Pérez y Castrillón venden a Villar: "No se movía un euro sin que lo supiera"
El exsecretario general y el exadministrador de la Federación Española de Fútbol vuelven a señalar al principal imputado en el caso Soule de tomar todas las decisiones económicas
El exsecretario general de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Jorge Pérez, y el exadministrador del organismo, José María Castrillón, arremetieron este lunes contra el suspendido presidente Ángel María Villar en el marco del caso Haití, en el que el Juzgado número 4 de Majadahonda investiga el desvío de fondos que iban a ser inicialmente destinados a proyectos sociales en el país caribeño. Los exdirectivos aseguraron que el principal acusado conocía todos los movimientos de dinero que tenían lugar en la federación y que dependían directamente del vicepresidente económico, Juan Padrón. No se movía ni un euro de entrada ni de salida si no pasaba por ellos, aseguraron los que fueran lugartenientes del máximo dirigente federativo.
La declaración de ambos, por lo tanto, apuntó directamente a la columna vertebral de la línea de defensa que esgrimió Villar el pasado 5 de julio, cuando declaró en calidad de investigado en el citado caso. Ese día, el presidente federativo se desmarcó de raíz de cualquier responsabilidad sobre asuntos económicos. "En 28 años que llevo de presidente, creo que he firmado un cheque en mi vida", arguyó el acusado con el fin de desvincularse de la polémica decisión que llevó a no ejecutar la partida destinada al proyecto social, que inicialmente preveía la puesta en marcha de escuelas de fútbol, jornadas sobre la igualdad en el deporte y campus de tecnificación para niños en Haití.
Pérez, que como Villar y Castrillón está imputado en esta causa, explicó este lunes que él fue defenestrado en 2014 y que desde entonces no tenía ni voz ni voto en las decisiones federativas, una afirmación que ha sido respondida con una rotunda conclusión por parte de las dos fiscales anticorrupción, Esther González e Inmaculada Violán. "Entonces firmaba usted en barbecho", le dijeron las representantes del ministerio público después de que Pérez asegurara que prácticamente firmaba sin mirar y simplemente tras asegurarse de que el documento había pasado por el departamento jurídico.
Únicamente se negó a firmar un escrito que, según relató él mismo, tanto Villar como Padrón pretendían que suscribiera para comprometerle en el asunto de Haití y que fuera él el que se comiera el marrón. Tras rechazar implantar su rúbrica en el documento, continuía, al día siguiente le llegó un burofax que ponía fin unilateralmente a la relación contractual de Pérez con la federación.
Las fiscales realizaron decenas de preguntas tanto a Pérez como a Castrillón y a la directora de la fundación federativa, Isabel Navas, que también declaró como investigada. Los tres estuvieron respondiendo durante más de seis horas las cuestiones de las fiscales, de la defensa y de la acusación, ejercida por el presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores y excandidato a presidir la RFEF Miguel Ángel Galán. Tanto este último como la Fiscalía podrían solicitar ahora la imputación de Padrón, dado que su nombre ha salido vinculado al de Villar en relación a las responsabilidades económicas de ambos sobre las subvenciones de Haití.
Navas, por su parte, sí salió en defensa de Villar al tiempo que, como sus excompañeros, se desmarcó de responsabilidad alguna en materia económica. Aseguró que ella era una mandada, que le decían que metiera unas determinadas facturas y qu las metía porque era "una simple administrativa". Pérez, sin embargo, destacó de ella que tiene una carrera, que empezó como becaria, que luego pasó a ser auxiliar administrativa y posteriormente responsable de la fundación, que —según añadio— era una institución que se confundía con la propia RFEF.
La declaración de Navas, además, dejó en evidencia la afirmación de Villar de que se había enterado del expediente que abrió el Consejo Superior de Deportes después de que lo publicaran los medios de comunicación en octubre de 2016. La exdirectora de la fundación contradijo a su exjefe y aseguró que el presidente federativo ya le había hablado de ello en una llamada personal seis meses antes.
Junto a los acusados, las declaraciones prestadas en el marco del caso Haití en el Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda también tienen como protagonistas a los abogados. En la sala se concentran cada vez que hay actuaciones presenciales cinco de los letrados de referencia de los tribunales madrileños, presentes en actuaciones tan relevantes como los casos Lezo, Soule o el conflicto entre Elisa Pinto y Javier López Madrid, entre otros. El abogado Luis Rodríguez Ramos, por ejemplo, es el representante procesal de la RFEF; Javier Sánchez Junco, el de Villar; Esteban Mestre, el de Castrillón; Ignacio Gordillo, el de Navas; e Ismael Franco, el letrado de Galán.
El exsecretario general de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Jorge Pérez, y el exadministrador del organismo, José María Castrillón, arremetieron este lunes contra el suspendido presidente Ángel María Villar en el marco del caso Haití, en el que el Juzgado número 4 de Majadahonda investiga el desvío de fondos que iban a ser inicialmente destinados a proyectos sociales en el país caribeño. Los exdirectivos aseguraron que el principal acusado conocía todos los movimientos de dinero que tenían lugar en la federación y que dependían directamente del vicepresidente económico, Juan Padrón. No se movía ni un euro de entrada ni de salida si no pasaba por ellos, aseguraron los que fueran lugartenientes del máximo dirigente federativo.