Zidane busca el chivato del vestuario que sopla las alineaciones

“Tú vas a ver quién juega mañana”, es la punzada que lanza Zidane a los periodistas que osan preguntarle por las posibilidades que tiene un jugador en concreto de entrar en el once. En los códigos zidanescos, ser leal y guardar los secretos del vestuario es algo sagrado. Por eso no hay cosa que más le moleste al galo que se produzca una filtración del once, una conversación privada e, incluso, el alcance de una lesión. Es celoso de la privacidad del grupo y recela de los chivatos. El último enfado del técnico se produjo en el partido de ida ante el Paris Saint Germain en el Bernabéu cuando la 'Cope' adelantó, al mediodía y con antelación, la titularidad de Isco. Zidane mantenía el secreto con el doble efecto de tener con los ojos bien abiertos a todos los jugadores y ocultar la estrategia a Unai Emery. Pero hubo un ‘garganta profunda’ y a Zizou le hirvió la sangre. “¿Cómo puede ser que haya salido la alineación?”, dijo alterado. Busca al chivato, al soplón del vestuario o del entorno.

Igual que le molesta que se filtre un once, le escuece cuando salen nombres de bajas o posibles fichajes que, como resabiado, le hace dudar del aparato propagandístico que maneja el club para llevar la actualidad deportiva y extradeportiva por el camino más conveniente. Claro que hay terreno abonado para la especulación, aunque conoce cómo se manejan en el club para lanzar el globo sonda y reconducir la realidad. Lo de Neymar es recurrente y no daña. Incluso les divierte al técnico y los jugadores eso de ponerle la camiseta del Madrid para hacer 'de rabiar' a los del Barça. Es un asunto muy morboso.

Pero hay otras situaciones que han sido tensas y desagradables para el entrenador y los jugadores afectados por informaciones que han podido desestabilizar el grupo. No hay que irse muy atrás para señalar la postura intransigente que tuvo que adoptar el entrenador ante el presidente para no ceder ni un milímetro en el fichaje de Kepa. Cada portada de Arrizabalaga, noticia o una pregunta en la sala de prensa le daban retortijones al galo. Quizás por eso también se explica cómo ha sido su reacción, a veces exagerada e incluso apasionada, para dejar claro que su portero es Keylor Navas e ir a más y cerrar la puerta a cualquier salida o entrada en el mercado de invierno. Noticias filtradas que han hecho daño y que se encargó de desactivar.

El sexto hombre contra la Juventus

Ahora estamos en un nuevo debate mediático y con la expectación, dentro de la plantilla, por saber quién será el elegido para entrar en el once contra la Juventus en Turín. Isco, Bale, Asensio o Lucas Vázquez compiten por una plaza para cerrar el puzzle con Casemiro, Kroos, Modric, Benzema y Cristiano Ronaldo. Salvo sorpresa mayúscula, éstos son los cinco elegidos de medio campo hacia delante para empezar el partido en Turín. Zidane guarda con su habitual obsesión el sexto hombre. Hay preferencias para todos los gustos. Si hubiera que guiarse por la resaca de las selecciones, el elegido es Isco. Si preguntas en el club te dicen que por qué no juega Bale. Y si hay que rescatar el plan que mejor funcionó, el que eliminó al PSG, hay que apostar por Lucas y Asensio, con el 4-4-2, aunque aquí sobraría uno de los cinco titularísimos.

Sea quien sea el jugador que guarda en secreto, Zidane se ha visto obligado a tener que advertir a la plantilla y su grupo de trabajo que no le gustan nada los chivatos y que bastante presión tienen con ganar la Champions para encima dar pistas al rival porque tener grietas lo califica de alta tradición.