Fernando Alonso y la paliza con su nuevo Alpine: más mochila y menos alforjas

Lejos de tomarse la temporada 2021 como una transición hacia el cambio reglamentario de 2022, muchos equipos entre los que destaca Alpine han jugado fuerte y presentan novedades significativas. Lo mejor de momento, es que estas 'revoluciones' en el caso del Alpine del piloto español, no se han traducido en problemas de fiabilidad y le han permitido realizar una jornada casi maratoniana. Nada menos que 127 vueltas completó Fernando Alonso en el trazado del circuito de Bahrein, lo que viene a ser más o menos un ‘palizón’ de más de 700 kilómetros en un día. Datos más que suficientes para despejar cualquier tipo de duda, por si a alguien le quedara, sobre la forma física y el grado de preparación del piloto asturiano en su regreso a la Fórmula 1.

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Es una gran noticia para empezar que el Alpine haya funcionado como un reloj, libre de cualquier tipo de problemas, más aun teniendo en cuenta que no ha sido el caso de otros equipos como Mercedes, con salida de pista incluida de Hamilton, o un espectacular desprendimiento de la carrocería en el RedBull de ‘Checo’ Pérez. El coche del piloto español ha sorprendido en las imágenes de televisión en sus formas respecto al resto de coches por su voluminosa ‘mochila’ en la toma de aire justo detrás del piloto, que ha crecido de forma muy notoria a diferencia de todos sus rivales, a cambio de presentar unas ‘alforjas’ o pontones laterales reducidos a la mínima expresión.

Alonso da el visto bueno

El director técnico del equipo Alpine F1, Marcin Budkowski lo explicaba así: "No es nada nuevo realmente intentar adelgazar los pontones, pero hemos dado un paso más y hemos decidido reubicar y modificar todo el conjunto, colocando algunas piezas de los laterales en el espacio justo detrás de la toma de aire. Sabíamos que esto podría generar carencias, en el sentido de elevar el centro de gravedad del coche, pero por lo general, las ventajas aerodinámicas que generan estos cambios lo compensan. Sé que da una forma espectacularmente voluminosa a esa parte del coche, pero lo cierto es que para nosotros funciona’.

En un tono entre relajado y con cierta confianza, Alonso confirmaba al término de los entrenamientos estas buenas sensaciones: "Si, El coche va bien, creo que tenemos aún que entender mejor las características del nuevo paquete aerodinámico adaptado a las normas de este año, pero creo que estamos cumpliendo el programa que habíamos previsto hace dos días, ayer con Esteban y hoy conmigo". La vuelta rápida de Fernando a lo largo del día se realizó con el compuesto duro, que es el elegido para realizar preferentemente la puesta a punto. El objetivo es rodar el mayor número posible de vueltas para reforzar el discurso técnico del equipo y queriendo quizá también avisar a los medios y aficionados que están siguiendo los test con una expectación no vista desde hace mucho tiempo. El asturiano se apresuró a señalar: "La calificación será en dos semanas, entonces será el momento de poner los superblandos, no ahora, ni siquiera mañana tampoco".

De sus palabras se deduce que el trabajo gira alrededor de recabar la mayor cantidad posible de datos. Miedo da imaginar la montaña de información que va a tocar desgranar a los ingenieros, tanto durante estos días de test, como en los previos al Gran Premio de Bahrein a disputar en dos semanas.

Poner la rueda en la moneda

Ese trabajo intenso mano a mano con los ingenieros es precisamente uno de los aspectos que más quiso destacar Budkowski sobre Fernando. "Además de ser un piloto muy rápido, es un grandísimo profesional. Ha estado mucho tiempo en este deporte y en esta categoría. Es extremadamente completo y muy profesional con la información que transmite a los ingenieros. Es genial trabajar con él y desde este punto de vista va a ser muy útil para desarrollar el coche”.

El propio Fernando siempre ha reconocido que lleva un alma de ingeniero dentro de él. Su manera de profundizar y tratar de entender las razones por las que un coche reacciona de una forma de otra ante los cambios es de una enorme ayuda para los técnicos del equipo. Al final, por mucha telemetría que se tenga, la sensibilidad del piloto y la capacidad del mismo para explicarla evita a los técnicos dar palos de ciego y que, de este modo, las etapas de evolución se vayan cumpliendo, sin necesidad de dar pasos atrás fruto de erróneas interpretaciones.

Para el ingeniero, además, existe un factor clave para encontrar la correlación entre los datos sobre el papel y los datos que surgen cuando se trasladan a la pista y es la precisión del piloto en el ‘vuelta a vuelta’. A mayor capacidad de hacer vueltas seguidas ‘perfectas’, mayor seguridad recibe el ingeniero para tomar decisiones, pues le descuenta de la ecuación cualquier factor externo por errores de pilotaje que pudieran generar confusión. Hasta los expilotos Martin Brundle y Karun Chandhok, que estaban retransmitiendo para la TV inglesa los entrenamientos dieron cuenta de este detalle: "Es impresionante -señalaban con asombro-, ¡Sería capaz de pasar vuelta tras vuelta exactamente por el mismo sitio pisando una moneda!".

Cerca del Red Bull de Pérez

Además, todo el trabajo de estos días es la continuación y puesta en práctica de una intensísima labor fuera del foco público, pero no por ello menos exigente e intensa, como son las horas de simulación en la sede del equipo. Slgo que de nuevo Budkowski quiso recalcar sobre el papel clave del campeón español en este sentido: "Fernando lleva unos cuantos meses con nosotros, vino a las carreras el año pasado, ha pasado mucho tiempo en el simulador y, aunque la preparación ha sido interrumpida por su accidente y por los problemas añadidos de viajar al Reino Unido, ha estado en el simulador al principio de semana. Está muy involucrado con los ingenieros y con el desarrollo del coche. De hecho, incluso ha empezado a hacer test del simulador para el de 2022”.

Mas allá de los tiempos que siempre son relativos en este tipo de pruebas, cabe destacar que en las comparativas más o menos directas que pudieran verse de Fernando con su Alpine, acabó prácticamente con el mismo crono que Checo Pérez con RedBull a igualdad de neumático. Esto supone sin duda un mensaje positivo y de esperanza de cara a la jornada final donde Esteban Ocon y el propio Fernando se alternarán al volante con el objetivo de seguir sumando kilómetros y quién sabe si al final del día, buscar algún tiempo 'cañón'. Munición en la 'mochila' parece que llevan.