla y antes de coger el avión dejó un mensaje en las redes sociales: “Somos conscientes y nos sentimos responsables de esta situación. Pero no es momento de hablar. Es momento de actuar. El primer paso empieza hoy”.
Somos conscientes y nos sentimos responsables de esta situación.
— Sergio Ramos (@SergioRamos) 31 de octubre de 2018
Pero no es momento de hablar, es momento de actuar. El primer paso empieza hoy.
We’re aware and feel responsible for this situation. But this is no time to talk, it’s time to act. Today’s the first step #HalaMadrid pic.twitter.com/SUB59Ot8nT
La reunión entre Solari y Sergio Ramos ha tenido que ser productiva porque el capitán vuelve a recordar que la temporada no está acabada y hay mucho margen de mejora para recuperar el pulso competitivo. Es el paso al frente que pidió Florentino a Ramos antes del Camp Nou -"hay que poner más empeño", exigió el presidente- y no se produjo. A Lopetegui se le despidió con un duro comunicado y con Solari se quiere comprobar si puede producirse un encaje al 'estilo Zidane'.
La primera rueda de prensa de Solari como entrenador del Real Madrid gustó en líneas generales por recordar que esta plantilla es un grupo de campeones y guerreros. Al margen de la brava frase cuando pronunció lo de "los dos cojones". Los jugadores reclaman que se les respete también en los malos momentos. En su mano está ya hacer autocrítica, ayudar a Solari para quitarle la etiqueta de provisional y demostrar que pueden volver a ser campeones.
La influencia que pueda ejercer Sergio Ramos sobre Florentino Pérez para decidir quién tiene que ser el próximo entrenador también hay que tenerla en cuenta en unos días de indecisión en el club. En el casting para elegir cuál es el mejor sustituto de Lopetegui no hay un candidato claro que agrade o convenza al presidente y la decisión se ha vuelto a tomar, como suele ser en estos casos en el Real Madrid, por descarte. Poner a Solari con el cartel de provisional y ganar tiempo es la estrategia de los dirigentes a la espera de los primeros resultados en Copa del Rey -Melilla-, Liga -Valladolid y Celta- y Champions -Viktoria Plzen-. Florentino comparte sus dudas con el director general ejecutivo -José Ángel Sánchez-, asesores cercanos -Juni Calafat, con cargo de jefe de la sección de internacional- y también escucha a Sergio Ramos como capitán del equipo. Diferentes puntos de vista para hacerse una idea más completa y tener una visión más global de las soluciones que necesitan los problemas para salir de la crisis.