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Alonso y Sainz sacan pecho en China, donde el circuito te tira a la cabeza todo lo que tiene
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LANDO NORRIS CONSIGUIÓ LA POLE

Alonso y Sainz sacan pecho en China, donde el circuito te tira a la cabeza todo lo que tiene

La pista de Shanghái ya esperaba con todo tipo de obstáculos a la Fórmula 1. En la primera jornada se unieron la lluvia y el viento para complicar más la vida a pilotos y equipos

Foto: Fernando Alonso estuvo a punto de lograr la pole para la carrera sprint. (EFE/Alex Pavlevski)
Fernando Alonso estuvo a punto de lograr la pole para la carrera sprint. (EFE/Alex Pavlevski)

Si el retorno a la pista de Shanghai y la demorada vuelta auguraba un Gran Premio de China intenso, la primera jornada no ha defraudado. Todo apunta a que lo mejor está aún por llegar. Sobre todo para Fernando Alonso y Carlos Sainz, la representación española.

A equipos y pilotos se les arroja este fin de semana todo tipo de variables e incertidumbre, en una suerte de endiablada conspiración de factores. ¿No querías caldo? Pues dos tazas adicionales, y la lluvia y viento para dar la bienvenida al formato sprint, que deparaba una primera parrilla de salida que cualquier aficionado firmaría para un gran premio.

Lando Norris cuajaba la vuelta "menos mala" para arrancar primero el sábado por la mañana con Fernando Alonso tercero y Carlos Sainz quinto. La fiesta de Shanghái acaba de empezar. La lluvia seguirá danzando por arriba también en la carrera sprint.

Rizar el rizo

Circuito que no se visita desde 2019, generación de monoplazas que nunca ha rodado en esta pista, neumáticos distintos a los de aquellos tiempos… ¿No es suficiente? Llega el formato sprint que deja una sola hora de libres para poner a punto las máquinas, pasando directamente a los clasificatorios de aquella. Pues llegaba más madera con la lluvia a mitad de la sesión y un viento que, según su dirección, en determinadas partes de la pista convertía a bestias de 1.000 cv en pesos pluma.

Pero todavía quedaba rizar el rizo, como esa famosa primera curva de Shanghái. Los organizadores decidieron reasfaltar la pista, o repintarla, o como se quiera llamar ese proceso que desconcertaba a equipos y pilotos. "Realmente, es algo muy singular, y algo que no hemos visto recientemente en los circuitos de Fórmula 1", reconocía Carlos Sainz el jueves. Ni siquiera Pirelli había sido informado.

Así saltaban los pilotos a la única de sesión de libres que se convertía en una suerte de lotería y tiro al aire. Las simulaciones ofrecían una puesta a punto, y todos probaban suerte y lanzaban los dados al aire. Con recordar que Stroll lideró la sesión y Fernando Alonso terminaba penúltimo a dos segundos y medio de su compañero…

"Como hielo"

Si equipos y pilotos buscaban el norte con tan pequeña brújula, la sesión clasificatoria arrojaba todo el estrés posible a los protagonistas. Con tiempo más limitado en cada bloque y sin cambiar neumáticos, el Q1 tenía lugar en seco. Los sospechosos habituales confirmaban su candidatura para quedarse fuera, Williams y Alpine, pero en esta ocasión se unía un sorprendente Tsunoda.

Entonces meteorología quiso unirse a la fiesta con una lluvia amenazante en el Q2. Los monoplazas se apelotonaban en la salida de boxes para intentar cuajar una vuelta antes de que la pista acabara de mojarse. El tráfico urbano era similar al de una ciudad china. Caían gotas y a una pista sin grip ( "como hielo" decía Verstappen) se añadía un asfalto cada vez más impredecible según la curva. Saltó la sorpresa y se queda fuera George Russell, no tanta cuando también Lance Stroll tampoco pasaba al Q3.

Fue entonces cuando ya se abrió del todo el techo del circuito y empezó a caer agua. Los pilotos hacían malabarismos para mantenerse sobre un asfalto enrevesado, en una pista con numerosas curvas rápidas y largas que convertían cada metro en una trampa. Se trataba de sobrevivir más que de brillar. Todos cometían no un error, sino varios en cada vuelta. La temperatura del neumático en muchos se resistía a dar lo mejor de la goma.

Norris remató en los instantes finales con una vuelta que primero fue anulada y después recuperada de manera sorprendente ante el posicionamiento del McLaren en pista. El británico se convertía en el primer piloto en lograr la pole en una carrera sprint. Verstappen también cometía su buena dosis de errores y terminaba cuarto.

Alonso: "Bastante estresante"

Por unos instantes parecía que Alonso podía lograr la pole, aunque Norris y Hamilton le superaron ‘in extremis’. En todo caso, nada como las aguas revueltas para pescar con el quinto -o cuarto, según- monoplaza de la parrilla. "Fue una clasificación de Sprint bastante estresante. En el Q1 mirábamos el radar para comprobar si iba a llover. Progresamos y llegamos con seguridad al Q3 en octava posición antes de que lloviera más fuerte", explicaba el español al terminar.

De haber completado su vuelta un par de minutos más tarde, quizás Alonso habría salido primero. "A medida que las condiciones cambiaron, éramos bastante competitivos. Los neumáticos parecían mejorar con cada vuelta, pero el circuito empeoraba con el aumento de la lluvia. Era difícil juzgar el nivel de agarre y cuánto riesgo correr", explicaba el asturiano. La lluvia se espera antes de la carrera, que incluso podría empezar con el asfalto mojado, lo que daría al español opciones de podio.

Sainz: "hemos salvado los muebles"

Sainz descubrió en los libres que su monoplaza necesitaba retoques, pero no será hasta después de la carrera sprint cuando pueda llevarlos a cabo. De momento, era cuestión de salvar los muebles y lo lograba con la quinta posición, un puesto por detrás de Max Verstappen.

"Ha habido un Q1 y Q2 en seco en los que hemos podido ir progresando sin problemas, preparando el coche para tirar a tope en el Q3, pero se ha puesto a diluviar y con el neumático intermedio hemos esperado mucho en la salida del pit lane, y tanto a Charles como a mí nos ha costado mucho calentarlo en esa primera vuelta. Creo que él se ha chocado, y yo de milagro no me ha pasado lo mismo", explicaba el madrileño al terminar.

“Hemos sufrido mucho con las temperaturas y no hemos podido hacer un buen Q3, pero aun así he salvado el día con ese quinto puesto y de ahí lucharemos mañana”. Sainz explicaba las complicadas condiciones finales de la sesión. “Está soplando mucho el viento, y hay curvas donde el grip no es malo, y curvas que sopla de culo y con estos coches de aerodinámica tan sensible, hay curvas que tienes cero grip, y ya si le añades el asfalto mojado y el neumático intermedio, por ejemplo en la última curva era casi imposible de mantenerse por dentro. Este es un trazado muy difícil para llegar directo a una quali”.

Para el resto del fin de semana, el madrileño recordaba que después de la carrera sprint “se abre el parque cerrado, y a mí me gustaría hacer un par de ajustes después de la carrera, porque no voy 100% cómodo, en la sprint habrá que sobrevivir con lo que tenemos”.

Si el retorno a la pista de Shanghai y la demorada vuelta auguraba un Gran Premio de China intenso, la primera jornada no ha defraudado. Todo apunta a que lo mejor está aún por llegar. Sobre todo para Fernando Alonso y Carlos Sainz, la representación española.

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